Helluva Boss: Moxxie y la locura que es el día a día (Moxxie x Millie)

Capitulo 39: Invasión a la mega tienda

¿Qué les puedo decir? era un día lento en la oficina. No pasaba nada de nada. Incluso Bert no tenía ningún tipo de comentario sexual o estúpido. Había algo en el aire que me daba la sensación de que algo andaba mal. Tal vez me haya comido algo en mal estado. Pero eso no explica nada sobre el día tan lento. ¿Qué hubiera pasado si en vez de tomarme esa leche ligeramente vencida porque Millie me dijo "Está bien, cariño. ¿Qué es lo peor que puede pasar? Me hubiera tomado mi café negro como la noche? ¿Por qué me estoy preguntando esto? Estuve tomando demasiados turnos nocturnos ¿Siquiera se dice así?.

Nuestro jefe salió de su habitación preocupado. El estaba yendo de un lugar a otro jugueteando con sus dedos. Algo pasaba.

-¿Qué pasa?-pregunté

"Creo que sé por qué el día va tan lento" dijo el jefe

-¿Se abrió un portal interdimensional que succiona a todos nuestros clientes dejándolos en eterna agonía en un vacío sin fin?-preguntó Bert

"No exactamente" dijo el jefe

-¿Entonces qué es?-preguntó Octavia

-Es la tienda de al lado-dijo Deimos

"Exactamente" dijo el jefe

-Ahí tienen de todo. Desde frutas hasta pianos. Si buscas bien te puedes comprar un auto nuevo en oferta-dijo Deimos

-¿Como sabes lo que hay ahí?-pregunté

-Porque yo trabajé en ese lugar, Moxx-dijo Deimos

-Ok. ¿Cual es el plan entonces?-pregunté

"Es algo drástico que no me gusta hacer pero..." dijo el jefe

¿Que podrá ser?

"Vamos a tener que invadirlos y destruir su tienda" dijo el jefe

-¿Qué?-pregunté

-¿Huh?-dijo Deimos

Octavia no dijo nada. Solo se quedó mirando.

-¡Oh, si!-dijo Bert

Miré a nuestro jefe con una pizca de decepción y duda.

"Es lo único que nos queda para mantenernos a flote" dijo el jefe

-Me rehúso-dijo Octavia

-¡¿COMO PUEDES DECIR ESO?! ¡EL TE DIO ESTE TRABAJO Y CUANDO EL TE PIDE UN MINIMO FAVOR LO RECHAZAS! Me das asco-dijo Deimos tomando a Octavia por su camisa

"Ella puede quedarse aquí conmigo"

El jefe nos dio suéteres negros y una mascara para ocultar nuestra identidad. Nos subimos a una camioneta con otros mercenarios que el jefe contrato.

¿De verdad vamos a hacer esto? Hace mucho que no maté a alguien. ¿Qué pasa si me matan? Por poco lo hicieron la última vez. Por lo menos tengo que avisarle a Millie

Llamé a Millie. Su voz tan dulce atendió el teléfono pero yo no tenía el coraje de contarle lo que iba a pasar. Hice mi mayor esfuerzo para que las palabras salieran de mi boca. No tuve otra opción que colgar el teléfono.

Llegamos a la tienda. Los mercenarios salieron primero porque ellos ya estaban armados hasta los dientes. Tomé una pistola del baúl. Deimos una escopeta y Bert una ametralladora.

-¡Hagamos esto!-gritó Bert

La tienda era enorme. Había filas y filas de productos. Parecía que no terminaba.

No me puedo distraer ahora pensé

Di un disparo de advertencia al techo. Fui hasta el micrófono del telecomunicador y anuncie:

-Están siendo invadidos... Emmm uhhhh... No se me ocurre nada mas-dije

-¡Dame eso!-dijo Bert

Bert tomó el micrófono.

