Aria
Hoy es sábado lo que significa que no trabajo y como no tengo nada que hacer pues le dije ayer a papá que le acompañaría al taller a ayudarle con un par de coches y así pasó la mañana con él como solíamos hacer cuando yo era pequeña. Me ducho rápido y me preparo, me pongo un tejano corto y una camiseta un poco más ancha de lo normal, no me maquillo nada porque la verdad es que no me apetece. Después de prepararme bajo a desayunar y ahí esta papá terminado de prepararse unas tostadas.
- Hola papá, pon dos tostadas en la tostadora porfa.- le pido, ya que él está terminado de prepararse las suyas.
- Vale cariño, estás preparada para pasar la mañana conmigo en el trabajo.- me dice algo emocionado.
- Si claro, me apetece pasar tiempo contigo.-
- Pues cuando termines de desayunar si quieres nos vamos, para llegar antes y abrir.-
- Si claro, me termino la tostada y estoy.- digo terminado de comer la tostada de mermelada que me he preparado.
Después de 15 minutos en coche llegamos al taller, mi padre aparca el coche en el aparcamiento del mismo taller y nos bajamos, saca las llaves y abre la puerta, encendemos todas las luces. Dejo mis cosas en la pequeña oficina que tiene papá donde deja sus cosas y salgo a preguntarle que puedo ir haciendo a lo que él me responde que mejor esperar a que lleguen los empleados y así empezar todos juntos.
Al cabo de 10 minutos empieza a llegar gente que van fichando en un aparato que hay al lado de la puerta de entrada. Me acerco a papá a preguntarle sobre qué hacer.
- Papá, que puedo ir haciendo de mientras.- veo como levanta la mirada de un coche que está revisando.
- Pues si quieres puedes ayudar a Dylan con un coche que le trajeron ayer, además estoy seguro de que os llevaréis bien, ya que es más o menos de tu misma edad.-
- Vale, pues dime quién es Dylan.- veo como señala a un chico joven que está mirando un coche en una esquina del taller.
Mientras me voy acercando me fijo en él, lleva puesto el típico mono azul de trabajo atado a la cintura con una camiseta blanca puesta, me doy cuenta de que es bastante atractivo y que ahora me está mirando mientras me acerco.
- Hola, soy Aria.- me saludo.
- Dylan.- veo como me tiende la mano para saludarme.-
- Mi padre me ha dicho que venga a ayudarte con el coche.- digo algo nerviosa por su mirada.
- Vale bueno si quieres, ayudame con esto que estoy haciendo.-
Al principio la situación ha sido un poco incómoda por el hecho de que nos conocíamos de nada, pero poco a poco hemos ido hablando de diferentes temas y ya no es tan incómodo, poco a poco me va cayendo mejor Dylan, ya que es muy majo y gracioso.
- De verdad que te paso eso de pequeño Dylan.- digo mientras me río por lo que me acaba de contar.
- Siii, debes creerme Aria.- me contesta riendo fuerte.- juro cuando digo que cuando tenía 10 años me caí de un caballo.
- Sí que te creo lo que pasa que ya eras grande como para caerte de un caballo.- termino diciendo riéndome aún más.
- Oye no me juzgues puedes caerte de un caballo a cualquier edad.- dice acabando de reírse.
Veo como Dylan mira al reloj que hay colgado en el taller así que yo hago lo mismo, me fijo en que son la una y media del mediodía, se me ha pasado la mañana volando.
- Bueno, queda media hora para acabar mi turno, gracias por ayudarme, de verdad que se me han pasado las horas volando.- me dice levantándose del suelo.
- Si, a mi igual.-
- Oye ahora que me acuerdo hoy viene a buscarme un amigo para ir a comer porque no te vienes tú también.- me quedo un momento sin saber qué decir ante su pregunta pero después acepto.
- Vale sí, puede estar guay.-
- Pues me cambio y ya estoy.- le respondo con un asentimiento de cabeza.
Veo salir a Dylan un rato después y me fijo en que ahora lleva unos vaqueros negros una camiseta blanca. Me despido de papá diciéndole que saldré a comer fuera y nos dirigimos hacia la puerta.
- De hecho estoy seguro de que conoces a mi amigo.- me dice Dylan a lo que yo frunzo el ceño.
- Como se llama.- pregunto.
Antes de que pueda responder me fijo en la persona que está de pie apoyado en el coche y me quedo sin palabras.
- Deiton.- es lo único que digo.
- Exacto.-
- Este es tu amigo.- le pregunto mientras nos vamos acercando.
- Sí.- me contesta.- que pasa colega.- veo como saluda a Deiton con un puño.
- Que pasa Dylan.- Deiton le responde al saludo.
Veo que Deiton no para de mirarme con cara extrañada.
- Buenos nos vamos.- dice Dylan mirándonos a ambos.- sube Aria.
- Como que sube Aria.- pregunta Deiton con cara seria.
- La he invitado a comer con nosotros.-
- Dylan de que conoces tú a Aria.-
- Me ha estado ayudando esta mañana con el trabajo.-
- Me parece perfecto, pero yo no la he invitado así que vamos Dylan.- veo como al decir eso mira a Dylan con cara de enfado.
- Da igual Dylan, otro día mejor.- digo yo también con cara de enfadada.
- Que no.- veo como Dylan me mira ahora algo serio.- yo te he invitado así que vas a venir.
- Vale.-
- Pues vamos.- dice ahora Deiton con cara de fastidio.
Después de los 20 minutos más largos de mi vida llegamos al restaurante, Deiton aparca el coche en el primer aparcamiento libre que encuentra y nos bajamos. Entramos y me quedo un poco alucinada por la decoración de la hamburguesería, está ambientada en los años 80, los asientos están forrados con colores bastantes vivos y el suelo parecía un tablero de ajedrez, ya que son baldosas negras y blancas. Al final del local están los baños. No hay mucha gente así que nos sentamos en una de las mesas que está situada cerca de la entrada. Dylan se sienta al lado de Deiton y yo me siento en frente de ambos.
Pedimos cada uno una hamburguesa con patatas y su respectiva bebida, mientras vamos comiendo el ambiente es incómodo porque no hay tema de conversación en ningún momento a no ser que Dylan diga alguna tontería para quitarle tensión al asunto, pero que no lo consigue, entonces al ver que no hay intención de parte de ninguno hablar nos centramos cada uno en su comida.
Pasa el rato y Dylan dice que va un momento al lavabo así que eso significa que me quedo sola con Deiton.
- Qué significa esto Aria, como yo entre en tu grupo de amigo ahora tú vas a hacer lo mismo o que.-
- La verdad es que no lo había pensado.-
- Seguro.-
- Bueno piensa lo que quieras.- le digo.
- Es lo que estoy haciendo.-
No me da tiempo de responder porque veo a Dylan como viene para la mesa. Terminamos de comer y pagamos la cuenta, salimos del restaurante y volvemos a casa, primero Deiton para en casa de Dylan y se despide de nosotros y ahora nos quedamos a solas hasta que lleguemos a mi casa.
***
Nota de las autoras:
Esperamos que os haya gustado el capítulo :)
Besos,
N y R
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Sensaciones entrelazadas
Teen FictionUn accidente de coche cambió la vida de Deiton Anderson convirtiéndolo en un chico roto, sin sentimientos, cruel y con sed de vengarse de la culpable de la tragedia. Cada día Aria Wilson, una chica cobarde, insegura, confiada y muy enamoradiza, se o...