Recuerdo oscuridad y silencio, caminando por un bosque que no parecía tener fin.
A mi lado había una luz que me acompañaba en aquel camino, camino que a cada paso se sentía tan angosto como pesado.
No podía parar de llorar, tenía frío y vagaba sin rumbo, confiaba en tu brillo para guiarme pero mi miedo no me dejaba moverme y mis pies no respondían a tus indicaciones.
Comencé a correr en dirección contraria para salir de ahí, mis piernas parecían querer ceder, no quise mirar hacia atrás pero ahí estabas tú, cuando cruzamos miradas te escuché decir "toma mi mano, caminaré contigo, cariño" pero, ¿porque solo me encontré un espejo?
Al entrar al lugar, mi reflejo no parecía entender quién estaba frente a el, a mis ojos yacia una figura que a este punto no reconocía como mía, hablamos por horas aunque seguía sin confiar, susurraste suave a mi oído "es tu alma, diciéndote que cierres tus ojos" seguí tu consejo y confesé que algunos días ni siquiera podia confiar en mí. Parecía haber conversado por años en aquel lugar, al inicio se sentía frío pero al final entendí que era yo encontrándome de nuevo mientras sentía como mi interior se sentía más cálido. "Pronto todo habrá acabado y estará enterrado en nuestro pasado" te oí asegurar.
Salí de esa cueva encontrándome entre flores, no había rastro de aquel bosque roto y triste, mire bien y estaba en el mismo lugar, fuí yo quien lo había deteriorado, ahora con la mente clara y mi fe restaurada, podía caminar en paz.
Recorrí mi corazón, vi a lo lejos el lago que mis lágrimas habían llenado, mis penas me saludaron y las abracé. Cuando llegue al mar de mis pensamientos me percaté que el fondo que antes era difícil distinguir por las mentiras que yo mismo creaba, ahora tenía la claridad que me fue entregada. Y es que, aunque la verdad puede variar, yo decido cual me va a guiar, ahora esperaré por ti mientras subo al barco que llevará a salvo nuestros cuerpos a la orilla.
—Ahora te has ido, ido, ido, te ví desaparecer... Todo lo que me queda es un fantasma de ti...ahora estoy destrozado, destrozado, destrozado, no hay nada que pueda hacer...—
Te escucho llorar mi amor, pero quiero decirte, con el poco tiempo que me queda aquí, que ante el bosque de mi mente tú eras la luz que caminaba a mi lado al salir de el.
Te escucho llorar, pero no te preocupes, solo déjame ir, nos encontraremos otra vez.—Ahora espera, espera, espera, por favor espera por mi, no te preocupes pues te veré cuando vaya a dormir— y con un beso dejó a su amado descansar en paz mientras bajaban su ataúd a la tierra, le arrojó una rosa y aunque se alejó con lágrimas en el rostro, éstas ya no eran de tristeza pues con una sonrisa y aquel frasco en su bolsillo, se reuniría en muerte junto a él.

ESTÁS LEYENDO
Wait for me
Tiểu Thuyết ChungEste barco llevará a salvo nuestros cuerpos a la orilla. Créditos de portada: @soulslanki en twt.