Hydra ya no les pertenece
Me toman del brazo bruscamente pero no me resisto, no sé exactamente a donde nos llevan pero de igual manera no saldré tan fácil de donde sea. La chica a mi lado se aferra a mi brazo como si su vida dependiera de mí, y así es.
La mujer recoge algunas cosas del piso a su paso y otras simplemente las arroja por las agrietadas ventanas rompiéndolas aun más.
El hombre al que han llamado Garret me suelta un segundo al ver tirada una cadena brillante. Esta es mi oportunidad.
─ ¡Corre! ─la empujó y ella no lo duda.
Le doy una patada en la mandíbula a Garret mientras esté está hincado aún con la cadena entre los dedos.
Intento correr pero me toma del tobillo y me hace caer, lanzo otra patada desde el suelo a su feo rostro y veo sangre brotar de su nariz. Me suelta lleno de dolor y me arrastro de nuevo hasta levantarme y correr por mi vida.
Escucho unos pasos detrás y recuerdo que me he olvidado por completo de la mujer, estoy por darme la vuelta y lanzarla por el aire pero me ha alcanzado, da un tirón en mi cabello que me hace retroceder y me estrella contra una casa poniéndome un cuchillo en el cuello dejándome inmóvil.
─La niña bonita tiene pelotas ─habla muy cerca de mi cara y el aliento combinado de alcohol y vómito me provoca náuseas.
─Mata a esa maldita perra ─Garret se levanta con la nariz rota y me es inevitable sonreír al saber que yo se la rompí.
─No ─me jala aún con el cuchillo sobre mi cuello poniéndome con la espalda pegada a su pecho─. Al jefe le gustan salvajes.
Me pasa la punta de la navaja por la mejilla y ahogó un gritito de dolor al sentir como está rasga la piel.
No puedo intentar defenderme, si lo hago puede que logre conseguir huir, pero me arriesgaría a qué se pusieran a buscarme por todos lados y eso pondría en peligro a todos los niños que Max y Karsteen han logrado ocultar. Incluso alertaría a los demás hombres del sur y podrían descargar aún más su enojo con las demás personas que solo intentan que este día termine.
No digo nada, me dejó arrastrar hasta donde ellos quieren. Llegamos al centro del pueblo y aquí todo tiene más caos y destrucción, hombres tirados por todos lados con bebidas en las manos, algunos tienen a alguna mujer entre sus brazos pero no les hacen nada simplemente les coquetean como si eso fuera a conseguir que cualquier cosa fuera más consensuada y menos despreciable.
Hay algunos otros celebrando y aún saqueando algunas casas, hay madera tirada por todas partes, vidrios y todo tipo de cosas se interponen en el camino.
Llegamos hasta un enorme lugar de fachada blanca, personas entran y salen con bandejas de comida y alcohol, afuera en el centro del enorme espacio libre hay una silla, un trono para ser más específicos, es de color negro y el respaldo es redondo en la cima de esté se forma una media luna y a las orillas dos espadas clavadas de cada lado le dan el toque final.
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Equinoccio ✓ [Terminada]
FantasiDos princesas tienen el mismo derecho de heredar aquel reino que su padre una vez les prometió, pero al final sólo una lo hará. Al morir su padre, ellas deben reclamar su trono, pero que tengan el mismo derecho las lleva a una discordia, el reino se...