Capítulo 49
¿En qué mundo cabe que, habiéndonos conocido tan pronto, nos hayamos conocido tan tarde? - ERDTZ.
Ni una sola persona en la fiesta sospecharía que el éxito de su matrimonio había sido una de su mejores actuaciones en toda su vida.
No sólo de Louis, por supuesto, la patética historia estaba protagonizada por ambos. Ella y él.
Para empezar, no tenía idea de dónde, ni con quién estuvo Eleanor anoche, lo único que sabía, era que los besos en la espalda detrás de la tela transparente del vestido, no se los había hecho él. No tenía ni ganas de reflexionar sobre de quién eran las flores que tiró a la basura, con mucho miedo de que no la viera el viernes pasado, porque claramente aquel regalo floral no había sido idea suya.
La sala no estaba llena de desconocidos, al menos sabía el nombre y dónde trabajan la mayoría de las personas reunidas en la recepción de la fiesta de cumpleaños de Danielle. Ella era la mejor amiga de su esposa y la mujer de uno de sus compañeros de trabajo más antiguos, también hijo del dueño del bufete donde trabajaba, había hecho una fiesta como si se tratara de una celebridad, o miembro de la realeza.
La mano de su esposa estaba colocada suavemente en su brazo, mientras caminaban hacia una de las mesas principales del lugar. La decoración era elegante y de tonos pasteles. Estaba seguro que Eleanor iba a querer una fiesta como está en su cumpleaños también, tal vez en el mismo lugar, o querría contratar al organizador y su equipo de expertos, que convirtió este restaurante de hotel sencillo de paredes blancas, en el mismísimo palacio de los cisnes.
Louis ya sabía cómo desenvolverse en este tipo de eventos, toda su vida había asistido a fiestas como estás; primero en compañía de sus abuelos y luego de sus padres, más tarde sus primos y parientes cercanos; buena comida, vino exclusivo, música de saxofón de fondo, charlas superficiales sobre adquisiciones de autos, las mejores opciones de invertir dinero, propiedades y aventuras en las vacaciones de verano familiares.
Su padre le había dicho en una ocasión, cuándo tenía veinte años mientras cursaba su primer año de universidad en la facultad de leyes, en una fiesta como está —Es como un estanque de tiburones, pero nosotros no les tenemos miedo hijo, nadamos con ellos, también mordemos, letales, recitamos la constitución como poesía, y dentro de poco serás uno de los mejores abogados de Doncaster, sólo espera y verás... —Su padre siempre le guiñaba el ojo en complicidad.
—Muy bien... esperaré — contestaba confiando plenamente en su palabra — Oye... Papá ¿Alguna vez te has preguntado qué hubiera pasado si no fueras abogado? Es decir, con mi abuelo y sus ideales — Louis recuerda a su padre pensarlo por varios minutos, para que terminará negando con la cabeza. —¿No tenías ganas de hacer otra cosa? —
—Claro que sí tenía... yo tenía muchas ganas de estudiar gastronomía, pero nunca me ha gustado discutir con él o llevarle la contraría, era eso o convertirme en farmacéutico, porque estaba seguro que iba a arrastrarme a la escuela de medicina a como diera lugar, no lo entenderías, eran otros tiempos, agradezco todos los días porque te haya gustado la facultad y tengas aptitudes para estudiar leyes, no te preocupes por el pasado, vamos a tomar vino, aprovecha a saludar a Ele, seguro que querrá verte —
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El Ruido de tus Zapatos (Larry Stylinson)
RomansaLouis es un exitoso abogado penal, casado con dos hermosos hijos ¿Qué hace con un insaciable amante de 19 años? "Cuando se cierran las puertas del amor cotidiano todos necesitamos una salida de emergencia"