Parte 14

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-Un poco pesada, me siento agotada y apenas vamos en la segunda semana- le dije sincera - ¿Y la de usted? - le pregunte para que no muriera ahí la conversación.
-Ya te e dicho que no me hables de usted, apenas te gano por unos años - y sonrío - mi semana también estuvo pesada, ya que aparte de la universidad, tengo mi consultorio y a veces si es pesado salir de la universidad y tener pacientes agendados, pero bueno, es parte del trabajo.
-Vaya, no sabía que tenías un consultorio- le dije sorprendida
-¿En serio? Lo dije en mi presentación el primer día, hasta les di la dirección- se rio al terminar de hablar, rayos, se notó la poca atención que le pongo - mira, ya llegamos- dijo y estacionó el coche - vamos.
Salí del coche y la seguí, llegamos y era un lugar muy agradable, no lo conocía, tenía una segunda planta al aire libre y hacía allá fuimos.
-Buenas tardes, ¿Ya saben qué ordenar o les dejo el menú?- pregunto una chica del café
-Yo quiero un baguette de pollo y un té helado- pidió Mariana - ¿Quieres ver el menú Romi? - me preguntó.
-Pediré lo mismo que tú - le conteste, la chica lo anoto y se fue.
Mientras esperábamos nuestra comida, Mariana comenzó a hablar.
-Ahora si podemos hablar, ya que no hemos tenido la oportunidad, gracias por aceptar venir a comer conmigo- Me dijo sonriendo, que hermosa sonrisa tiene.
-No tienes que agradecer, gracias a ti por invitarme- le conteste.
-Bueno, lo que quería hablar contigo es sobre lo qué pasó en tu casa el otro día, para empezar, no sabia que iba a tu casa, en serio.
-No te preocupes, si te creo- lo note cuando me viste ahí- le dije un poco divertida.
-Así es y lo qué pasó con tu hermano, ¿en serio está todo bien? - en ese momento llegó nuestra comida- provecho.
-Gracias e igualmente, volviendo a lo de mi hermano, no te preocupes, solo estaba jugando y todo está bien, le conteste con una sonrisa.
Bueno y hablando de lo qué pasó ese día en tu casa- se puso un poco seria y me asusté- la verdad es que tenía muchas ganas de besarte - No lo puedo creer, me va a dar un infarto - eres muy linda.
Eran demasiadas cosas que procesar en un momento y creo que noto mi cara de sorpresa.
-Romi, ¿estás bien? Perdón por ser tan directa pero - en ese momento la interrumpí
-No, espera, es que no pensé que te pareciera linda
-Claro que lo eres y perdón si te lo estoy diciendo así, pero es que llamaste mi atención desde el primer día de clases.
-Es mucho que procesar - dije sin darme cuenta que esas palabras salieran de mi boca
-Lo entiendo y quiero que tomes todo con calma, no pensaba decírtelo tan pronto, pero es que no puedo ocultarlo más.
-La verdad es que tengo que confesarte que también llamaste mi atención desde el primer día que te vi.
-¿En serio? Vaya, me tomas por sorpresa jaja pero lo pude notar el día que intente besarte y no te quitaste- sonrió de lado.
-En mi defensa, me quede en shock ese día- dije algo tímida.

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