Quiéreme Si Te Atreves

Capítulo 20

Al día siguiente, me armé de valor y fui al hospital a verla, al llegar vi a su madre en la sala de espera

—Buenos días señora ¿Cómo está su hija?
—Mal, los doctores nos dijeron que esta muy grave ya que llegó muy delicada y están haciendo todo lo posible por salvarla pero es muy probable que no sobreviva—exclamó mientras no dejaba de llorar, se notaba que no había dejado de hacerlo en toda la noche
—Tranquila señora todo va a estar bien, ya verá que su hija se salvará
—Ya no lo se, todo esto es mi culpa si yo hubiera sido una buena madre y le hubiera prestado atención cuando más me necesitaba mi hija no sería como es y no estaría pasando todo esto, yo ni siquiera sabía que se cortaba
—Señora su hija se cortaba desde que su padre murió
—¿Eres amigo de mi hija? ¿Qué más te dijo?
—Pues de hecho soy su novio, y pues me contó muchas cosas: Me dijo que se empezó a cortar desde que su padre murió y que sus hermanas la molestaban por eso y que usted no le hacía caso por que se la pasaba trabajando
—Cometí muchos errores con ella, quisiera que despertará para poder decirle que me perdoné
—Estoy seguro de que despertará muy pronto, ya verá que si

Minutos después apareció un doctor en la sala

—Familiares de Vanessa Reeve
—Si, somos nosotros ¿Que pasó doctor como esta mi hija?
—Pues mire afortunadamente logramos estabilizarla pero la mala noticia es que. . . esta en coma
—¿Y usted cree que despierte?
—Pues si reacciona favorablemente a las medicinas y a los estímulos es muy probable que despierte dentro de unos meses o semanas
—Está bien doctor hagan lo que tengan que hacer
—Le prometo que haremos lo posible por qué su hija despierte lo más pronto posible
—¿Podemos entrar a verla?
—Por supuesto, acompañeme
—Gracias doctor

La madre de Vanessa se fue con el doctor, y después de un rato salió y me dijo
—¿Quieres pasar a verla?

Sin dudarlo asenti, el doctor me llevo a la habitación en donde la vi conectada a muchos aparatos; sin pensarlo me acerqué a ella lentamente y le di un beso en la frente y le dije

—Vanessa, mi amor soy yo Santiago. . . Los doctores me dijeron que tal vez pronto despiertes

Empecé a llorar

—Mi amor, tienes que ser fuerte tu no te puedes morir, por qué si mueres no se si resistire algo así. . . . Sabes nunca había sentido algo tan real por alguien. Y aunque no puedas oírme—Tomé su mano.—quiero decirte que te amo con todo mi corazón y te prometo que voy a estar aquí contigo todos los días hasta que despiertes. . . . ¿Te acuerdas cuando me dijiste que no te volverías a cortar y de la carta que te mande hace poco? Pues se que no pudiste cumplir la promesa pero eso ya no importa y sobre la carta quiero decirte que yo no te mentí ya que todo lo que dije era real. . .Bueno espero que despiertes pronto

Me alejé de ella y en su mano coloqué una rosa blanca, y antes de irme la contemplé por un instante. . . . . a pesar de que tenía miles de cables conectados a ella, de todos modos se veía hermosa como la rosa que puse en su mano. . . . . De repente vi que abrió los ojos. Me acerqué y le dije

—¿Vanessa me escuchas?—pero no me respondió, solo volvió a cerrar sus ojos, supuse que había vuelto al coma, después me marché de ahí. Y como le había prometido ese día volver todos los días para cuidarla así lo hice, tanto yo como su madre estuvimos ahí cuidandola durante los siguientes 6 meses