ʏᴜᴀɴꜰᴇɴ | ᴛᴀᴇᴋᴏᴏᴋ - 태국|

01.

Fueron las estrellas en tus ojos que hicieron que la noche cobrara vida.

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Era época de invierno en seul, el frío reinaba en la ciudad y sus habitantes sentían alegría del tiempo.

Por otra parte, En la universidad kyung hee, taehyung miraba los árboles llenos de nieve a través de la ventana, imaginando como aquellos árboles eran perfectos para fotografiar y colocar esas preciosas fotografías en su mural que el mismo creo en su habitación.

Si como la imaginación fuera tiempo, la campana sonó para afirmar que la clase se había terminado, obligando al joven salir de sus pensamientos.

—taehyung– pronuncio la chica de cabello color rojo.

—oh,nayeon– vio con alegría–. Hola

—pasas demasiado tiempo viendo la ventana Tae. Sucede algo?

Era cierto, taehyung pasaba la mayoría de las clases viendo hacia esa ventana, la cuál le permitía divisar esos grandes árboles frondosos y el patio de la universidad.

—suceder algo?– repitió en tono de duda–. no sucede nada, solo que me encanta ver aquel bella vista

—ahora lo entiendo todo– sonrió para si misma–. Vamos por algo de comer?

—claro– dijo levantándose de su asiento y caminando al lado de su compañera.

Después de bajar las escaleras y hablar de lo que había pasado en la clase, llegaron a la cafetería que se encontraba al aire libre – lugar donde taehyung pasaba horas viendo–, sentándose sobre unas de las mesas del patio, sintió el frío en su nariz, arrugando la de manera involuntaria.

Nayeon se encontraba comiendo augustamente al lado de taehyung, el cual se encontraba tomando fotografías de lo que llamaba su atención.

–puedo sentarme?– dijo una voz dulce.

Sin dejar de hacer lo que hacían, ambos jóvenes asintieron permitiendo a un tercero sentarse en la mesa.

–mucho gustó, mi nombre es Jungkook– dijo extendiendo su mano hacia la chica.

–hola Jungkook, mi nombre es nayeon–acepto el saludo-. El es taehyung. –señalando al chico que estaba perdido en sus fotografías recién tomadas–, un jovencito distraído y muy lindo.

–hola– pronuncio Jungkook antes de que la campana del receso sonará.

Aún sumido en sus pensamientos, taehyung se levantó y se dirigió hacia su siguiente clase, sin despedirse del joven que se quedó sentado en su sitio.

Al momento de llegar a su última clase, escucho una voz familiar que hizo que se le helara la piel.

¿Quién era exactamente? Nada más y nada menos que Lee Félix, compañero de su curso, el cual le hacía la vida más que tormentosa. Era una patada en la ingle. A pesar de ser un chico inteligente y carismático, era un asco con quién no le agradaban– estando en esa corta lista el nombre de Kim taehyung en rojo–, no sabía la razón exacta de su odio hacia el pero sabía que le tenía rabia.