Clumsy Alfa🧁》hope,v《omegaverse》

✨-Capítulo 7

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Los pasos apresurados de cierto omega resonaban por los pasillos del hospital al mismo tiempo en el que su corazón latía desbocado del miedo.

Iba saliendo de sus clases de la universidad, cuando recibió una llamada donde le avisaban que su amado alfa se hallaba hospitalizado. Ni siquiera se esperó para saber el motivo, simplemente alzó su brazo, y soltó un silbido para lograr detener un taxi.

Ahora corría por los blancos pasillos del hospital importándole poco las tontas llamadas de advertencia de "no corra por los pasillos, blah blah" ¡Su alfa estaba hospitalizado! Era normal querer llegar lo más rápido posible con él. Así que, siguió avanzando mientras sus cabellos verdes se sacudían al ritmo de sus pasos, pero estos se detuvieron cuando paró en seco ante el número de la habitación donde indicaba que estaba su novio.

Cuando abrió la puerta, el aroma a vainilla lo recibió, encontrándose frente a él a su alfa acostado en la cama de hospital. Al parecer dormía, pues tenía su antebrazo cubriendo sus ojos y su pecho subía y bajaba con calma. Tae soltó un largo suspiro aliviado al verlo relativamente "bien".

Cerró la puerta tras él, acercándose despacio hasta donde su alfa se encontraba. Lo observó detenidamente, dándose cuenta de la pequeña capa de sudor en su frente y cuello, además, tenía una intravenosa en la mano que descansaba sobre el colchón. Taehyung abultó sus labios en un puchero al ver a su novio en ese estado, que llevó su mano a los rojizos cabellos, logrando que Hobie diera un saltito y le diera una mirada sorprendida, pero de inmediato relajó su rostro cuando vio que se trataba de su omega.

—Amorcito… —murmuró. La expresión de Taehyung se entristeció al notar la palidez en la bella carita de su novio.

—¿Qué pasó? —pregunta con suavidad, ahora acariciando la mejilla del pelirrojo. —Apenas me llamaron para decirme que estabas hospitalizado, vine lo más rápido que pude… —sujetó la mano de su alfa, aquella que tenía la intravenosa. —Me asusté muchísimo.

—Lamento asustarte... —bajó la mirada.

—Creí que estabas vacunando mascotas en el parque… —peinó el rojizo flequillo hacia atrás, liberando la sudorosa frente.

Ese día, Hoseok y sus compañeros veterinarios, hicieron una campaña de vacunación. Se instalaron en el parque central de la ciudad, pero Hoseok no esperaba que el calor fuera tan intenso, sobre todo porque portaba su bata de manga larga logrando que su cuerpo no se ventilara adecuadamente.

—Y lo estaba, pero… —cerró sus ojos, aún se sentía mal. —comencé a sudar mucho, me mareé, mi vista se nubló y cuando desperté ya estaba aquí. —echó la cabeza hacia atrás alargando un pesado suspiro. —el doctor dijo que me dio un golpe de calor.

—Mi alfa… —susurró triste sin dejar de acariciar los cabellos rojos. —definitivamente, tú y el calor nunca se van a llevar bien… ¿quieres que haga algo por ti? ¿necesitas algo?

Asintió sin abrir sus ojos. —¿Me puedes traer una de tus limonadas con sal? —pidió con voz pequeñita.

Asintió depositando un besito en la respingada nariz de su alfa. —A mi alfa lo que pida…

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Una hora más tarde, Hoseok terminaba de beber la deliciosa y fresca limonada que su omega le había llevado. Afortunadamente ya se sentía un poco mejor, pero el malestar aún continuaba ahí. Odiaba ser tan poco tolerable con el calor. Odiaba el calor.