OSCURO

Capítulo 1

El infierno de Harry comienza nuevamente cuándo regresa con los Dursey.

Después de salir de la estación 9¾ Harry busco a su 'amoroso' Tio el cual nunca apareció, después de varias horas se resignó a que llegará por el, antes de partir de Howards para su mala fortuna no cambió sus Galeones a dinero muggle así que tuvo que irse caminando asta Privet. Cuando llegó sentía que sus pies estaban encendidos en llamas, la respiración entrecortada, el estómago ardiendo e infinidad de dolencias. Lo único que lo hizo llegar vivo a su casa fue su magia, sin ella probablemente hubiera caído desmayado en las primeras 3 cuadras.

Cuando llegó a Prit Drive se dio cuenta que todo estaba apagado dentro de la casa así que se sentó en la entrada esperando que llegarán sus familiares, Harry noto que Hedwi estaba muy inquieta por estar encerrada así que la liberó.

La familia Dursey llegaron a muy entrada la noche, Harry se levantó rápidamente y se hizo a un lado para no obstaculizar la entrada, pudo escuchar como Dudley se reía de él desde dentro del coche, cuando pasó a su lado lo empujó y se echó a reír. Petunia lo vio con asco y lo xermoneo por estar perdiendo el tiempo. Vernon solo lo tomó del cuello y lo forzó a entrar, Harry como siempre no dejo salir ni un ruido de él.

Qué inocente fue al pensar que con la carta de Sirius su verano sería más tranquilo...

Después de que Vernon leyera la carta de Sirius, le pegó en el rostro con fuerza lanzando a Harry contra la pared, su vista se volvio nublada y siente que algo caliente escurre por su rostro.

-Creés que alguien se interesa por ti fenómeno, no me hagas reír. Si a alguien le importaras un poco ya no estarías aquí maldito monstruo.

Vernon se quita el cinturón, agarra a Harry del brazo para tirarlo al suelo. Harry ya sabía que tenía que hacer, con todo su cuerpo doliendo por caminar asta la casa de sus tíos y la cabeza sangrando se quito la camisa para inclinarse.

Harry no podía evitar pensar que es un idiota por creer que su tío se detendría por una carta, por una Maldita carta de una persona que no conocía, pero se sentía tan bien el pensar que esa persona desconocida... Su padrino podía sacarlo de este infierno, pero sólo era uno de sus muchos sueños que jamás sucedería. Ahora por culpa de su padrino empezaría su verano con una golpiza, se odiaba a sí mismo por no poner alguna resistencia o querer huir pero estaba tan cansado de todo solo quiere cerrar los ojos y ya no despertar.

Fue sacado de sus pensamientos cuando Vernon se enojo de que el fenómeno como el le dice no le preste atención, abre el armario y con una patada tira a Harry dentro de él, le quita la varita para romperla, los ojos de Harry se agrandan provocando otro golpe de parte de Vernon.

-Maldito fenómeno, no entiendo como pude darte la habitación de mi querido Dudley seguro fue culpa de alguno de tus trucos raros, pero dejame decirte que no volverá a pasar, estarás donde perteneces- cierra la puerta de golpe seguida por el sonido "Clic" de la cerradura.

Con su espalda sangrando, una costilla rota y su tobillo con una forma extraña se hizo un ovillo agradeciendo que libero a Hedwig antes de que llegara su tío.

El dolor es insoportable, si estaba acostumbrado a ello, pero de alguna forma se sentía diferente. Se sentía con ira, no hacía los Dursey, Dumbledore o incluso Voldemort, se sentía enojado con el mismo por tener magia, si tan solo fuera un muggle sus padre estarían vivos y sus tíos lo amarían. Se reprendió mentalmente por ser tan inocente, nadie lo amaría aún siendo un muggle.

Los sentimientos de Harry eran tan abrumadores que no pudo resistirlo tomó un pedazo de cristal roto que guardaba desde los ocho años, empezó a cortar sus brazos teniendo cuidado no cortar tan profundo, no podía permitir morir como le había dicho el profesor Lupin "se lo debía a sus padres". Cuando pudo reaccionar tiro el pedazo de cristal lo más lejos que pudo, puso toda su concentración en ver sus brazos sangrando asta que Morfeo lo resivio.