Los Gemelos Gallagher.

More together

Estaba con Aidan en mi habitación comiendo palomitas y refresco mientras hablábamos de miles de cosas como era costumbre de ambos.

—Tengo una idea— dije emocionada

—Si? Cual?— pregunta curioso

—Te puedo maquillar o pintar tus uñas— dije como niña pequeña

—Me parece una idea estupenda— habla con una sonrisa

—Lo dices de verdad?— pregunte tomando un mechón de mi cabello

—Lo digo de verdad— se pone de pie— andando, maquíllame— ríe

Me levante de la cama y caminé junto con él a mi tocador, aquí comenzaría la magia, comencé limpiando su ceja, puse algunos productos antes de aplicarle algunas cosas, pinté su ceja, sus ojos, base, polvo, rubor, pestañas y labial, pinté sus uñas color rosas.

—Te giraré al espejo para que te veas— dije entre risas

—Rápido, muero por ver cómo me dejaste—dice inquieto, giré la silla y se miro al espejo— dios santo...— me puse nerviosa

—Que pasa?— lo mire desde el espejo

—Me veo realmente apuesto, si saldría con migo mimo— no pude aguantar la risa —oye no te burles

—Eres tan tierno y divertido, si fueras chica me haría lesbiana— me senté en la cama

—Así que si te fijarías en mi mujer?— pregunta coqueto— y qué tal de mi hombre?— camina a mi

—Aidan para, sabes que solo bromeo— puse mis manos en su pecho

—Bien, me detengo— se sienta a mi lado— deberíamos sacarnos unas fotos?— pregunto mostrando su celular

—Obviamente— dije feliz, Aidan comenzó a tomar las fotos y salía tan graciosas, era tan feliz con Aidan, las preocupaciones se marchaban por completo, te trasmitía paz y eso me encantaba de el.

—Ire a quitarme esto, vuelvo enseguida— sale de la habitación

Me quede sentada aún en la cama, ahora que hago? Me pregunte a mi misma mirando mi habitación, no pude despegar la vista de aquel oso de peluche que Ryan me obsequió en nuestra "cita" lo tomé y comencé a obsérvalo recordando absolutamente todo lo que pase con Ryan, estaba enamorada de él? Pero también lo estaba de Aidan y lo acepto, creo que el aceptarlo es un completo error, deje el oso de lado y puse algo a serie en la televisión, me acosté en mi cama y luego de unos 10 minutos entró Aidan.

—Oye, creo que tengo un problema, lo que me pusiste en las uñas no sale con agua— entra a la habitación y cierra la puerta

—Aidan— reí— eso no se quita con agua— me puse de rodillas en la cama

—Me pusiste algo que no se quita __?— dice algo molesto

—No Aidan, mira, te traeré algo con que si se quitará— me puse de pie y caminé al baño, tomé quita esmaltes y algodón, caminé a él y me senté frente a él en mi cama— mira, con esto se irá de tus uñas— reí

—Es agua?— toma el bote

—No tonto, se llama acetona y sirve para remover el color de las uñas— dije mientras retiraba el esmalte de sus uñas

—Oh...jamás había visto esto antes— sentía tu mirada en mi

—Bueno, poco a poco irás aprendiendo cosas de mujeres con migo— lo mire de reojo con una sonrisa

Seguí removiendo el esmalte y seguí con su siguiente mano, al tenerlas completamente despintadas giré mi mirada a la de el.

—Están listas— sonreí

—Gracias— sonríe mirando sus uñas

—Sabes que no es nada— puse las cosas en el buró— jamás me había divertido tanto con un chico— me volví a sentar frente a él

—Soy el primero?— pregunta mirándome a los ojos

—Si y es bueno que seas el primero, eso me pone feliz—

—Siempre trataré de verte feliz, quiero ver esa bonita sonrisa que siempre llevas, tu hermoso brillo en los ojos— susurro el final y se acercó a mi lentamente, nuestro contacto visual seguía, mi estoma se revolvió y sentí la necesidad de besarlo ya, me acerqué a él, incliné poco mi cabeza y nuestros labios se juntaron

Comenzó siendo un beso tierno e inocente, acariciaba mi mejilla y yo su cabello, me pegó aun más a su cuerpo haciendo que me subiera entre sus piernas, él besos se volvió intenso,comenzó a mover mis caderas en círculo y ahí fue donde pare el beso, me puse de pie y este mi miraba confundido.

—Que pasa? Te incomodo?— pregunto en un tono tranquilo

—N..no, bueno, es que— rasque mi nuca— como lo digo

—Eres Virgen?— busca mi mirada y yo simplemente asentí nerviosa— y te da vergüenza?— pregunta entre risas

—Quien de 17 años aún sigue siendo Virgen?— pregunte inquieta— eso es incómodo

—Oye, tu piensas que el que seas virgen o no a tu edad esta mal? A los demás que mierda les importa? No creo que sea incómodo, tampoco creería que es incómodo si no lo eres, pero tampoco quiero que sea presión, hazlo cuando estés segura y con la persona correcta— besa mi frente

—Eres tan comprensible Aidan— me lance a abrazarlo— te quiero— dije como niña pequeña

—Y yo a ti— besa mi mejilla y mira la hora de su reloj— creo que debes dormir, mañana tu vuelo sale temprano

—Si, tienes razón— me puse de pie, al igual que Aidan y camino a la puerta

—Descansa bonita— sonríe y sale de la habitación

Me acosté en mi cama esperando conciliar el sueño, no podía dejar de pensar en ambos, en lo que los dos me hacen sentir, los quería, solo para mi, pero eso es imposible.

Mis ojos se llenaron de lágrimas y comencé a llorar hasta quedarme completamente dormida, ambos chicos me provocaban el llanto con el simple hecho de que me volvían loca.

La mañana estaba tranquila, me puse algo cómodo para viajar, recogí mi cabello en una trenza caída, estaba lista para irme. Tomé mis cosas y baje a la entrada ahí estaba Aidan, papá y Lauren, ellos me ayudaron a subir mis cosas y sentí un poco de tristeza saber que Ryan no estaba ahí.

—Papá, olvide algo, ya vuelvo— dije subiendo las escaleras

—No te tardes cariño— hablo en alto y yo seguí subiendo las escaleras, al llegar a la habitación de Ryan toque la puerta y la abrí lentamente, ahí estaba el sentado frente a la ventana con su guitarra en manos

—Ryan?— hable y este giró a verme

—Que quieres?— pregunta volviendo su vista a la guitarra, él no sabía que me iría

—Quería hablar con tigo— dije acercándome a él

—De que?— se puso de pie y dejó la guitarra en la silla

—Lo qué pasó en la cabaña, cuando entrarse a la habitación, no era lo que tú pensabas, solo estábamos hablando, solo se acercó poco más a mi— dije en un tono triste

—Por dios __, no trates de engañarme, estaban muy cerca, si hubiera entrado después los hubiera visto besándose— hablo entre dientes molesto

—Por supuesto que no Ryan— hable aguantando las ganas de llorar

—Sabes que __, mejor vete de mi habitación, no tengo ganas de verte, ni un poco— pone su mano en su frente

—Entiendo...— caminé ala puerta— sólo quería arreglar esto antes de irme— no dije nada más y baje corriendo con papá

Subimos ala camioneta y mi papá arranco pues ya íbamos algo tarde, giré mi mirada hacia atrás y pude ver a Ryan mirando cómo nos marchábamos.

Te juro Ryan que intente arreglar esto para poder seguir estando ambos juntos, más juntos, pero no quisiste escucharme ni un poco.