VII 🎈

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Dos noches más tarde todos se reunieron en la habitación familiar.

Seungmin miró a su alrededor a toda la gente, Hyunjin y sus hermanos estaban allí, así como sus padres y el Beta de la manada, Han Jisung.

Jisung se había presentado a Seungmin como el beta de Chan, había tomado el papel de beta cuando Chan se hizo cargo de la manada, había ganado su desafío y tomado su lugar como su amigo y segundo a cargo en el mando.

Seungmin pensaba que su Alfa tenía un gran amigo cuidando su espalda, también pensaba que sería magnífico si Jeongin estuviera aquí viendo todo, acompañándolo.

Chan y Jisung se levantaron llamando la atención de todos mientras el resto tomaba asiento, Hyunjin se acercó a él y le besó la mejilla antes de tomar su mano y quedar de pie ante Chan y Jisung.

Una vez en posición, se arrodillaron sobre la alfombra con la cabeza gacha, Seungmin estaba tan nervioso, se alegraba de tener a Hyunjin a su lado, porque el aroma de su compañero calmaba su desbocado corazón, la profunda voz de Chan asustó a Seungmin cuando se dirigió a él.

—¿Aceptas a este hombre como tu pareja? ¿Deseas unirte a su manada, dar tu confianza y lealtad a ellos, siempre creyendo que saben lo que es mejor para su pueblo? ¿Declaras estar libre de cualquier atadura con otra manada?

Seungmin no podía hablar en ese momento y asintió con la cabeza en respuesta.

—Tienes que decir las palabras, cariño.

Seungmin no estaba seguro de como lo consiguió, pero exprimió un pequeño:

—Sí—de su apretada garganta.

Chan puso una mano en la parte posterior de su cuello en señal de aceptación y Seungmin asintió en su lugar, podía sentir las lágrimas que corrían por sus mejillas al pensar que una vez más pertenecía a una manada.

Una vez que Chan quitó su mano, Seungmin fue más o menos empujado a los brazos de su compañero, permanecieron en un apretado abrazo, de rodillas en el suelo delante de todos, sólo celebrando el uno en el otro, mientras Seungmin lloraba en silencio.

Una vez que Seungmin se había calmado, se apartó y miró a Chan, su nuevo Alfa.

—Gracias.

—Eres bienvenido hombre, espero que ustedes dos tengan muchos años felices.

Seungmin asintió de acuerdo antes de pararse junto a Hyunjin, de repente Seungmin fue abrazado por Sohee y Jingyoung dándole la bienvenida a la manada, con palmadas en la espalda por todos los demás.

En medio de este ambiente Seungmin no pudo evitar notar algo raro, Minho siempre se aseguraba estar en el lado opuesto de la habitación de Jisung, se preguntó si había una historia detrás de esto pero decidió dejarlo solo por ahora.

Seungmin dejó escapar un grito un poco femenino cuando fue levantado por atrás y se le dio la vuelta en círculo, el cuarto se disolvió en risas cuando un beso fue colocado en su cuello.

—Bienvenido a la manada, bebé.

Una vez que Seungmin se paró sobre sus pies, se dio vuelta en los brazos de Hyunjin y le golpeó en el pecho antes de tirar de su cabeza hacia abajo por un beso.

Al perderse en los brazos de su compañero Seungmin era sólo vagamente consciente de que el resto de la manada salía de la habitación, Hyunjin rompió el beso y le agarró de la mano arrastrándolo hacia la escalera.

Seungmin trató de tirar su mano hacia afuera de Hyunjin, pero él no lo soltaba.

—Hyunjin ¿qué estás haciendo? Tenemos invitados.

—No me importa, están aquí para ver a otras personas y no sólo por nosotros, los chicos pueden mantener a todos ocupados por una media hora, tengo un compañero y le voy a dar la correcta bienvenida a la manada.

Seungmin dejó de intentar escapar.

¿Quién era él para negarle a su compañero la oportunidad de joder su cuerpo?

En su lugar corrió escaleras arriba por delante de Hyunjin.

Llamó a sus espaldas, riendo.

—El último queda arriba—y corrió a su habitación.

Hyunjin estaba pisándole los talones.

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La semana siguiente fue la más feliz de la vida de Seungmin.

Él y Hyunjin habían salido a correr dos veces más desde la cena en casa de los padres de Hyunjin, una solo ellos y otra vez con los hermanos de Hyunjin.

El sexo después era explosivo, quitaba el aliento, y esta vez Hyunjin si recordó la manta.

Cuando corrieron con los hermanos tuvieron que esperar hasta que regresaron a casa para un poco de intimidad, estaban tan tensos que casi tuvieron un accidente en el camino, Hyunjin trataba con desesperación de poner las manos en los pantalones de Seungmin, por lo que no prestaba atención a la carretera.

El accidente los había serenado lo suficiente enfriando el ardor para llegar a casa en una sola pieza.

Una vez que entraron a su habitación las ropas salieron
Volando, Seungmin pensaba que no había un solo artículo de la ropa que hubiera salido con vida.

Seungmin había comenzado un trabajo a tiempo parcial en la floristería local “Corazón de flores”.

Su propietaria era Lia y realmente había simpatizado con ella, solo tenía cinco días trabajando pero ahí estaba a su gusto, salía de trabajar a las cuatro de la tarde y corría directo a casa para cocinarle la cena a Hyunjin y a sus hermanos.

Disfrutaba haciendo esto, se sentía especial, pudiendo dar algo que esperar a los chicos, le habían dicho que siempre compraban comida para llevar o tenían comidas congeladas para las cenas.

Seungmin estaba un poco nervioso sobre la próxima reunión de la manada que era esa misma noche, tenía un mal presentimiento y no lograba sacudírselo de encima.

Sabía que tenía a Hyunjin, el sentimiento de posesión era maravillo, el sentir que alguien en el mundo, al menos una persona, te amaba totalmente y sin condiciones no tenía comparación con nada a lo que hubiese sentido antes.

Seungmin estaba tumbado en el sofá viendo una película de acción esperando a Hyunjin y a sus hermanos, saldrían juntos a la reunión de la manada.

La lasaña estaba en el horno, casi lista, esperando por los chicos, lo único que faltaba era colocar el ajo en el pan y la cena estaría completa.

Pensaba en Hyunjin, cada momento libre lo usaba de esa manera, la polla de Seungmin de inmediato comenzó a animarse.

Cerró los ojos mientras su mano se iba a la deriva hacia abajo rozando el bulto en sus pantalones jeans, él gimió y empujó las caderas contra su palma.

—Espero que todo eso sea para mí, bebé.

Seungmin abrió los ojos con sorpresa y gimió ante la lujuria y amor reflejados en el rostro de su compañero, él sonrió sensualmente invitando con un dedo a su compañero.

Hyunjin negó con la cabeza y dio un paso hacia atrás, riendo.

—Uhmmm, cariño, sabes que no podemos detenernos, ya lo hemos intentado y no lo logramos, los chicos deben estar por llegar en cualquier momento, además, no creo que sería apropiado llegar a la reunión oliendo a sexo.

—Maldita sea, supongo que tienes razón, claro que esto no significa que tiene que gustarme, voy a ir a la reunión con una furiosa erección—Seungmin gimió mientras palmeaba a su polla, una vez más antes de retirar lentamente la mano.

—Será mejor que dejes eso, bebé, estoy a dos segundos de no preocuparme de ser atrapados por mis hermanos con mi polla en ti ¡Dios!

Seungmin sonrió.

—Te amo, Hyunjin.

—Yo también te quiero, Bebé.

Seungmin escuchó el clic de puerta abierta y llegó Changbin, seguido de cerca por Minho.

—Maldita sea, algo huele fantástico aquí ¿Qué hay de cenar?—preguntó Changbin.

—Lasaña—dijo Seungmin—debería estar listo en quince minutos, dame un segundo y me voy a echar el ajo al pan.

Poco a poco se levantó de su posición en el sofá, su pene estaba duro y dolorosamente visible contra sus pantalones, Minho se dio cuenta y levantó una ceja.

—No interrumpimos, ¿verdad?

—Sí, yo estaba tratando, sin éxito, de conseguir un beso de mi compañero—respondió Seungmin descaradamente sin apartar los ojos de Hyunjin.

—Cariño, si lo único que querías era un beso habría estado bien, pero ambos sabemos que habría terminado con mi hermano entrando y ya han visto demasiado de tu piel desnuda para mi comodidad.

Changbin y Minho se echaron a reír.

—Bueno, tal vez, pero todavía quiero mi beso—dijo Seungmin poniendo mala cara.

