Izuku solo podía caminar si alguien lo ayudaba, se tenía que apoyar en algo para poder dar siquiera un paso, su débil cuerpo no aguantaba lo suficiente aún, razón por la que en su desesperación por ir con Bakugo, se levantó y mientras se sostenía de la pared caminaba. Cuando estaba por llegar a la puerta está fue abierta por Bakugo, éste, tal vez arrepentido de gritar y de ver la mirada llorosa de Izuku, se acercó a él y lo abrazo con desesperación.
- ka..cchan lo lamento, yo no quería..
- está bien deku, solo ya no lo menciones, no lo hagas, por favor... ya no
Y escucho por primera vez en mucho tiempo la voz rota de Bakugo, esa voz que le dolía escuchar apenas retumbó en sus oídos, un escalofrío recorrió cada hueso de su cuerpo, una lágrima logró salir y entonces lo abrazo con su débil fuerza un poco más.
- perdón kacchan, no quería recordarte nada, lo lamento mucho.. perdón...
Y izuku lloraba, tal vez solo era la fatiga y el cansancio, o tal vez Bakugo terminó asustándolo, katsuki se alejó para verlo de frente y limpiar sus lágrimas.
- idiota, no llores, tienes que mantener toda la Jodida agua en tu cuerpo, no tienes idea de cuánto me costó que estuvieras hidratado
Logró hacer a izuku reír, una risa débil, pero al menos lo distrajo de su llanto, Bakugo lo volvió a abrazar y acarició su cabello mientras caminaba de vuelta a la cama, se sentaron y mientras izuku trataba de calmarse Bakugo lo miraba, repentinamente agarró su mano haciendo que el de ojos verdes volteara a verlo.
- nerd, prométeme una cosa
Izuku se quedó en silencio, esperando a que Bakugo soltara lo demás, era tan obvio, el nudo en su garganta solo dolió más.
- se que no lo estás haciendo, hablamos de esto y lo prometiste, pero si no es así y le hablas a eso dentro de ti, detente, necesito que lo dejes de hacer. Sabes que no es bueno para ti. Sabes que eso no existe aún.
- no.. existe?
- no
No podía decirlo de otra manera porque no la hay, aun no existe y es lo único que importa ahora, por eso, que Bakugo le dijera eso, esas últimas palabras, lo hirieron más de lo que hubiera querido, Bakugo sostuvo su mano con más fuerza y se puso de pie para verlo de frente, su mano libre la pasó por sus pecas, se acercó a él y beso sus labios.
- no existe deku, aún lo hace así que ya no le hables a la nada, solo te quiero proteger, lo entiendes, verdad? quiero hacer esto menos complicado.
Izuku tenía una mirada inexpresiva, como si estuviera profundamente perdida en algún ponto fijo en el suelo, pero Bakugo tenía razón, nada los libraba de volver a perder al bebé, y si eso pasaba, nada los libraba del sufrimiento que ambos tendrían que recorrer de nuevo, Bakugo tenía razón, mientras él era realista, izuku se mantenía en un mundo donde a pesar del dolor estaba feliz, donde aprovechaba las noches obscuras y las duchas ruidosas por el agua para tener conversaciones con eso que crecía en su vientre, con eso que como dijo Bakugo, aún no existía.
- nerd, estás bien?
Izuku levantó la vista hacia los ojos rojizos que tenía enfrente, volvió en sí y asintió mientras sonreía tiernamente.
- si kacchan, estoy bien
Bakugo lo volvió a besar, ahora más intenso que hace unos minutos, con amor y necesidad.
- entonces promételo deku
Y continuó con el beso, como si quisiera callar cualquier palabra u objeción que saliera de su boca, cualquier cosa que no fuera esa promesa que debía cumplir. Que lo besara como llevaba sin besarlo varios días hizo a ambos recostarse en la cama, y hacerlo hizo que la mente de izuku se despejara, creyendo en Bakugo, creyendo en que hacía lo correcto.
- lo prometo kacchan
A pesar del beso intenso y necesario del momento, sintió como a Bakugo se le formó una sonrisa, sonrisa que también le transmitió a izuku y de repente ese momento de tensión y tristeza pasó a ser uno de amor, felicidad y tranquilidad, uno que ambos compartieron gustosos.
Besos, caricias y roces que desafortunadamente no podían llegar a más, terminaron besándose como si fueran dos jóvenes divirtiéndose, así hasta quedar acurrucados entre las cobijas.
Paso solo una hora cuando Bakugo abrió los ojos, se levantó un poco de la cama y vio a lo lejos la comida que izuku no comió, se separó de él mientras lo cobijaba de nuevo, parecía tranquilo, su respiración era casi tan silenciosa como la de un niño, sonrió, pero rápidamente desapareció aquella mueca, como si recordará que no tenía derecho a sonreír porque no había nada para estar feliz, no ahora, no cuando aún les falta mucho que recorrer, no cuando aún no hay alguien pequeño corriendo por la casa.
Estaba por levantarse completamente cuando escucho un quejido, volteó a ver a izuku y se acercó intentándolo abrazar, como queriéndole asegurar que estaba ahí, un segundo quejido se escuchó junto un leve movimiento.
- deku - habló bajo cerca de su oído, mientras pasaba su mano sobre la espalda del de rizos.
- duele.. kacchan... - un hilo de voz que apenas pudo liberar antes de volverse a quejar.
Solo eso bastó para que Bakugo quitara la cobija de izuku con brusquedad viendo como este se removía entre la cama mientras abrazaba su abdomen, y entonces escucho sus sollozos.
Por lo que pudo ver todo estaba bien, no había sangre, soltó un suspiro mientras volvía a dirigir su atención a su esposo, tratando de calmarlo y distraerlo, esperando que solo fuera un repentino dolor y no uno que lo hiciera llevarlo al hospital.
- está bien deku, estás bien, solo vuelve a dormir, dejará de doler en unos minutos, lo prometo -
Izuku lo miro con los ojos llorosos.
- kacchan...
- que quieres nerd?
El de ojos verdes le dio una sonrisa mientras abrazaba la cobija con fuerza entre sus dedos.
- quiero... vomitar
Cuánto tiempo llevaban sin la enfermera? Para Bakugo los días son eternos, pero no cree que hayan pasado tantos, levantó a izuku mientras lo envolvía en la cobija y lo llevaba hasta el baño, izuku parecía aún dormido, es extraño, como si solo el dolor lo hiciera abrir los ojos.
- deku, no has comido nada hoy, que mierda pretendes vomitar?
Y lo ve acercarse al retrete, lo ve y decide darse la vuelta mientras escucha los quejidos de izuku, como solloza de dolor, no sabe cuanto más pueda con esto, a Bakugo le pueden hacer cualquier maldita cosa, lo que sea y nada le lastimaría tanto como escuchar el sufrimiento de izuku, su mirada se tornó borrosa de repente, pero lo suprimió, ¿por qué lloraría cuando no es el que está sufriendo?
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