ADVERTENCIA.
El siguiente contenido que estás a punto de leer puede resultar ofensivo para ciertas personas.
Esta es la primera parte de la historia. Disfruta.
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Na Jae Min.
Todos alguna vez hemos hecho algo de lo que decimos arrepentirnos, pero termina siendo todo lo contrario.
Hay mierdas que son tan buenas que darías lo que fuera por volverlas a repetir. Una y otra vez.
Jae Min estaba a nada de dar un paso hacia atrás. Lo había estado pensando toda la semana: ¿Era buena idea que él estuviese ahí? Siempre había deseado asistir a una de las tantas reuniones que hacían año con año sus viejos compañeros de la escuela media. Veía las fotos de unos cuantos y se moría de envidia por no haber estado, aunque, todas sus faltas se debían a que sabía bien que nunca fue considerado como parte de su grupo y por ende, mucho menos de su generación.
Era muy probable que esa hubiese sido la etapa más triste de su vida.
La cosa empeora cuando recuerda las grandes vergüenzas que paso sólo por querer tener la atención del resto.
El pobre chico al nunca haber sido cercano a alguien, inicio una extraña amistad con uno de sus profesores. De esas veces en donde sacas temas de la nada con ellos y quizás sólo por lástima te hacen plática. En fin, nunca olvidaría el nombre de Seo Young Ho, mejor conocido como el profe Johnny, el maestro de inglés o el señor extranjero.
Con sólo recordar o escuchar la palabra "Johnny" a su mente venía la imagen de alguien alto, atlético, rubio despampanante y con sonrisa Colgate. Porque ¡Madre mía! Había que ser ciego como para no ver que ese hombre aún y cuando estaba en sus treinta y pico de años era todo un adonis.
Y vaya que él lo sabía.
¿Por qué? Pues entre pláticas. Lástima. Risas. Roces espontáneos. Supuestas asesorías dentro y fuera del horario escolar. Jae Min, no supo en que momento... Pero, se volvió normal tener a el profe Johnny entre sus piernas. Quizás esa fue la razón exacta por la cual descubrió su amor por los penes a temprana edad y la más importante lección de vida para cualquiera: "la calentura homosexual no es broma".
Pues en uno de sus encuentros feroces, al idiota de Jae se le ocurrió tentar a su querido profesor en la biblioteca de la escuela. En horario de clases y chuparle la verga, todo un genio ¿No?
Tal vez sólo fue porque quería sentir la adrenalina de hacerlo en un lugar público, de acorralar al pobre hombre y que fuese incapaz de poder ceder ante sus instintos, agreguemos que quizás quería hacer un buen recuerdo de esa maldita institución.
Entonces fue cuando la tragedia sucedió.
Si hubiese sido más precavido, si su gran afán por el sexo salvaje no existiera. Jamás habría sufrido tanto y como lo hizo en ese medio año para terminar la escuela media.
Porque cuando la imagen de Lee Jeno y su gesto de horror aparecen de la nada. Sabe que la cagó en grande.
¿Quién hubiese dicho que había un alumno entre las estanterías con ganas de vomitar por toda la escena que presenciaba?
Que no le contó nada a nadie sobre lo que vio. Pero que a partir de ese momento le hizo la vida de cuadritos a Na. Obligándolo a hacer sus trabajos, a cargar con su cochino uniforme del equipo de básquet, a tragarse sus bromas pesadas, a no poder negarse a cualquier ridícula petición que el pelinegro ese le hiciera y sí no había escapatoria, uno que otro golpe bien merecido.

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Rain𝐛𝐨𝐰 ¡! NoMin.
Fanfiction« # 🕸 : Hay mierdas que son tan buenas que darías lo que fuera por volverlas a repetir. Una y otra vez.» + 18. Dirty talk. Mención del NoRen. + 1O, OOO palabras. No se permiten adaptaciones.