Tenía miedo, miedo de lo que podría suceder si la historia se repetía. Al principio, la historia se había tornado diferente, parecía un cuento de hadas. Avanzaba por un camino en el que todo era color rosa, había mariposas en todas partes, el día era soleado y parecía cómo si tuviera un coro angelical cantando en sus oídos todo el tiempo. Más, conforme avanzaba por el sendero y los días pasaban, la historia retomó su curso original. El camino fue perdiendo su brillo, las mariposas comenzaron a morir, el cielo comenzó a oscurecer y en lugar de tener un coro angelical, en sus oídos resonaban las trompetas del apocalipsis.
Sintió que el aire le faltaba, respiró mediante un jadeo y abrió los ojos de golpe, todo había sido un sueño, o una pesadilla. Tendría que volver a dormir para averiguarlo.