Odiaba la idea de seguir bajo las órdenes y peticiones de sus padres, a pesar de ya haber cumplido la mayoría de edad y de tener el comportamiento maduro de un adulto, sus padres seguían usándola a su antojo y todo por el maldito dinero ¿Qué ganaba ella con todo eso? Realmente nada más que complacerlos.
Allí estaba otra vez, en una cena con gente importante que sólo se dedicaban a hablar de negocios y dinero. Todos bien vestidos incluyéndola a ella que llevaba un hermoso vestido de ceda negro ajustado al cuerpo, sobre sus hombros un pequeño abrigo fino color blanco y unos tacones perfectos que combinaban con el vestido y el maquillaje, su cabello negro algo ondulado y bien estilizado cayendo por sus hombros, se veía deslumbrante esa noche pero realmente sólo era superficial debido que sólo se producía así por petición de sus padres, dar una buena impresión era lo importante.
Frente a ella sentado, el joven con quien sus padres deseaban emparejar. Al igual que a ella, este se veía desinteresado sobre lo que los demás comensales hablaban y discutían, el dinero no le interesaba a pesar de ser hijo de unos ricos empresarios y mucho menos le interesaba la jovencita frente a él. Este miraba con mala cara a quienes lo rodeaban, sus cabellos rubios ceniza estaban bien estilizados y mayormente en punta, tenía unos penetrantes ojos color rojo brillante y vestía de un elegante traje azul oscuro que lo dejaban ver tan atractivo.
Todos a excepción de estos dos estaban tan sumergidos en la charla, que no se dieron cuenta cuando uno de ellos y en este caso, Senju Pierce, se levantaba de la mesa y comenzaba a caminar hacia el patio trasero de aquella enorme residencia. No se dio cuenta que detrás suyo la venían siguiendo.
Llegó a lugar, las características de este eran un patio gigante con vistas y diseños caribeños, una hermosa cascada artificial y como mar, una hermosa piscina, palmeras y hamacas, un pequeño puesto de batidos, licores y bebidas típicas de aquel lugar, era todo hermoso allí.—Senju Pierce, ¿No?—escuchó una voz grave a su lado, que la motivó a voltear su vista.
Allí junto a ella, se encontraba aquel chico rubio del cual sus padres habían hablado antes.
—Bakugo Katsuki.—responde ella con una expresión neutral.
—Dejaré en claro algo, no me interesas pero esforcémonos para que esta mierda salga bien.—por el tono de voz que usaba, parecía algo molesto.
—A trabajar duro, animo.—dice la contraria con una sonrisa totalmente falsa para luego alejarse de él.
A decir verdad, ninguno parecía estar interesado en el otro pero lo harían parecer lo más real posible por sus padres.
Katsuki quedó en el balcón viendo todo desde allí mientras que Senju iba adelantándose hacia el living al aire libre de aquel jardín, era una maravilla y desde ahí podía ver al rubio arrogante con quien debía salir de ahora en más.La tranquilidad de la joven duró poco, su celular comenzó a vibrar y del otro lado se escucha la voz altanera de su madre.
—¿Dónde te has metido?—hablaba la mujer.
—Estoy con Katsuki, ¿Pasó algo?—claramente era una mentira pero no deseaba estar con sus padres.
—¡Oh! Entonces puedes volver a casa con él, tu padre y yo nos adelantamos.
Tras eso, la madre de Senju se despide y la joven suspira tranquila. Logró sacarse de encima a aquellos dos, volver a la casa junto con ellos no era lo que precisamente quería.
Esperó unos segundos a que sus padres ya se hayan marchado, y al rato contacta un uber para volver a casa porque estaba claro que volver con el rubio no era opción.
No pasó mucho que el transporte de la joven vino por ella, subió a la parte trasera de este e indicó la dirección a la que debía llevarla, que a decir verdad era bastante lejos de donde se hallaban, aproximadamente una hora y diez minutos.
El joven chófer sólo asintió y comenzó el viaje en silencio mientras que Pierce se entretenía con la vista del recorrido. Iba tan ida que no se percataba como el joven le observaba por el espejo retrovisor, a este le cautivó de inmediato la belleza de la muchacha casi al instante en que la observó entrar al auto.Por otro lado, Katsuki observó todo desde el balcón, como la joven iba saliendo del patio trasero hacia el exterior de la casa. Este no había dudado en seguirla y ver que tramaba, pronto vio un auto blanco estacionado, auto en el cual viajaría su novia, luego de eso recordó lo que su madre le había dicho por mensaje de texto "lleva a Senju a casa", definitivamente estaba muerto si le llegaba a pasar algo a su chica. Algo fastidiado tomó las llaves de su auto y decidió seguir a aquel coche a una distancia considerada para evitar algún tipo de conflicto aunque muy poco le importaba eso.
Y es así como esta historia comienza.
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Jugando A Querernos - Bakugo, Dabi y Oc (PAUSADA y EN EDICIÓN)
Teen FictionUna historia un poco enredada entre juegos del amor, el dinero y la pasión. ¿Ganará lo material o el corazón? ¿O ambos? ⠀ • Personajes de Boku No Hero Academia, no me pertenecen a mi, únicamente el per- sonaje femenino es de mi autoría. • Todoro...