B0nnie

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Sigo sin entender como alguien como el me eligió a mi, el era todo lo que podría desear, su carita tierna, su voz angelical, pero sobre todo, su sexy cuerpo, se que sonara superficial pero no puedo evitar fijarme en ese pecho, en ese trasero, el era prácticamente un sueño hecho realidad, al verlo no podía evitar sentir mariposas, no solo era hermoso sino que su actitud también me conquistaba, era dulce y gracioso, amaba los gatitos y cuando sonreía era como si de el emanara una luz, no podía evitar soñar con el y despertar con una gran erección, soñaba con hacerlo mío, con tocar su cuerpo, con besarlo, realmente quería hacerle un montón de cosas, pero como un tipo como yo le podría gustar a un ángel como el, nunca me había atrevido a hablarle, mucho menos acercarme, pero ya se acercaba el 14 de febrero y no perdería la oportunidad, me prepare, hice miles de discursos, practique frente al espejo, estaba listo para declararme.

Llego el gran día, el día en que confesaría mis sentimientos a el chico de mis sueños, me había arreglado, había comprado un ramo de girasoles y tenia preparados unos chocolates, le deje una carta para vernos en recreo, en el aula de música, estaba listo para decirle mis sentimientos, hay llego, con su hermosa carita, al mirarme se sorprendió, se acerco con delicadeza y me abrazo, no sabia como reaccionar, estaba sudando como nunca, hasta que el dijo:

-Tu también me gustas, siempre te me has hecho muy guapo y muy agradable, pero no me atrevía decirte nada-

Sentir su cuerpo junto al mío hizo que mi miembro se levantara, dios, pensaría que era un pervertido pero para mi sorpresa no se inmuto, se alejo un poco y me miro de manera picara 

-Vaya, de verdad de gusto, mira, ya estas duro, déjame ver que ocultas-

¿Acaso soñaba? esto realmente estaba pasando, pero no dejaría que ese pequeño chico me dominara 

-¿Que creías que hacías pequeño conejito?- sacudí mi cabeza de un lado hacia el otro -Yo soy quien te dirá que hacer- 

Lo tome de los brazos y lo bese, me baje los pantalones y deje al descubierto mi gran miembro.

-Vaya, es demasiado grande- me miraba con una combinación de picardía y temor.

-Ahora chúpalo-  Me sentí increíble dándole ordenes, me gustaba mandarlo, el empezó a chuparlo, su pequeña boca me encantaba, chupaba y lamia mi pene de tal modo que me hacia gemir, ver como sobresalía en una de sus mejillas me parecía adorable, pero no pensaba acabar si no era en su interior

-Detente conejito, es hora de sentirte dentro-

Lo tome de la cintura y lo levante para luego bajarlo de golpe en mi pene, estaba tan caliente.

-Ahora sigue- 

Empezó a moverse, cada vez mas rápido,  pero ya era hora de hacerme el jefe, lo puse contra la pared y lo empecé a follar de manera tosca, el gemía como loco.

-¡GRITA MI NOMBRE PUTA!-

-Ahhh J-jefe m-maestro... aaahhhh- sus gemidos me volvían loco, empecé a penetrarlo mas rápido, el sonido que producían sus nalguitas cuando chocaban en mi pelvis me volvían loco, ya no podía aguantar mas y me vine, el semen recorría sus piernas, estaba muy cansado, pero había cumplido una de mis mayores fantasías.

-Bien hecho B0nnie, lo hiciste muy bien, eres un buen conejito- 

Desde hay comenzó mi relacion con B0nnie quien se convirtió en mi pareja y en mi esclavo sexual.

Mi pequeño conejito (Jefe maestro x B0nnie)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora