–Enzo, ¿verdad o reto?- me toca a mí esta vez preguntar.
–Verdad.
Voy a preguntar algo pero Grace se me adelanta:–¿Verdad qué te tirarías a Nix?
Los ojos de Enzo pasan de la pelirroja a mí y en su boca se dibuja una sonrisa que hace que se me caigan las bragas.
–¿Para qué mentir? Sí.
Okay, eso no me lo esperaba. ¿Lo haría conmigo? Omg, omg respira Nix.
–Pero si son hermanastros- dice Dylan sacándome de mis pensamientos.
–¿Tú no lees mucho, verdad?- le contesta Grace alzando una ceja.
El rubio rueda los ojos y la ronda sigue hasta que me vuelve a tocar a mí.
– Nix, ¿verdad o reto?
–Reto.
–Te reto a sentarte encima de Enzo durante lo que dura el juego.
¿Porqué todo era relacionado con él?
Miro inmediatamente a Enzo y la sonrisa que me muestra me hace pensar que está contento con el reto.
–Ven aquí, dulzura.
Un poco nerviosa, me levanto y me acerco a Enzo. Cuando estoy a unos cientos centímetros de él, sus manos se aferran a mi cintura y me sienta en sus piernas.
Muy cerca de... ahí. Qué calor de repente, ¿no?
El juego sigue y las manos de Enzo se van moviendo cada vez más. Antes no me tocaba, pero ahora, sus manos están en mi abdomen, haciéndome cosquillas.
De un momento a otro, su cabeza descansa en mi hombro, y siento su respiración en mi cuello.
Jo-der.
Como siga así me va a dar un paro cardíaco.
–Paul, ¿verdad o reto?
–Verdad.
–¿Verdad que eres gay?
–¿Qué? ¡No! ¿Cuántas veces tengo que decirlo? Soy bisexual.-
–Seguro que eso es una tapadera para evitar decir que eres gay- dice riendo Dylan.Tengo que admitir que me está cayendo mal.
–¿Qué dices, tío? Si dice que es bisexual, es bisexual. Punto- le defiende Enzo. Quiero aplaudirle hasta el cansancio pero me contengo.
No sabía que Enzo iba a ser de mente abierta. Y me gusta. Giro mi cabeza lo suficiente como para poder mirarle a los ojos, cuando nuestras miradas se encuentran, le dedico una pequeña sonrisa y como respuesta, con sus manos me aprieta más él.
(...)
–Oye, Nix. Me has caído muy bien. A ver si quedamos para ver Teen Wolf juntas- me guiña un ojo Grace.
Tras unas horas jugando a las cartas, tanto la pelirroja como Dylan y Paul habían decidido irse.
Ahora, los tres están en la puerta, despidiéndose:– Claro. Le diré a Enzo que me pase tu número.
Grace después de darme una sonrisa, sale de la casa
–Adiós, Paul- muevo mi mano repetidas veces en forma de despido. El castaño se sonroja y me dan ganas de cogerle los cachetes y apretujárselos.
–Hasta luego, Nix.
De Dylan ni me despido. Soy de las que se guía por la primera impresión y este no me ha dado muy buena.
Cuando los tres salen por la puesta, cierro esta, quedando Enzo y yo solos.
FELIZ DOMINGO CHICXS. ¡A arrancar la semana con fuerza! :)
El extra que os prometí lo tendréis en unos pocos días. Y quizás tendréis más de uno... Quién sabe... ;)
Ahora subiré un capítulo más.
instagram: @lidiasstorm
Os mando muchísimo amor.
–Lidia.
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¿Mi hermanastro? Mi profesor.
Romance¿Quieres tenerlo en físico? ¡Pues ya está disponible en Amazon! :) Nuestra historia no es la típica de hermanastros, no. En esas historias, su hermanastro no termina siendo su profesor. En esta sí. Por desgracia, soy alumna y hermanastra de Enzo Sol...