Mudanza

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El día siguiente fueron a la escuela. Al llegar, Kid les informó que mientras estudiaban, una empresa se estaba ocupando de cambiar sus cosas personales hacia el lugar que sería su nueva vivienda, a la cual acudirían desde esa misma tarde.

-Qué rápido. Gracias Kid -Le sonrió Maka. -Nos ahorraste muchos problemas.

-¿No extrañarás nuestra casa? -Le preguntó Soul, mirando hacia otro lado.

-Muchísimo. De haberlo sabido esta mañana, me hubiera despedido.

-Igual. Sobre todo de mi cama. -Ambos se sonrojaron. El recuerdo de la noche anterior, y la mañana, despertar desnudos aún, besándose, los golpeó. Ya habían acordado que no podrían tomarse mas las manos, o abrazarse en público mientras fuera concubina de Blackstar, y tratar de acercarse mas a este. Tomó aire, alcanzó a su azulado amigo, y tomó la mano de éste.

Unas horas después, Soul se secaba el pelo con una toalla en las duchas, tras finalizar los entrenamientos del día.

-¿Y cómo estuvo? -Lo palmeó Blackstar.

-Bien.. ¿A qué te ref...? -Miró alrededor y se vio rodeado de la sección masculina de Spartoi en pleno -ahhh -Se sonrojó completamente. Se pasó la mano por el pelo, rectificando su espalda -Comprendo de dónde viene todo el ruido. Es lo mejor del mundo. Literal. -Miró un Blackstar sorprendido por sus palabras, y escondió su cara en las manos. Sentía sus mejillas ardiendo.

Blackstar se rió antes de palmearle la espalda. -¡Ese es mi muchacho! -Celebró, todos lanzaron vítores, riendo, chiflando y palmeando. Un profesor les fue a gritar que salieran luego, así que terminaron de arreglarse para almorzar en las escaleras.

-Los chicos ya saben, ¿Sufriste interrogatorio también? -Le susurró a Maka un segundo que estuvieron cerca.

-No, pero gracias por avisar. Liz sólo me preguntó por un moretón que tengo en la cadera, lo otro fueron bromas sobre la mudanza y ropa interior.

-Ya veo.

-Maka -Le dijo Liz, frente a todos. -¿Cómo te sientes hoy?

-Bien... -Le respondió extraña. -Algo adolorida nada mas,

Liz la miró y se le acercó.

-¿Qué? -Le tocó la frente -Quiero decir, ¿ustedes se confesaron finalmente?

-Haaa Emmm sí. -Dudó antes de responder. -Hablabas de eso. -Se tocó la frente.

-¿De qué hablas tú? ohhh- Se dio cuenta y retrocedió tapándose la boca. Jacqueline y Kim escupieron lo que tenían en la boca y empezaron a reír. -Lo siento, no quise... pero me parece bien, está...

-Está perfecto, Maka -Kim la abrazó inesperadamente. -Todo está muy bien. ¿Fue bueno?

-Maka miró a un sonrojado Soul antes de responder -Lo mas maravilloso que haya pasado nunca.

-Entonces todo está bien.

Maka se preguntó brevemente porqué todos parecían aliviados, parecía de estas situaciones donde su inocencia o ignorancia la mantenían fuera de una conversación de adultos. Lo cierto es que ninguno de ellos quiso explicarle a qué temían realmente.

Terminando las clases, un vehículo esperaba al grupo para ir al nuevo departamento. Era en un tercer piso. Una señora con una carpeta iba dando especificaciones del modelo, que tenía dos baños con ducha, una zona compartida, un living y un comedor aparte. Al llegar, abrió la puerta con llave, y les entregó cuatro copias. Kid los seguía de cerca.

El lugar era de planta abierta, al lado derecho había una cocina americana con comedor, totalmente equipada (Soul se preguntó qué eran algunas de las cosas), seguida de un pasillo corto, que acababa en tres puertas. Dos cuartos y un baño. A la izquierda, una puerta mas, seguro que otro cuarto, y un espacio donde había un sofá, los estantes con los libros de Maka, y de espaldas a la ventana un rack con un gran televisor, que también contenía videojuegos y películas.

La señora finalmente se fue, Soul y Maka sentían la incomodidad del otro y la suya propia, su sincronización de almas a veces llevaba a eso.

-Tengo una duda...

-Le hubieras preguntado a la señora. Yo iré a ver los cuartos... -Blackstar no se demoró en atravesar la casa y abrir las tres puertas casi al mismo tiempo. -¡Hey, Tsubaki este es el tuyo! Y este... Oh, mira mis equipos.. ¡Yahoo!

Tsubaki fue tras el inquieto ninja -Recuerda que Soul es sensible al ruido y no debes gritar tanto...

-Eso quiere decir que...

-¡Maka mira! -Soul abrió la puerta de la derecha -Ven, acá están mis cosas... y tu ropa.

-¿Dormiremos juntos? -No pudo evitar sorprenderse al ver la enorme cama matrimonial que había en el lugar.

-¿No lo hacen siempre? -Preguntó Tsubaki, detrás de ellos.

-No, sólo en los campamentos...

-y las tormentas -completó Soul -Y otras pesadillas...

-Y las misiones -Maka tenía las manos en la espalda, y se balanceaba de adelante hacia atrás -Bueno, la verdad estaremos muy cómodos.

-Pues sí -Soul botó el aire que había estado conteniendo todo el rato, sin relajarse aún del todo. -Aquí estaremos muy cómodos. -Su estómago gruñó.

-Jajaja, creo que iré a hacer la cena -Se rió Tsubaki.

-¿Quieres que te ayude? ¿Tomaremos turnos?

-Mh... -la ninja se tomó la barbilla. -Estoy acostumbrada a cocinar mucho, primero en casa y luego Blackstar y soy mañosa con cómo se hacen las cosas... Prefiero que me dejen la cocina a mi.

-¿Segura? -Cuestionó Soul -¿No será mucha carga?

-No, así me relajo un poco. Es terapia. -Miró hacia donde el ninja se ejercitaba, haciendo ruidos extraños. -Lo necesito.

-Muy bien, entonces yo te ayudaré y lavaré los platos, Soul puede...

-Puedo hacer la compra en la moto. Y picar vegetales.

-Picar vegetales servirá de mucho. -Tsubaki comenzó a revisar los estantes y sacar cosas.

-Me gusta pasar la aspiradora, lo bueno es que compartiré baño sólo con Soul, y soy yo quien hace la lavandería.

-¿Ah sí? -La voz de la ninja se puso súbitamente dura, como su mirada mientras Maka empezó a lavar el arroz. -¿Sólo tú haces la lavandería?

-Yo a veces saco las cosas de una cosa y las pongo en la otra, o la saco y la doblo... -Soul se rascó la cabeza.

-Quiero saber cómo irán los turnos de baño los fines de semana.

-Bueno, -Soul tomó la tabla de picar y los vegetales -Ustedes se duchan antes de ir a Shibusen igual que Maka, verdad...

-¿Tú no?

-Yo no entreno más que en la escuela, así que suelo ducharme ahí. A veces nos quedamos con Maka un par más de horas, y ahí sí... o cuando jugamos basket...

-¿No te bañas los fines de semana? -Blackstar parecía asqueado e impresionado. -Antes pensaba que soportabas a Maka, pero ahora parece lo contrario.

Maka soltó una risita -no es tanto, mientras no deje la ropa tirada en el piso, y en la canasta del lavado no es tanto. Y no huele tan mal, siempre que suda se da una ducha, es sólo que los fines de semana que estamos en casa no suele moverse mucho.

-Ah, Soul, no me gustaría que desayunes sin camiseta tampoco. -Tsubaki se sonrojó antes de continuar-perdón por ser tan exigente.

-Está bien, de verdad estoy agradecido que hagan tantos sacrificios... muy agradecido.

-También yo. Profundamente... bueno, Blackstar sabe.

-A mi no me molesta si Maka desayuna sin sostén -completó Blackstar. -Igual, esto será de dos meses, pero estaremos parte de ese tiempo en Japón. Allá me parece que no tendremos cuartos, así que aprovechen su intimidad mientras la tengan.

Así lo hicieron. Cada noche antes del viaje. 

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