Besos De Caramelo y Café [FARGEXBY] [EN EDICIÓN]

CAPITULO 4

Fargan

Era receso por lo que estaba pacíficamente sentado comiendo mi almuerzo junto con algunas chicas monisimas sentadas a mi lado, todas tratando de llamar mi atención. Aunque la verdad, me importaba una mierda.

Ya habían pasado unas semanas desde la ultima vez que vi a mi pequeño ratón, como quise llamarlo. Le queda perfecto, es pequeño y tierno, y, como buen búho que soy, quiero comérmelo todo. Pero esta situación me estaba frustrando y mucho. Se supone que estamos en el mismo colegio, deberíamos encontrarnos al menos una vez, PERO NO! JODER!

Estaba centrado en mis pensamientos, ignorando por completo a la chica que me acariciaba el brazo o la otra que pasaba su mano por mi hombro, creo que me estaba diciendo algo, no lo sé. Solo se que cuando llegó Willy le dio un buen puñetazo a la mesa haciendo que todas se fueran despavoridas.

— JODER! Maldito crío hijo de puta! - exclamó furioso. Un poco más y abría los ojos de la ira, eso sí daría miedo.

— ¿pero qué pasa Willy? Compañero - hable con mi humor característico- ¿acaso te la mordieron?

El solo me lanzo una mirada asesina antes de empezar a comer, lo que hizo que me encogiera del susto. Willy podía dar mucho miedo cuando quiera.

— ¡¡perdón chicos!! - llego Rubius jadeando, ¿había corrido desde él aula hasta aquí? - cuando venía a mitad de camino me di cuenta de que había dejado la consola en el aula - se sentó dejando caer su cuerpo sobre la mesa - me cago en mis muertos, el susto que me dio

Rub se sorprendió de ver a Guillermo callando, por lo que me miro confundido pero me encogí de hombros indicándole que no sabía la razón de su estado.

— ¿pero que tienes Willy? que estás muy serio macho - sonrío acercándose a él para ver bien su rostro, lo que hizo que claramente el otro se sonrojara

— n nada Rubius, - murmuro - solo un tío que por su culpa reprobé mi examen

Guille molesto podía parecer un dragón feroz, pero cuando estaba con Rubén era como una pequeña tortuga enamorada. Se avergonzaba fácilmente, se ponía un poco torpe y hacia caritas que se veía malditamente tierno. Qué suerte tenían Rubius, aunque este no se diera cuenta...

— ¿el de matemáticas presumías tanto que ibas a aprobar? - pregunté divertido, ¿el ratón que asustaba se reveló o algo así?

Me miro molesto hasta que Rubius lo abrazo y acaricio su cabeza como si de un gatito se tratase. Willy inflo sus mofletes todos coloraos en un puchero, era una escena adorable.

Yo soy la primera y única persona a la que Guillermo le contó que estaba enamorado de Rubén. Esto me rompió un poco el corazón ya que en ese entonces tenía un pequeño flechazo con el, pero mi amigo era más importante así que olvide mis sentimientos y lo apoye y ayude en todo. Todavía no tiene el valor para decirle lo que siente y se que Rubius no tiene la cabeza para darse cuenta de eso, así que solo me quedaba esperar y admirar sus pequeños momentos de amor, como buen fan rubirex número uno que soy.

Lo bueno es que los mimos de Ruben calmaron mucho a guille y hasta mejoraron su humor, era un hombre nuevo. Así hablamos tranquilamente hasta que sonó la campana y volvimos a clases.

Me pregunto si algún día llegare a enamorarme de esa manera por otra persona. No es que lo quiera, mi vida del Playboy del colegio no está tan mal, tengo las chicas y chicos que quiera para darme buen sexo. Pero...

De pronto la imagen del pequeño chico moreno sonrojado vino a mi mente. Negué rápido con las mejillas levemente rosas.

No, no, no, mi pequeño ratón es nada más un deseo sexual, lo único que quiero es follar con él y que se ponga esa carita tierna y sonroja cuando le meta todo mi miembro y pida por más. Pero, ¿amor? Nah, por el momento no.