♤Cruel pero cierto

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Llegamos a la academia y me dirigí a mi cuarto. Cerré la puerta y suspiré para que miles de lágrimas empezaran a brotar de mis ojos. Cerré los ojos y pegué mi espalda contra la pared para luego agacharme y abrazar mis rodillas mientras lloraba. ¿Esto significa enamorarse? ¿Por este sentimiento lloras cuando vez a esa persona estar con otra?  Mi corazón se destrozó al recordar la escena una y otra vez en mi cabeza.  Me quedé así alrededor de 20 minutos, tal vez más, solo llorando, hasta que Cinco se teletransportó a mi habitación, cuando ya me quedaba dormida de tanto llorar.

-Cinco: ¿T/N? -dijo frente a mí.- Pequeña. -se sentó en el suelo y sobó mi cabeza. Yo corrí a abrazarlo y él correspondió al abrazo- Ya, ya, todo estará bien. -dijo acariciando mi cabeza brindándome protección- Ven, acuéstate para que descanses. -me cargó con cuidado hasta la cama y me arropó- Mataré a ese infeliz, créeme que lo haré. Ahora descansa bonita. -sonrió y asentí-

-T/N: Gracias, Cinco. -el sonrió y me acomodé para luego dormir-

Me desperté por el olor al café recién hecho que inundaba mi habitación. Abrí los ojos y vi una taza de este en mi mesa de noche. Sonreí y me senté en la cama para tomarlo con calma. Al terminar el café me quise dar una ducha. Me levanté, tomé mi ropa y me dirigí al baño. Mis ojos estaban algo hinchados. Agradezco al café que hizo que me despertara un poco más.

Me bañé, puse el uniforme y bajé al escuchar a mamá tocar la campanilla del almuerzo.

-Reginald: Sentados. -dijo y todos obedecimos como de costumbre-

Empecé a comer, o más bien jugar un poco con la comida. No miraba nada más que mi almuerzo. Debido a la cercanía del asiento de Diego con el mío, prefería no alzar la mirada por nada del mundo.

Terminamos de comer y nos levantamos después de que papá lo hiciera primero.

-Diego: T/N, déjame-se acercó a mi pero este fue interrumpido por Cinco-

-Cinco: Déjala, inútil. -se teletransportó delante mío. Yo agaché la mirada-

-Diego: ¿Qué? ¿Acaso eres su novio? -preguntó molesto-

-Cinco: No lo soy, pero me preferiría a mi que a  un infeliz que se besó con otra chica.

-T/N: Déjalo así, Cinco. -dije y me teletransporté a la biblioteca-

-Kira: Holaaaa. -dijo y su tono de voz bajó hasta llegar a un silencio completo. Luego de unos segundos decidió hablar- ¿Estás bien, T/N? -preguntó preocupada acercándose a mi-

-T/N: Sí, solo... quiero estar sola por ahora. -Di una sonrisa con tristeza-

Kira asintió y desapareció. Yo escogí un libro y comencé a leerlo en el mueble cerca a la ventana, pero gritos impidieron que siguiera con la lectura. Decidí bajar las escaleras y me encontré a Diego y Cinco peleando.

Mierda.

Corrí rápidamente hacia ellos. Todos trataron de separarlos con sus poderes pero siguieron peleando.

-Cinco: ¡Eres un patán! ¡¿Viste lo que le hiciste?! ¡Pasó toda la mañana llorando por tu culpa! -lo siguió golpeando-

-Diego: ¡Porque no me dejan explicar nada, pedazo de idiota! -trataba de evitar los golpes-

-T/N: ¡Cinco, basta! -me acerqué a él tomándolo del brazo pero este me corrió-

-Cinco: ¡Sabes lo mucho que le importas! ¡Sloane lo dijo, la besaste!

-T/N: ¡Cinco, ya! -lo tomé del brazo y lo teletransporté a mi cuarto- Ya basta. -poco a poco se calmó y segundos después habló-

-Cinco: Ya basta. -asintió dándome la razón- Perdón. -trató de evitar mi mirada volteando hacia otro lado. No le gusta pedir disculpas.-

Escala de gris   -Diego y tú-  ☂️The Umbrella Academy☂️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora