MAGIC CITY/One-Shots WinterBaron

☁4. Dark Paradise☁

.
.
.
☁

El oleaje se movía con calma, al compás del viento que estába calmo, en alguna playa de Sokovia, la playa favorita de Bucky y Zemo. El tiempo se sentía pacífico, el mar se movia con elegancia, alguna que otra gaviota sobrevolaba el lugar, la arena era fina y pálida, se sentía bien entre los dedos de los pies. A las espaldas del mar, había pastizal con hierbas, era algo muy hermoso, en ese lugar solían hacer picnics y relajarse en una manta roja que Zemo siempre se molestaba en llevar.

Frente aquel calmado mar, se encontraba parado James Buchanan 'Bucky' Barnes, esposo del Barón Helmut Zemo, por lo cual, él también era un Barón. Usaba ropas comodas de acuerdo al lugar en el que estába, pantalón de lino blanco, el cual llevaba doblado hasta la mitad de sus pantorrillas, su camisa de manga larga también era de lino, sólo que está de un tono beige muy bajo. No calzaba nada, pues quería que sus pies sintieran la comodidad de la arena, y la ligera agua que recorría las arenas.
Su cabello se movía al compás del viento, su cara mantenía una expresión relajada, pero aún así había rastros de tristeza. Sus ojos se mantenían cerrados, como tratando de mantenerlos de esa forma para siempre. Soltó un ligero suspiro y abrió sus ojos. Unos hermoso ojos azules, que tenían esa onza de tristeza en ellos. Observaba el mar, tan basto e inmenso. Observaba aquel mar con mucha melancolía.

"Solíamos venir aquí siempre que podíamos" hablo en voz baja, dirigiéndose a nadie en particular, pues se encontraba sólo.

Una vez más cerró sus ojos, y en el acto, recordaba todos los momentos que pasó con su amado esposo. Aquella vez que lo lanzó al mar con su traje costoso.

"No lo hagas, James"

"Observame" lo lanzó al mar, mientras se reía de como había quedado el traje Ralph Lauren que su esposo se acababa de comprar, para asistir a una junta de prensa.

"No tienes respeto por tu esposo" sonrió, pero con un poco de furia, así que se lanzó a Barnes y lo adentro al mar con él.

Ambos se rieron por como quedaron de mojados. Se miraron a los ojos y James depósito un beso cálido y tierno en los labios de su esposo.

Aún con los ojos cerrados, dio una sonrisa melancólica.

O aquella donde hicieron el acto de entregarse sus almas, el acto más puro y dulce.

Bajo la resplandeciente luz de la luna, los cuerpos de Bucky y Zemo se encontraban desnudos, entrgandose su amor de una manera pura y hermosa, sobre aquella manta roja que Zemo llevo, en aquella playa, en aquellas hierbas, dos cuerpos se amaban incondicionalmente. Entrgandose de la manera en la que sólo ellos dos sabían. Sus cánticos de amor sonaban en sus oídos, provocándoles las sensaciones más hilarantes, sintiéndose perfectos el uno al otro.

Tocó de manera suave su cuello con su mano derecha, tratando de revivir a toda costa aquella escena. Aún seguía sintiendo ese momento vividamente. Trataba de mantenerlo, tratando de sostenerlo y vivirlo para siempre. Siempre vivir ese momento tan especial.

Recordó la últimas vez que pasó con Zemo en ese hermoso lugar.

Ambos se encontraban sentados bajo aquella manta roja, con una pequeña canasta al lado, un pastel de ciruela al centro, varios bocadillos, dos copas de cristal y el vino más añejo y lujoso que dos Barones se podían merecer.