Aria
Me levanto temprano, ya que hoy toca ir a trabajar al bufete. Cuando estoy lista bajo a desayunar algo rápido, decido hacerme una tostada con un poco de mantequilla y me la como mientras reviso mi teléfono. Luego de haber terminado con la tostada dejo el plato en el lavavajillas, cojo mi bolso y salgo de casa. Me subo a mi coche y enciendo la radio para despejarme un poco más.
Después de estar conduciendo unos 10 minutos llego al bufete y aparco, me bajo y entro. Saludo a la recepcionista y me subo al primer ascensor que hay libre, mientras subo a mi planta pienso en lo que me dijo Spencer el otro día y me sale una sonrisa, me gustó que diera ese paso, creo que no perdemos nada ninguno de los dos en intentarlo.
Cuando las puertas del ascensor se abren me dirijo a mi despacho, el cual está abierto y me extraña, ya que estoy segura de que lo cerré con llave cuando me fui. Entro y me sorprendo con lo que me encuentro encima de mi mesa de trabajo, un pequeño ramo de rosas acompañado de un café y una pequeña nota, que dice:
"Espero que te gusten y que disfrutes del café, Spencer"
Inmediatamente me sale una sonrisa de oreja a oreja por el detalle que ha tenido Spencer, en cuanto lo vea se lo agradeceré. Me siento en la silla y disfruto del café.
Toda la mañana me la he pasado arreglando papeles y haciendo algunas llamadas, decido ir a por algo de beber a la cafetería. Cojo el ascensor y subo a la planta, cuando llego veo a Spencer en la zona de las máquinas y decido sorprenderlo. Me acerco a el en silencio y le tapo los ojos.
-Quien soy.- digo cambiando mi voz a un tono más grave.
-Emm, no se déjame pensar, ya lo tengo, eres la chica más guapa que hay en este bufete.- me dice quitando mis manos de sus ojos y dándose la vuelta uniendo mis manos a las suyas.
-Puede ser.- digo riéndome.
-Estoy seguro de que lo eres.-
-Calla anda.- le digo empezando a ponerme roja- Por cierto, muchas gracias por las flores y el café de esta mañana.-
-No me las des, solo ha sido un detalle.- contesta restándole importancia cosa que me molesta un poco.
-Bueno, habrá sido solo un detalle, pero ha sido un detalle muy bonito.- le digo regalándole una sonrisa y veo que desvía su mirada hacia nuestras manos que todavía siguen entrelazadas.
-Me gusta estar así contigo, de hecho nunca pensé que podría llegar a pasar.- me dice con una sonrisa que me contagia al instante.- De hecho, nunca pensé que yo podría llegar a gustarte.-
-Pues sí que me gustas.-
-Todavía sigo sin creérmelo del todo.- me dice mirándome.
Dicho esto, se me ocurre una forma de demostrárselo, me inclino hacia él y le doy un pequeño beso en los labios, noto como se queda inmóvil ante mi sorprendente acción y me mira con cara de embobado.
-Está bien, ahora sí que me lo creo un poco más, aunque sigo teniendo dudas.- me dice e intuyo que lo ha dicho para que le dé otro beso, río ante el comentario y me vuelvo a inclinar sobre él, pero paro en seco y me aparto un poco de él en cuanto veo que del ascensor sale Deiton y tiene su mirada puesta en nosotros. Spencer sigue mi mirada hacia donde estoy mirando y al darse cuenta se incomoda un poco.-Bueno, nos vemos luego Aria.- se despide de mí dándome un beso en la mejilla y desaparece al cerrarse las puertas del ascensor.
Sin saber por qué mi mirada cae sobre Deiton, el cual tiene ahora una cara de sorpresa que doy a entender que es por el último acto de cariño que Spencer me ha dado antes de marcharse. Lo veo acercarse a mí, pero luego me esquiva y se sitúa detrás de mí pidiendo algo de beber en la máquina que tengo detrás. Comienzo a andar hacia el ascensor para irme de aquí, ya que se ha vuelto algo incómodo el momento, pero antes de conseguir dar más de cinco pasos siento su voz detrás de mí.
-Vaya, parece que el rarito se ha atrevido a darte un besito en la mejilla, tendremos que darle un aplauso o algo.- dice cogiendo la bebida que ha sacado de la máquina y yo me giro enfadada por lo que ha dicho.
-Creo recordar que te advertí que no le volvieras a faltar el respeto a Spencer.- digo acercándome a él rápidamente. Si quiere verme realmente enfadada, tengo que admitir que lo está consiguiendo.
-Y yo creo recordad que me dijiste que no sois nada.- me dice dando algunos pasos hacia mí quedándonos a centímetros de distancia, ante su acercamiento me pongo nerviosa y lo peor es que por su sonrisa sé que lo ha notado.
De los mismos nervios al tenerlo tan cerca de mí las palabras brotan de mi boca sin saber muy bien por qué fueron esas y no otras.- Y seguimos sin ser nada.
-Pues no lo parecía hace un momento.- me susurra.
-Ha sido un beso sin sentido, nada más.- digo y al tenerlo tan cerca logro ver bien el color de sus ojos, sé que son de color azul, pero nunca me he percatado de lo bonitos que son. Llevamos mirándonos unos segundos, ninguno de los dos se aparta hasta que algo cambia en su mirada y decide poner espacio entre los dos dando algunos pasos hacia atrás. Todavía sigo sin saber por qué le estoy ocultando lo de Spencer y yo a Deiton.
-Pues deberías dejarle entonces las cosas claras, antes de que se ilusione, no crees.- me dice con tono de burla.- Aunque ya se le ve que está enamoradito perdido de ti, seguro que tendrá alguna foto tuya y la mirara antes de irse a dormir como hacen los críos y los raritos como él.
-Spencer no está enamorado de mí y deja ya de faltarle el respeto.- le digo saliendo del pequeño trance de antes y noto como el enfado vuelve a surgir dentro de mí.
-Cree lo que quieras, pero estoy seguro de que lo esta.-
-Además, qué más te da a ti.-
-A mí me da exactamente igual, solo estoy diciendo lo que pienso.- me contesta indiferente.
-Pues ahórrate tus pensamientos de mierda y déjanos en paz.- le digo y me doy la vuelta para marcharme de una vez, siento como me coge del brazo y hace que me dé la vuelta.
-En serio quieres que te deje en paz.- me pregunta mirándome a los ojos.
-Sí.- contesto no muy segura de mi respuesta.
-Muy bien, pues entonces haré todo lo contrario.- me dice soltándome y yéndose con una sonrisa en la cara, me giro para contestarle, pero ya se ha marchado.
Realmente tendría que estar molesta por lo que acaba de decir, pero algo dentro de mí no lo está y eso me preocupa.
***
Nota de las autoras:
Holaa,
¿Por qué creéis que Aria le a ocultado lo de Spencer y ella a Deiton?
También queremos recordar que nos hemos creado una cuenta de Instagram nuestro usuario es: nrwritergirls
Besos,
N y R
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Sensaciones entrelazadas
Ficção AdolescenteUn accidente de coche cambió la vida de Deiton Anderson convirtiéndolo en un chico roto, sin sentimientos, cruel y con sed de vengarse de la culpable de la tragedia. Cada día Aria Wilson, una chica cobarde, insegura, confiada y muy enamoradiza, se o...