—Ven a por ello, bebé—dijo Hyunjin, abriendo sus brazos.

Y así lo hizo, Seungmin caminó hasta Hyunjin, lanzó sus brazos alrededor de él y saltó, envolviendo sus piernas alrededor de la cintura de Hyunjin, estrellando su boca en un acalorado beso, Hyunjin gruñó con el inesperado peso extra pero él no lo soltó, por lo que Seungmin estaba muy agradecido, quería realmente disfrutar de su beso sin preocuparse de más nada.

Seungmin estaba lejanamente consciente de Minho con su renovada risa pero estaba demasiado ocupado disfrutando del sabor de su compañero, frotando su polla dura en contra de Hyunjin, él gimió en su boca.

Hyunjin finalmente se retiró pero mantuvo sus manos sobre el culo de Seungmin, donde estaban sus mejillas, sosteniéndolo mientras lo masajeaba, Seungmin pasó la lengua por los llenos y hermosos labios de su compañero, besándolo dulcemente.

—Jesucristo, bebé, avísame la próxima vez, pude haber caído.

—Nunca me dejaras caer Hyunjin, siempre estarás allí para cogerme cuando lo necesite—dijo Seungmin en voz baja.

Hyunjin gimió suavemente ante sus palabras y cerró los labios en Seungmin.

—¡Jesús, ustedes dos ya basta! No hay tiempo para esto esta noche—el sonido de la profunda voz de Chan llegó al cerebro hecho puré de Seungmin a través de la neblina formada por la necesidad de su compañero.

Poco a poco se retiró del agradable beso mirando por encima del hombro a Chan, sonrió tímidamente y dijo;

—lo siento—colocando un suave beso en la los labios de Hyunjin, soltó el agarre de sus piernas alrededor de su cintura y los bajó al suelo.

—Bien, bien voy a ir a ver lo del pan de ajo.

Seungmin salió de la habitación con la cabeza en alto y sus mejillas ligeramente rojas, después de colocar la bandeja de pan en el horno junto a la lasaña, aumentó el calor,

Se acercó al fregadero y salpicó un poco de agua fría en su rostro, necesitaba calmarse, sobar a su compañero delante de sus hermanos no era buena idea, tendría que tener más control.

Después de limpiar el agua de la cara tomó un profundo aliento y se concentró en arreglar la mesa y preparar todo para servir la cena.

Diez minutos más tarde había conseguido por fin convencer a su polla de no traspasar su bragueta.

La lasaña y el pan estaban calientes sobre la mesa, llamó a cenar mientras buscaba las bebidas, puso las cervezas en la mesa, luego se instaló en su asiento.

Hyunjin se acercó a su lado y le besó la mejilla.

—Se ve delicioso bebé.

—Huele demasiado bien—agregó Chan mientras empezaba a olfatear la lasaña.

—Y sabe fantástico—agregó Minho un minuto más tarde con la boca llena de comida.

Los demás asintieron con la cabeza ya que estaban demasiado ocupados comiendo como para hablar.

Al terminar de cenar, Chan rompió el silencio.

—¿Así que todo listo para esta noche?

Seungmin tragó el nudo en la garganta.

—No realmente.

—Realmente no tienes de que preocuparte, eres el compañero de mi hermano, ya te he aceptado en la manada, todo lo que tenemos que hacer es anunciarlo a todo al mundo y listo.

Sonriendo al alfa a través de la mesa, Seungmin reunió a los platos y los llevó al fregadero.

—Dame cinco minutos para dejar limpio y entonces podemos ir.

—Bebé, deja de tratar de limpiar, lo haces cuando volvamos tenemos que ir ahora, no se ve bien si el Alfa llega tarde a su propia reunión.

Seungmin suspiró y se volvió hacia su compañero.

—Está bien entonces, vámonos.

Él caminó y dio a su compañero un rápido beso luego se volvió y siguió a todo el mundo por la puerta.

Los hermanos tomaron el auto de Changbin, mientras que él y Hyunjin salieron en su camioneta, se dirigieron en silencio a la reunión de la manada, la mano de Hyunjin apoyada en la parte superior de su muslo le hizo sentirse seguro y amado.

Se estacionaron en el aparcamiento aun vacío y esperó a que los demás salieran de su auto para reunirse con ellos.

—Vamos al frente—sugirió Chan.

