𝐋𝐚𝐫𝐠𝐚 𝐕𝐢𝐝𝐚 𝐚𝐥 𝐑𝐞𝐲 𝐊𝐢𝐦 ;𝐊𝐨𝐨𝐤𝐓𝐚𝐞

c u a t r o

El dia siguiente fue pesado para ambos ya que mientras su rey se encontraba ocupado hablando de negociaciones o cosas de gente de clase alta, mientras que el tenia que lidiar con tareas y la acompañante de la princesa Irene “Seulgi”.
Jungkook asegura su puesto que el rey Kim esta llorando por dentro y no sabe como salir de ahí.

-Sigo sin entender princesa Irene.

-Cariño solo dime Irene, venga no seas tan formal - esbozó una linda sonrisa.

-¿Por que ser informal con usted mi princesa? Sus regalías son valiosas y le agradecemos tanto el detalle, prometo ir a su reino y que reciba las mias.

-Creo que podrias pagarmelo de otra forma - se levanta del sillon y se acerca cuidadosamente al regazo del rey.

El atónito no podía hacer nada... claramente Irene era una mujer hermosa pero su mente solo tiene a alguien mas, solo puede pensar en que los labios del joven lo llevan y su corazón hace acelerarse.
Pero esta ahí con ella y sus labios rojos en los suyos hechos piedra, sin sentir esa emoción o esa chispa.

Jungkook se acerca a la puerta y la puerta no quedo del toda cerrada, no queria ser un curioso y violar la privacidad de su rey pero sus ansias son demasiadas.

Sus ojos se alzaron tanto que dolia mientras que su cuerpo queria entrar pero es solo un sirviente y no podría hacer nada mas, ella tenía mas ventaja obviamente. Su corazón dio un vuelco y solo pudo callar nada más.

Un toque a la puerta alarma a las dos almas, regresan a su sitio y solo responde un “pasa”.

-Rey Kim, princesa Irene - hace una pausa ya que tenia tantos sentimientos encontrados - la cena esta lista, pueden pasar.

El no debía reclamarle a su rey, siemplemente son encuentros sexuales y solo eso
Jungkook aseguraba que no estaba teniendo sentimientos hacia su amo pero su corazón latia cada paso hacia el salon principal esperando la pasada de la princesa y el rey hacia la mesa gigante y elegante.

-Deja de comportarte como un tonto enamorado - toco su pecho en busca de consolarse - no estas enamorado de el, solo eres su perro fiel.

La mirada de su rey era tan atenta que la preocupación lo invadió al pasar a un lado de Jeon y solo tuvo opción de sentar y disfrutar la deliciosa cena con un nudo en su cabeza.

La princesa Irene no deja de alardear sobre las cosas que los demás reinos traen a su castillo como también las cosas que su padre le llevaba.

-Princesa ire a descansar espero pase linda noche, me retiro - paso la servilleta rápidamente en su boca y salió directo al gran salón.

La mirada de Jeon tenía miedo de lo que vendría y la rapidez en que su amo se levantó de su silla.

-Jeon, tu vienes conmigo de inmediato y es una orden ahora mismo.

Kim en esos momentos estaba lleno de enojo que sus pisadas eran fuertes y rapidas, definitivamente las piernas largas de Jeon ayudaban tanto a acanzar el ritmo. Llegaron y cerró con cautela la puerta.

-Se podría saber que es lo que pasa contigo?

El semblante del rey cambio en 5 segundos para acercarse al rostro del joven entre sus manos, sentía su piel arder y Jeon podria apaciguarle.

-No es nada majestad, no hay de que preocuparse - los ojos de Jeon vagaron por el increible rostro de su amo mientras que sus manos posaron en su pecho dando un consuelo.

-Se que no estas bien, tus ojos son el reflejo del alma y el corazón, solo dímelo por favor Jungkook - dejo un casto beso en sus labios.

Las lágrimas del joven no soportaron mas, eran tan sileciosas y solitarias, como el...

-¿Te gusta la princesa Irene? Si es así dejemos esto de lado y sigue con ella, no vas a ganar nada a mi lado mi rey.

Taehyung de pronto empujó a Jeon hacia la cama mientras se acercaba cada vez más.

-¿Enserio piensas eso de mi? - posó los labios en su acompañante dándole un beso húmedo - Jeon grabarlo en tu cabeza siempre, veo en ti lo que nadie ha logrado.

Procedió a quitar la ropa que estaba de más en eso momentos, solo tenía ganas de poder gritarle al mundo su amorío con Jeon.
Kim quedó debajo mientras dejaba castos besos en la cara y brazos de Jungkook, solo quería tenerlo a él cerca junto a sus besos y caricias.

-Jungkook demuestra cuánto amas a tu rey, por qué yo voy a hacer lo mismo.

Jeon quedaba embobado en la belleza de su rey y la luz cálida de las velas entre sábanas de seda y la piel ligeramente morena y jugosa de su rey.
Lo deseaba, lo anhelaba, quería demostrarle lo tanto que le emocionaba la idea de hacerlo suyo una noche más.

Sus besos bajaban cada vez más por la piel jugosa de su rey, amaba tanto quedar debajo del estómago y dar pequeños escalofríos y cosquillas con besos y su lengua. Le gustaba jugar con el, tratar de no hacerlo sufrir si no más bien de disfrutar el tiempo y no apresurar las cosas.

Su mano toca el miembro y solo se escucha un pequeño gemido, ambos rieron y pronto empezó la labor de mover de arriba hacia abajo, el sudor caía y su piel canela sabía cada vez mejor entre suspiros y suplicas por más y más...

-Jeon... hazlo p-por favor... - la gran desesperación de su rey lo hacía volverse loco a sus encantos, con tan solo de verle.

Jungkook lamío sus humedos labios para posicionarse entre las piernas de su amado y sentirlo en todos sus sentidos introduciendo poco a poco su miembro y jadeando a su paso.
El cuarto se volvía humedo y empañado, entre la luz de la luna y las velas atraía una vibra llena de pasión entre ambos amantes.

-Rey Kim... eres solo mio... - su miembro salia y entrada dando estocadas tan fuertes y profundas, queria sentir a su amado debajo de el.

- Solo tuyo... Jeon... ahh - La expresión de Kim era un gran poema, disfrutaba tanto las noches con su amado que era imposible sonreír ante tal acto.

                             .....

volvi:D