7 REINOS || KOOKV~ KOOKTAE

🥀 Capítulo 6

Voy tarde, muy tarde.

Me encuentro ya en mi carruaje camino al Castillo de la Magia. Este se encuentra en el punto más alejado con respecto a mi palacio y tan solo quedan quince minutos para las diez en punto.

Muchas veces me gustaría poder tener algún poder como los demás o un bonito par de alas para poder surcar el cielo con rapidez. Además de que son bonitas. 

El único inconveniente que les veo es el momento de crecer. Para que ello debes tener una razón para vivir, algo así como el aferrarte a algo o tener un motivo de vida, y cuando lo encuentres, de la noche a la mañana, aparecerán en tu espalda. Suelen crecer antes de la mayoría de edad, ya que los niños son super creativos, con infinita felicidad y suelen encontrar esa razón pronto por muy sencilla que sea. Algunas personas lo encuentran antes, como Jin Hyung, él las tiene desde casi que nació. Y a otros les crecen después como a Jimin, que hasta los dieciséis no consiguió su bonito par de alas blancas.

Veinticinco minutos más tarde, el carruaje se encontraba parado en el portón principal del palacio. El cochero abrió la puerta para permitirme bajar del vehículo. Nada más salir, lo primero que vi fue a un Jimin muy ¿cabreado? dando zancadas hasta mí. 

Lo único que alcancé a hacer fue quedarme quieto a esperar que explotara su furia.

— ¡Kim Taehyung, ven aquí ahora mismo! — Vociferó tan fuerte que todos los presentes voltearon a verle con expresiones un tanto exaltadas. Obviamente, no me moví del sitio, Jimin podía convertirse en un mismísimo demonio si se enfadaba, o incluso peor.

— ¿Cómo se te ocurre desobedecerme? ¡¿Acaso estás loco Taehyung?! — Gritó el rubio en mi cara. — Prometí protegerte hasta el fin de mis días ¡¿y tú lo único que haces es ponerte en peligro?! — Yo me encontraba en algo parecido a un shock. ¿Habla realmente de lo que estoy pensando? ¿Cómo se ha enterado?

— Y-yo… Lo siento por llegar tarde, Jimin. Me quedé dormido y... la cocina se quemó por culpa de Jennie y Rosé, y … —  Intenté excusarme evadiendo el tema.

— ¿De qué hablas? Sabes perfectamente a qué me refiero. Anoche te escapaste para ir a verlo ¿es cierto? Dime que me equivoco. — Habló con un tono bastante decepcionado.

— Yo… Es cierto, fui a verlo. Ni siquiera sé cómo te has enterado. — Dije mirando al suelo, con aire triste. Había defraudado a mi mejor amigo y lo había hecho enfadar. Jimin suspiró pesado.

— Fui yo. — Una tercera voz respondió a mi pregunta. Hoseok Hyung apareció detrás de Jimin. — Dije que no te detendría, no que no se lo contaría. — Asentí tristemente. — Lo siento Tete, lo hice por tu bien. —

— Está bien Taehyung-ie, no te preocupes. No estoy enfadado contigo, se que es algo estresante para tí saber que está vivo después de tanto tiempo, igual que para todos. Pero por favor, no hagas nada que te ponga en peligro, solo tenías que esperar una noche o haberme avisado de que ibas a desobedecerme.- Colocó su mano en mi hombro soltando una efímera risita. Yo continuaba aún con la cabeza algo baja.

— Perdóname por traicionar tu confianza, sé que solo quieres protegerme. — Levanté la cabeza para dejar a la vista mi rostro con algunas lágrimas que brotaban de mis ojos.

— No Tae bebé, no llores. — Se acercó más para posar sus pequeñas manos sobre mi rostro acunándolo, mientras que con sus pulgares, limpiaba las pequeñas lagrimitas traviesas que aún salían sin permiso. — Eres tú quién debe perdonarme a mí por portarme así contigo. No quería hacerte llorar. — Acortó la poca distancia que quedaba entre ambos, sellandola con un cálido abrazo que me hizo sentir mucho mejor.