• CAPÍTULO 35 •

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Olivia

Estos dos últimos días han sido de locos, principalmente porque hoy en la tarde entregarán los resultados del examen de paternidad. Yo sé que son sus hijos, estoy segura de ello, pero me asusta todo lo que podría cambiar cuando él se entere ¿y si me pide que vivan con él?¿y si me pide la custodia completa de ellos?¿ y si aún sabiendo que son sus hijos no quiere saber nada de ellos?

Han sido días angustiosos y sobre todo porque todos estamos igual de impacientes, en mi familia, hasta el abuelo está preocupado por lo que ocurrirá y ni hablar de Lucas, quien aún no me dice la razón de su enojo el lunes por la tarde. Dejé de insistir con el tema pero éste aún sigue dando vueltas por mi cabeza de vez en cuando.

Emi ha sido mi infiltrada en el departamento Joerick porque estos días que fue a visitar a su novio, obviamente se topó con Erick. Lo notó bastante nervioso y ansioso, tal como estamos todos. Si bien, él se caracteriza por ser siempre muy comunicativo y conversador, estos últimos dos días ha estado demasiado silencioso y en constante reflexión consigo mismo, apenas habla y casi ni come.

Quiero creer en que en un futuro nos reiremos de lo ridículos que estamos siendo, es decir, es obvio que son sus hijos, y estoy segura que él también lo sabe, la expresión de su rostro lo demostraba, pero ya es tarde para evitarlo, ahora solo nos queda esperar a que entreguen los resultados.

El chico me escribió ayer por la noche, tampoco fue una conversación muy larga, simplemente se habló lo justo y necesario.

Erick:
me acaban de llamar del hospital y mañana al medio día estarán disponibles los resultados ¿crees que podríamos juntarnos para verlos juntos?
PD: lleva a los niños.

Sinceramente, no estaba muy segura de qué responder a ello, pero si me lo dice de tal manera creo que no me queda otra que aceptar. Le ofrezco reunirnos en una cafetería a unas cuadras del hospital, como es día de entresemana, probablemente esté sin tanto cliente y no habría problema en ser visto. El chico me dice que prefiere que nos juntemos en la cafetería de la señora Brown ya que ahí estará mucho más seguro, además que, si puede evitar ser captado por las cámaras es mucho mejor. Accedo a su petición y concordamos en vernos allí a las tres de la tarde, ya que así puedo ir a trabajar por la mañana y llevar a los niños a su escuela tal y como normalmente hacemos.

Salgo de mi oficina y me despido de algunos colegas, algunos me despiden y otros simplemente me ignoran categóricamente. Cruzo las grandes puertas de la entrada del edificio y voy a casa, apenas son las doce del día así que aprovecharé lo que queda de la mañana en descansar un poco antes de ir a la escuela a buscar a los mellizos.

Al llegar a casa, noto que esta vacía, es probable que los abuelos hayan salido a pasear por allí y bueno, el resto de la familia está en sus respectivos lugares de trabajo. Subo a mi cuarto y cambio mi ropa formal para el trabajo por algo mucho más cómodo e informal, con unos vaqueros, mis converse y una blusa tie die estoy a gusto, encima de ello me abrigo con un hoddie color rojo con caricaturas.

Con las llaves y celular en mis bolsillo salgo de casa hasta la parada de autobús, quien me lleva hasta la escuela de los niños. Llego a mi destino justo a tiempo, el timbre de salida acaba de sonar y veo como un gran número de niños se amontonan en el portón de salida.

Diez minutos más tarde estamos arriba del autobús con destino a casa. Mis pequeños me cuentan emocionados lo que hicieron y aprendieron el día de hoy. Más pronto de lo que creo, llegamos a casa, los abuelos ya han vuelto y apenas llegamos los mellizos corren a saludarlos.

La abuela ya se encuentra preparando el almuerzo del día de hoy, por lo que la casa huele a un delicioso aroma de fideos con salsa boloñesa. Llevo a los niños a que dejen sus mochilas al cuarto y se cambien ropa. Leah se viste con un overol y una camiseta de arcoíris a juego con su cintillo de variados colores, y calza sus pies en unas zapatillas converse negras. Louis, por otro lado, se viste con unos tejanos negros y una polera roja con caricaturas y sus zapatillas rojas.

Dejaría todo... [Erick Brian Colón]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora