WILD TEMPTATION

CAPÍTULO ÚNICO

Mew Suppasit se había cansado de estar en Tailandia en su adolescencia y decidió ir a estudiar y seguir su vida en USA, siendo un hombre hecho y derecho siendo conocido por su excelente trabajo y ética laboral en el ámbito empresarial lo tenía todo, sus padres hablaban con él cada que podían ya que su padre era una figura importante en su país natal y realmente siempre estaba ocupado por eso cuando el recibió esa llamada, esa fatídica mañana todo en su mundo colisionó y allí estaba el volando de madrugada de regreso a su país siendo recibido por su madre que no podía con todo sola, luego de que su madre le contará como su padre fue asesinado por personas de dudosa procedencia.

Lo cual lo dejó impactado pero no tanto como cuando la mano derecha de su padre abrió la caja de pandora para él y su madre contandoles todo en lo que su difunto padre estaba metido, bares clandestinos, en donde ocurrían muchísimas cosas ilegales de las cuales su padre se beneficiaba y por lógica el y su madre también, si bien Mew no quería tener que ver nada con este tema era algo que se era imposible de desligar porque su padre era el conecte entre el lavado de dinero y estas personas y pondrían en peligro no sólo su vida si no la. Vida de la única persona que tenía en el mundo y estas personas tenían conocidos en todo el mundo.

 

Y fue por esta razón por la cual allí estaba Mew aprendiendo todo y cambiando radicalmente todo su ser, en 6 meses Mew puso una coraza en su ser y se volvió sombrío e inalcanzable, calculador y peligroso, incluso su madre lo desconocía a veces, todavía no conocía todos los lugares que su padre tenía, todavía le faltaban 3 y el último de estos era el que más lo intrigaba, tenía un nombre exótico y a pesar de decir que no era un club de sexo si tenían bailarines exóticos.

 

Y toco el momento de revisar el FANTAGIO club y su estrella más aclamada Sunflower, Mew realmente no sabía que esperar pero ese había sido el lugar en cual todos los socios de su padre hablarían con él y lo reconocerían como el sucesor del imperio Suppasit y pues Mew ya se había resignado a todo este nuevo mundo del cual el venía aprendió a saber como era.

Era algo estresante para él entrar con sus 3 guardaespaldas y la mano derecha de su padre, Leo el cual jamás dejaba solo a Mew, el ruido de la música le causaba dolor de cabeza y el aroma de mezclas de licores y tabaco no eran de su total agrado, llegaron hacia la parte más exclusiva del club… la zona VIP era totalmente distinta al lobby y salón común del club, esta tenía música más tranquila y a un volumen más moderado, personas en trajes de alta costura adornaban las mesas con manteles negros y sillones de terciopelo rojo, exótico pero sofisticado a la vez pensó Mew, salió de su ensoñación al llegar a la mesa más apartada del salón y se fijo en todos los hombres que estaba en ella, eran 6 tipos sin contar al séquito de seguridad que cada uno tenía. El fiel Leo le fue presentando uno por uno pero Mew sinceramente no estaba con cabeza para recordar tantos detalles, solo retuvo que eran las cabezas de familias de narcos, de personas influyentes y con poderes a nivel mundial y por supuestos sus nombres….

Allí estaban pegados como clichés Singto y su Novio Krist que aunque pareciera inofensivo podría matarte a cabeza fría sin ningún remordimiento, ellos eran la fuerza del lado sur del país, a la par de ellos estaba el chico nuevo había llegado antes que Mew ocupará el nuevo lugar de carne fresca su nombre era Apo y su imperio de lavado de activos, luego seguía alguien callado encantador por donde lo miraras Tay el rey de todo el norte es que más exportaba merca para el extranjero junto a su mejor amigo Josh el conecte internacional y por último pero no menos importante Gun con su cara angelical podía convencer a cualquiera de darle todo su dinero si el lo quería, No iba a mentir Mew realmente se sentía intrigado con este grupo de personas tan metido en analizar cada movimiento de ellos la manera en la que parecían aceptarlo con brazos abiertos y darle la calurosa bienvenida a este lado maldito de la vida haciéndolo sentir como dentro de un núcleo familiar.