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Perfecto, simplemente perfecto – Seungmin suspiro enojado, no llevaba ni media hora en pie y ya tenía que resolver distintos tipos de problemas, entre ellos, devolver aquel pequeño can que había destruido todo a su paso, mataría a Hyunjin cuando lo viera. – Kkami por favor dame eso ahora – el pequeño solo le ladro y siguió mordiendo el almohadón de plumas de su sofá nuevo. Seungmin se acerco hasta él, tomo uno de los extremos y empezó a forcejear con Kkami, este gruñía enojado. Definitivamente iba a matar a su mejor amigo, le había jurado contra viento y marea que el cachorro era dócil y bien portado. Con su mano libre logro tomar su celular y marcar al número de Hwang Hyunjin –

- Seungmin, ¿Qué tal mi bebé? – El mismo saludo de siempre, claramente, con respecto al destructor.

- Ven a buscarlo ahora- dijo de mala gana, era la tercera vez en la semana que lo llamaba para lo mismo y sabia que Hwang no lo iría a buscar cuando llegara a su casa, sino que, lo convencería de nuevo de que necesitaba compañía animal, así que corto sin esperar respuesta. Entre forcejeo y forcejo logro que Kkami soltara el almohadón, pero ahora estaba prendado de su pantalón, lo miro cansado, y se sentó a su lado – eres igual que tu dueño – acaricio su pequeña cabecita con su mano izquierda y quedo pensativo, realmente no le molestaba el desorden del perrito, incluso, el sentirse acompañado era bastante grato, pero su vida no estaba del todo en orden, menos su mente, ni mucho menos su corazón. Recordó con bastante melancolía la razón de que Kkami estuviera ahí.

Frunció el ceño cuando sintió algo tibio tocar su mano, bajo la mirada y encontró a Kkami lamiéndola con bastante amor, vaya cachorro comprador –"definitivamente se parece a Hwang"- pensó, le sonrió de medio lado y se levantó – ¿tienes hambre verdad? – el cachorro agito su cola como queriéndole decir que si, negó y fue a buscar su desayuno. En verdad Seungmin era una persona que en general tenia su mente en paz y los problemas de su vida los esquivaba con sonrisas brillantes en conjunto del lema "Al mal tiempo buena cara". Pero hace unos meses esto ya no era así, se sentía vacío y sin gracia, incluso buscando aliviar su corazón había decidido independizarse, comprarse una casa, un auto y millones de cosas que aun estaban en cajas apiladas. Él sabía que estaba escapando, que estaba buscando no enfrentar sus problemas, pero ¿Cómo lo haría?

- TOC TOC TOC – canto una voz chillona bastante exagerada, simplemente ... Hwang Hyunjin, ¿Cómo describirlo en simples palabras? Era un chico delgado un tanto más alto que él, bastante guapo a decir verdad, un poco dramático, bastante comprensivo, su mejor amigo desde siempre y en estos momentos la razón de que estuviera en la situación que estaba, literalmente en cuatro patas barriendo pluma por pluma su suelo. Kkami empezó a ladrar emocionado parado en sus dos patitas traseras haciéndole gracias a Hwang como cada vez que venía, se levantó del suelo sacudiendo sus rodillas – ni siquiera preguntare la razón de porque quieres desalojar a mi pequeño de nuevo, creo que esta vez se pasó – rio adaptando su voz normal con el cachorro en brazos. Ambos se habían conocido de una manera peculiar de niños, Hyunjin había besado a la niña que a Seungmin le gustaba en ese entonces, él ni siquiera lo pensó dos veces y lo golpeo directo en la mandíbula haciendo que a este se le cayera uno de sus dientes de leche, Hwang sin quedarse atrás lo había comenzado a jalar del cabello y ambos habían terminado con citación a sus padres y mucho llanto de por medio, desde ese día habían sido inseparables, incluso habían ido a la universidad juntos. Hyunjin tenía esa habilidad extraña de saber como mejorar las cosas, siempre encontraba soluciones un tanto absurdas, pero bastante útiles en la vida como para que todo marchara excelente, es que simplemente Hyunjin era su pilar cuando no estaban sus padres o su hermana de por medio.

- Dime por favor que esta semana Kkami ha logrado despejarte- le dijo con sus ojitos brillosos, para ser sinceros Kkami lograba grandes distracciones en su cabeza, así lograba no pensar en... él. Asintió bastante apesadumbrado, lo extrañaba, lo extrañaba con cada célula de su cuerpo, pero ... no estaba ahí, quizás jamás volvería a estar ahí – Seungmin dime por favor que estas mejor, porque luces mejor pero no te siento mejor – Hyunjin sabía toda la historia, la habían vivido juntos después de todo. Este negó y miro el techo, se sentía miserable, su pecho dolía y sus ojos quemaban, definitivamente extrañaba como la mierda a su primer amor – Hwang, lo quiero conmigo

- Lo sé, créeme que lo se, pero ya no esta Minnie, necesitas avanzar Wonpil simplemente no te merece, mira como estás - gruño, rara vez Hyunjin se ponía así de serio

- Pero lo amo, ¿Por qué él no a mi? - Seungmin a temprana edad había notado que no solo le gustaban las mujeres, si no que también los hombres, en su adolescencia había experimentado mucho, pero jamás se había enamorado, hasta que conoció a Wonpil. Habían estado juntos casi por 2 años, sus padres lo habían aceptado casi tan rápido como aceptaron la sexualidad de su hijo menor, pero los últimos meses de relación habían sido horribles, estresantes, peleas, llantos y  drama que Seungmin encontraba por naturaleza innecesario, hasta que un día Wonpil estalló diciéndole que ya no lo amaba, que había alguien más, que él ya no era suficiente.

- Seungmin deja de martirizarte, ya pasaron 3 meses, él esta quien sabe donde haciendo quien sabe que y tu aquí, llorándolo, maldición Minnie por favor -Dejo al cachorro en el suelo y lo tomo de los hombros- Estas delgado, te la pasas trabajando de caso en caso y no duermes, deberías descansar, tomarte unos días, que se yo, no estas bien. Habla con Bang Chan, él lo entenderá - Seungmin miraba a los ojos de su amigo, tenía razón, demasiada para ser exactos, pero la realidad era que aún que su jefe (y amigo de ambos) entendiera todo lo que pasaba en su vida él papeleo no se haría solo, los casos no se ganarían solos y mucho menos podía delegar sus tareas, era el único abogado del buffet que podía solucionarlos, ya que era el único que trabajaba en criminología, además hoy, en unas horas más llegaría el pasante que Chan le había asignado, y si le pedía vacaciones ahora por asuntos personales lo mataría, aún sabiendo sobre su dolor.

-Hwang, sabes que Chan no puede vivir sin mi - bromeo abrazándolo, definitivamente Hwang era quien lo había mantenido en pie todo ese tiempo. Casi una hora más tarde ya estaba llegando a su oficina, había decidido ir bastante informal ya que tenía trabajo intensivo con el chico que Chan había aceptado para ser pasante, básicamente estarían hasta tarde en la oficina y para él no era opción andar de traje de aquí para allá si no estaría en el juzgado.


Touch My Soul ~ SeunginDonde viven las historias. Descúbrelo ahora