-¡ESTÁN SIENDO INVADIDOS POR EL STAR MARK. QUÉDENSE AQUÍ O MUERAN!-gritó Bert

-Eso no tiene nada de sentido. Además de que nos dieron máscaras para ocultar nuestra identidad-dije

-¡Cuidado!-gritó uno de los mercenarios

Una fila de carrito se estaba acercando peligrosamente a mi. El mercenario me empujó justo a tiempo para esquivarlos. Ojalá pudiera decir lo mismo por el mercenario que fue cortado a la mitad.

Pasé la sección de las cajas. Otra fila de carritos se acercaba. Yo dí un salto y me subí encima de ellos. Miembros de la tienda también se subieron, dos para ser exactos. Desenfundé mi pistola pero ellos me la quitaron con un golpe de una escoba directo a mi mano. Hicieron unos trucos con las escobas para fanfarronear. Parecia algo salido de Star Wars. Cuando uno atacó yo tomé el palo de la escoba y se lo quité. Saqué a los dos empleados del carrito con un golpe. No me di cuenta que los carritos estaban a punto de golpear la pared de la sección de electrónicos. Me tomó un poco de tiempo ponerme de pie. Al hacerlo alguien estampó mi cabeza contra uno de los televisores. El tipo era otro empleado de la tienda usando un cable de televisor como látigo.

-¿Qué haces en estos lares, fierro pariente?-preguntó el empleado (Soy argentino, no se si así habla la gente de ahí)

-Por el amor de dios-dije

-La neta. El nuevo disco de "El Komander" acaba de salir y no me lo quiero perder, wey-dijo el empleado

Apoyé mi mano sobre uno de los estantes. El tipo me dió un latigazo ¿O sera cableazo? Y las putas clavijas me dejaron una muy bonita cicatriz.

-Ahora si la cagaste-dije

Otra vez usé el truco de la escoba. Él trató de atacarme y yo agarré su cable. Le dí un tirón para mi lado y cuando estaba lo suficientemente cerca le dí un buen putazo en toda su cara. El estaba ahí inconsciente en el piso. Yo le tiré una televisión de pantalla plana en la cabeza para que no causara más problemas.

Bert estaba en la sección de hogar y decoración. Estaba enfrentandose contra por lo menos doce tipos. El por suerte trajo el B A T E T A C T I C O. Pero desafortunadamente Bert hizo una gran Bert y lanzó el bate táctico a un lado para pelear con sus puños. Le partió la jalea a todos. En un momento dado hizo un wall kick con un tipo y aterrizó sobre otro. Con sus piernas le partió el cuello. Alguien trató de acuchillarlo. Bert se protegió con su antebrazo y el cuchillo terminó atravesándolo. Lentamente removió el cuchillo, sin decir absolutamente nada. Usó ese cuchillo para clavarselo en la pierna a alguien. Luego usó ese cuchillo clavado como base para saltar. En el aire dio unas patadas. Luego se agarró de una de esas luces de tubo y con mucha fuerza las removió del techo. A uno de los empleados le cayó la luz justo en la cabeza. Y con lo que quedaba repartió unos madrazos.

-¡¿Quién quiere más?! Me tomé suficiente cocaína para dejar paralítico a un caballo SI QUIEREN DEFENDER SU PUTA TIENDA MÁTENME-gritó Bert

Uno de los empleados trató de correr para tirar abajo a Bert. El fue muchísimo más inteligente y al último segundo lo esquivó, lo tomó por su camisa y lo arrojó contra más empleados. Ahora todos estaban cagados de miedo. No podían hacer nada contra esa bestia. Bert se dio vuelta. Al hacerlo alguien le hundió la cabeza en un inodoro que quedaba cerca. Él fingió que se ahogaba. Cuando el tipo se distrajo Bert le hizo lo que le hicieron. Alguien se enojó. Él quería darle un madrazo a Bert pero lo bloqueó usando la tapa de la mochila del baño rompiéndolo en dos. Bert le lanzó las dos piezas matandolo.

-Dios mío-dijo un empleado

Por lo menos a él le va bien.