Hyunjin tomó la mano de Seungmin y empezó a caminar por el bosque, después de casi quince minutos, llegaron a una amplia zona despejada en el centro del mismo, Hyunjin le había mostrado la zona a Seungmin en una de sus salidas a correr, se habían detenido para descansar juntos por un tiempo en la suave hierba acurrucados alrededor del otro en forma de lobo.

El recuerdo hizo sonreír a Seungmin y mejoró su estado de ánimo con respecto a la reunión de la manada, el sentimiento de amor y la alegría se instaló en su bajo vientre.

Apretó la mano de Hyunjin se acercó y puso un suave beso en la mejilla.

—¿Qué fue eso bebé? No es que necesitas una razón para darme un beso.

—Sólo porque te amo—dijo Seungmin

La sonrisa de Hyunjin valía la pena pasar por todo esto, devolviendo la presión en la mano, sintió como su polla latía con el contacto.

Hyunjin le dio una mirada de complicidad, él sabía exactamente lo que le hizo a Seungmin sonreir, poco a poco una multitud se encontraba en el claro y en menos de veinte minutos casi toda la manada estaba reunida.

Chan estaba en el centro del claro, Jisung a su lado y el resto del grupo se congregó alrededor de ellos, la reunión comenzó y Seungmin se inclinó junto a su compañero quien puso su brazo por los hombros y tiró de él en apretada unión, respirando el olor de Hyunjin se estableció la paz en él, mientras escuchaban a Chan conducir la reunión.

Treinta minutos más tarde después de varias disputas de la manada y de que otro ingreso hubiese sido aceptado, finalmente la voz de Chan sonó y Seungmin podía sentir el poder del Alfa detrás de sus palabras.

—Hyunjin y Seungmin, por favor un paso adelante.

Hyunjin sacó su brazo alrededor de Seungmin y le tomó la mano, lentamente avanzó hasta que estaban de pie frente a Chan, ambos se arrodillaron todavía con las manos unidas, inclinando sus cabezas en señal de sumisión.

—¿Qué razón tienen ustedes para venir esta noche ante la manada?—preguntó Chan a Hyunjin, sonriendo.

—Quiero anunciar que he encontrado a mi compañero, Seungmin y queremos ser reconocidos por la manada—dijo Hyunjin con voz clara para que todos los miembros escucharan.

Seungmin escuchó una respiración agitada detrás él y un fuerte gritó

—¡No!

Se volvieron para mirar en la dirección de la exclamación, caminando a través de la manada salía una mujer que parecía estar a punto de matar a alguien, ella tenía cerca de un metro setenta de altura con el pelo rubio fluyendo alrededor de sus hombros desnudos, usaba top y mini falda.

Seungmin pensó que ella era la personificación de “rubia tonta”.

Hyunjin tensó sus hombros cuando él la vio.

—¿Hyunjin, sabes quién es ella?

—Tal vez.

—¿Te importaría compartir, por favor?—oyó a Hyunjin tomar una respiración profunda y le apretó la mano de nuevo.

—Su nombre es Yeji y yo…. Salí con ella por casi un año antes de encontrarte, terminé la relación una semana antes de conocerte, ella trató de engañarme para que la mordiera.

—¿Ella qué?—Seungmin exclamó, tan enojado con lo que Hyunjin le había dicho que habló en voz alta.

Chan le miró, pero rápidamente volvió a prestar atención a la chica.

—Yeji ¿Qué significa esto? Hyunjin y Seungmin son compañeros.

—Hyunjin no puede estar emparejado a eso—ella agitó su mano en la dirección de Seungmin.

—Hyunjin es mi compañero y tengo la intención de reclamarlo, él sólo está siendo obstinado sobre este asunto.

Ella aleteó sus pestañas en la dirección de Chan ¡Qué estúpida era! ¿En serio? Chan era homosexual, todos lo sabían.

—¿Oh si? ¿Por eso trataste de engañarlo para que te mordiera tonta apestosa?—respondió Seungmin enojado.

Oyó el golpe de la respiración de los miembros de la manada.

—¿Qué?—Chan gritó detrás de ellos.

Los rodeó y miró a Yeji, su rostro era una máscara de furia.

—¿Trataste de engañar mi hermano alejándolo de su verdadera pareja?

El apareamiento era sagrado entre los de su clase, a Seungmin le habían enseñado que cuando el conociera a su pareja su cuerpo lo reconocería, reaccionando en consecuencia en su presencia, tal y como había sucedido en presencia de Hyunjin.

La manera en que tanto su lobo como su cuerpo reaccionan al hombre sexy no dejó ninguna duda en la mente de Seungmin que Hyunjin era su compañero, esto era una práctica aceptada hasta la fecha en los de su tipo.

No siempre se encontraba a su pareja, por desgracia no todos tenían esa suerte, algunos decidían no esperar o perdían la esperanza de conseguirla se casaban y tenían cachorros con alguien que podría hacerlos felices, era casi inaudito que alguien tratara de engañar a una persona para que mordiera y reclamara a otro.

Seungmin se estremeció al pensar lo que habría pasado con él si Yeji hubiera tenido éxito, si Hyunjin se hubiera vinculado con ella, él no habría podido reclamar a Seungmin, él sabía que Hyunjin era su alma gemela, ellos habrían pasado el resto de su vida suspirando por el otro sin poder tener la otra mitad de sus almas.

Lo que Yeji había intentado hacer estaba más allá de la comprensión de Seungmin, él miró a la cara de
Hyunjin y vio su propio dolor reflejado en el rostro del hombre que amaba.

Hyunjin suavemente ahuecó su mano contra la mejilla de Seungmin y se inclinó para besarlo, al separarse después de un beso rápido, Seungmin se dio cuenta que Chan seguía gritando.

Seungmin tenía que admirar a Yeji, tenía valor o era una maldita estúpida para enfrentarse al Alfa, aunque pensándolo bien, Yeji era del segundo tipo.

Ella se puso de pie con la espalda recta, la cabeza en alto, y miró a los ojos de Chan.

—Ese hombre no puede ser su compañero—ella se burló—Tal cosa sería repugnante e inmoral, Hyunjin no puede emparejarse con un hombre, yo soy su real compañera, puedo producir sus cachorros, deseo reclamar lo que es mío.

Sí, era definitivamente una estúpida, ella dio un paso adelante y miró directamente a Seungmin, el desprecio regía en su rostro.

—Bajo la ley de la manada te desafío por los derechos de vinculación con Hyunjin, él es mío y voy a limpiar el suelo contigo para demostrarles a todos que tengo razón.

—Mierda—Seungmin escucho exclamaron a los hermanos de Hyunjin detrás él.

—El desafío de pareja sólo se usa cuando la pareja en cuestión no son compañeros de verdad, Yeji, tú sabes eso—Chan dijo.

En su lugar, tranquilo, Seungmin pensaba que en las historias de manadas donde sólo se luchaba por los derechos de su compañero cuando eran reales compañeros y sólo porque los compañeros de verdad se encontraban uno al otro después de un apareamiento apresurado.

—No son compañeros de verdad, son una abominación.

Seungmin estaba realmente harto de su voz.

—Bebé, no tienes que hacer esto tú eres mi compañero y nada de lo que diga va a cambiar ese hecho—le dijo Hyunjin tratando de calmar a Seungmin.

—Tengo que hacer esto Hyunjin, entiéndelo, no tuve la oportunidad de luchar por mi derecho para permanecer en mi anterior manada, pero voy a luchar por ti, yo necesito esto, para probarme a mí mismo y a la manada.

Seungmin ignoró a todos dando un paso hacia adelante.

Hyunjin era suyo; él lo sabía, si tenía que luchar con esta perra para demostrárselo a todos los demás, bien, que así sea.

Alcanzando su camisa, se la pasó por la cabeza.

—Vente rubita, ya he tenido que luchar con Hyunjin para que me reconociera como su compañero ¿Qué es una pelea más? El hombre es mío, y tengo la intención de mantenerlo.

Seungmin bajó la cremallera de sus pantalones jeans y empujó hacia abajo para quitárselos, entregándolo a Hyunjin y besándolo rápidamente miró a Yeji, ella estaba quitándose la falda y la tanga, levantó una ceja hacia ella.

—¿Así que no eres una rubia natural, entonces?—oyó reírse a Hyunjin y Chan detrás de él y algunos de los otros de manada.

La cara de Yeji se puso rojo de ira, Seungmin empezó el cambio, quería dejar libre a su lobo para defender a su compañero, sin apartar los ojos de su rival, sintió la reorganización de sus huesos y el estallido de fuerza en la piel.

En unos momentos él estaba transformado en lobo, y empezó a gruñirle a la mujer frente a él.

—Ve por ello cariño, ya nuestra decisión está tomada.

Seungmin sentía como la confianza de Hyunjin se establecía en su corazón y le dio a su compañero un empujón rápido antes de lentamente caminar hacia delante, levantó el labio en un gruñido cuando la loba marrón, Yeji, saltó hacía él.

Fácilmente la eludió, logró conectar con sus garras un costado, oyó como escapaba un quejido de ella, a continuación, Yeji se volvió y atacó otra vez.

Seungmin no era lo suficientemente rápido para evitarla en esta oportunidad, Yeji se las arregló para conseguir cerrar sus mandíbulas en torno a su pata izquierda, Seungmin contraatacó hundiendo los colmillos en la espalda, podía saborear la sangre.

Rodaron, quedando Seungmin debajo de Yeji para defenderse, la empujó, pateándola con todas sus fuerzas en el vientre, enviándola a volar a través del aire, ella aterrizó con un golpe seco sobre la espalda, Seungmin rápidamente se puso de pie listo esperando el próximo ataque, su pata latía pero no se apoyaba en ella, por lo que fue capaz de ignorar el dolor.

Seungmin rodeó a Yeji, cercándola, al mismo tiempo abría las mandíbulas amenazándola, queriendo combatir, Yeji atacó de nuevo, Seungmin saltó al mismo tiempo, chocaron las mandíbulas y garras atacando todo lo que podían en el aire.

Cuando aterrizaron, Seungmin quedó sobre Yeji con sus mandíbulas firmemente cerradas alrededor de la garganta, él gruñó para exigir su rendición, sacudiendo la cabeza y mordiendo más duro cuando no respondió de inmediato, a pulgadas de acabar con ella.

Yeji finalmente se quejó, dejando de luchar, apretando su mandíbula una última vez Seungmin soltó su garganta y dio un paso atrás, volviendo a su compañero, él estaba a medio camino cuando escucho un gruñido detrás de él.

Antes de que pudiera dar la vuelta, fue empujado al suelo, las garras destrozando su espalda, él se derrumbó bajo el peso adicional, Seungmin trató sin éxito de rodar sobre su espalda para liberarse del lobo sicótico.

El peso de repente fue eliminado, vio a Chan en forma de lobo enfrentar a Yeji, sosteniéndola en el suelo de pie sobre ella, gruñendo y chasqueando las mandíbulas.

Seungmin cerró los ojos y se acurrucó con un gemido, el dolor corría a través de su cuerpo.

Hyunjin vio con horror como Yeji atacó a su compañero después de perder la lucha, se podría decir que Chan estaba cambiando junto a él cuando Hyunjin corrió hacia Seungmin.

Vio como Chan le pasó y atrapó a la perra en el suelo, Hyunjin sentía que corría en cámara lenta, vio como Seungmin parecía enroscarse sobre sí mismo, llegando finalmente a su compañero, Hyunjin se desplomó sobre sus rodillas, no sabía dónde tocar, había tanta sangre cubriendo a Seungmin.

—Seungmin bebé, por favor, abre los ojos, cariño.

Seungmin gimió, el corazón de Hyunjin casi se rompió al ver tanto dolor en su compañero, corrió suavemente sus manos a través de la piel de su compañero, tratando de evitar hacerle daño en la espalda.

—Cariño, por favor tratar de cambiar de nuevo, esto te ayudará a sanar.

Hyunjin levantó suavemente la cabeza de Seungmin en su regazo y seguía acariciando con sus manos a través de la suave piel de Seungmin.

Hyunjin escuchaba a Chan gritar a Yeji en algún lugar detrás de él, pero estaba demasiado preocupado para entender lo que Chan estaba diciendo, el lobo en su regazo dejó escapar un gemido de dolor y lentamente comenzó a cambiar de nuevo a humano, la transformación tomó más tiempo de lo normal.

Hyunjin escucho gemir a Seungmin y deseaba tener el poder de quitarle el dolor a su compañero, le pasó la mano suavemente por la espalda, las heridas profundas que Yeji había infringido a su compañero habían sanado un poco.

Seungmin abrió los ojos lentamente y miró a Hyunjin.

—Bebé ¿cómo te sientes?

—Hmmm.

—Cierra los ojos y tratar de dormir, tu cuerpo necesita sanar—Seungmin asintió con la cabeza y cerró los ojos de nuevo sucumbiendo al sueño.

Cuidando de donde colocaba las manos, Hyunjin lo levantó suavemente en sus brazos y se quedó sosteniéndolo, feliz de tener este precioso paquete.

Miró a sus hermanos y padres que se habían reunido a su alrededor, todos con aspecto sombrío.

—Voy a llevarlo a casa—les dijo Hyunjin.

—¿Cómo está?—su padre le preguntó en voz baja.

Hyunjin apretó a su compañero, tirando de él más cerca de su cuerpo.

—Debería estar bien con algo de descanso—Hyunjin se volvió y salió del claro del bosque.

No podía concentrarse en otra cosa que conseguir llevar a Seungmin a casa, preocupado por su sueño caminaba con cuidado a través de los árboles hacia la camioneta, veinte minutos más tarde, Hyunjin estaba cubierto con una capa delgada de sudor mientras abría la puerta del lado del pasajero.

Él había tomado más tiempo del necesario para llegar tratando de no perturbar el sueño de Seungmin, cuidadosamente lo colocó en el asiento del pasajero y lo envolvió en la manta que ahora mantenía permanentemente en la camioneta para sus carreras.

Hyunjin condujo camino a casa lentamente, dejando escapar un suspiro de alivio cuando llegó al hogar, se bajó y corrió hacia la puerta de entrada abriéndola antes de volver por Seungmin.

Seungmin se acurrucó en su calor cuando Hyunjin lo levantó en sus brazos, caminando al interior, empujó suavemente la puerta para cerrarla con el pie antes de subir a sus habitaciones, acostó suavemente a Seungmin en la cama, cubriéndole con la manta,

Seungmin estaba sobre su estómago, ya que la mayoría de las heridas fueron en la espalda, Hyunjin se dirigió al cuarto de baño para buscar un recipiente con agua tibia y jabón y una toallita, volvió al dormitorio, con el aliento contenido en el pecho a la vista de cu compañero.

Desde la cabeza hasta las caderas, Seungmin estaba cubierto de sangre seca, Hyunjin trataba de detener las lágrimas, dios, quería golpear algo, esto no debería haber ocurrido, Seungmin no debería haber tenido que sufrir debido a los celos de su ex.

Esperaba que Chan hubiera tomado cartas en el asunto, porque si volvía a ver a Yeji podría estrangularla a pesar de ser Inspector de policía y haber jurado proteger a los ciudadanos de esta ciudad, su instinto le gritaba que debería proteger a su compañero, estar con él.

Hyunjin se sentó en el borde de la cama y empezó suavemente a limpiar a Seungmin quién gimió y trató de acurrucarse más en la cama para entrar en calor, la ventana estaba abierta y el frío de la noche entraba golpeando su piel húmeda, Hyunjin trataba de limpiarlo rápidamente, siendo muy cuidadoso.

Después de lavarlo le colocó unas vendas cubriendo un par de los cortes más grandes en su espalda, tiró de las mantas para cubrir su cuerpo hasta los hombros, se desnudó y se duchó para limpiarse cualquier rastro de sangre seca.

Después de secarse, se metió en la cama y con cuidado abrazó a su compañero, la respiración de Seungmin parecía más fácil después de que lo envolvió en sus brazos, beso su cabeza y finalmente se quedaron dormidos.

Hyunjin despertó con el ruido del auto de su hermano entrando en la casa, alrededor de una hora más tarde, no mucho tiempo después escuchó un ligero golpe en la puerta antes de que se abriera para revelar a Chan de pie en la puerta.

En silencio entró al dormitorio y mirando al hombre dormido en los brazos de Hyunjin, preguntó en voz baja:

—¿Cómo está?

—No ha despertado desde que se desmayó en el campo, sospecho que su cuerpo sólo necesita tiempo para terminar de sanar, ella dañó seriamente su espalda.

Chan gruñó.

—Duerme un poco, hablaremos mañana—con eso, él salió por la puerta en silencio cerrándola detrás de él.

Hyunjin no creía que sería capaz de dormir así que siguió allí viendo a su compañero respirar, en algún momento durante la noche sucumbió al sueño sabiendo que Seungmin estaba a salvo en sus brazos.


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C/I [Hyunmin] 🎈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora