|| See You Hange||

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Era un día fúnebre en el cuartel, donde en un sucio laboratorio se encontraba Hange Zoe, líder de escuadrón por excelencia y una de las pocas personas que se podrían considerar veteranos, siempre concentrada al momento de investigar y crear, tratando de librar a la humanidad con sus creaciones y descubrimientos, aveces esta meta hacia que se olvidara de cuidar su propio bienestar, pasaba días antes de probar bocado o siquiera dormir, los baños tampoco era algo que sintiera que le hicieran falta, todo el esfuerzo valdra la pena, se decía a ella misma. Aunque siempre había gente que procuraba cuidar de ella lo mejor que se pudiera, como Moblit su mano derecha o el comandante Erwin que la obligada aveces a parar, pero sin duda el que se llevaba el premio a cuidarla aunque lo negara y después la golpeara, era levi. Los 3 hombres más importantes de su vida y sin embargo los 2 primeros ya no se encontraban en ese mundo cruel. Cayendo en ella la responsabilidad dada por Erwin antes de morir, se sentía estúpida por esconderse pero no estaba preparada para asumir un cargo tan importante, ¡Joder!, ella solo queria investigar, no era material para ser comandante, pero no se podía negar, por mucho que detestara la idea y el miedo que sintiera, no le fallaria a Erwin, ni tampoco haría que el sacrificio de Moblit fuera en vano. Pero ahora se permitirá un momento con ella misma, recordando a todos sus compañeros caídos, pensando a cuantos les había dicho adiós, Nanaba, Mike, su escuadrón y ahora a Erwin y Moblit, a cuantos más tendría que decir esa estúpida palabra, que quemaba como veneno cada vez que se despedía. Tal vez debería haber dicho algo que hiciera sentir que se volverían a encontrar.

La vida le había quitado más de lo que le ha brindado, pero no era tiempo de lamentos, aún había muchas cosas por hacer, antes de decir el último adiós, de repente pensó en la última persona que le quedaba, Levi, sintió una opresión en el pecho, ella no quería despedirse así de el, adiós significaba no volverlo a ver y ella no soportaría perderlo, al único hombre que ama y amara, del cual ahora se esconde por vergüenza, el cual sabe que nunca la dejaría, al cual nunca le dirá adiós, ya había dicho mucho esa palabra en su vida, creía que era hora de buscar una nueva forma de despediste, una promesa egoísta de un corazón herido. Todos sus pensamientos fueron esfumados por una figura recargada en la puerta.

No sabía cuando tiempo la había observado, pero no necesitaban palabras, el sabía porque se escondía, pero nunca le cuestionaria nada, ni ella a él, ahora más que nunca necesitaban el calor del otro pasa sobrellevar todo lo que paso y todo lo que pasara.

Sin decir nada, levi se acercó a ella y la envolvió entre sus brazos, Hange correspondio del mismo modo y se quedaron así, en silencio, cada uno pensando que era todo lo que tenían.

¿Puedes prometerme algo?.- hablo hange la cual enterró su cabeza en el cuello del azabache.

Lo que quieras.- respondió pasando sus manos a través de sus cintura para fundirse más en ella, sentirla tan cerca le daba cierta tranquilidad, esos momentos los cuales no existía el mundo, sólo ellos dos profesando en secreto su amor. Ninguno necesitaba palabras para saberlo, sólo una mirada bastó para saber que su amor era mutuo.

Si alguno de los 2 llegara a morir, no quiero que nos digamos adiós.-

Hange que mier...-

Dejame terminar levi, no tenemos la vida asegurada, esta vez sobrevivimos, pero la próxima vez no te puedo prometer hacerlo. Daré lo mejor de mi para no irme de tu lado.- Hange entonces alzó la mirada, conectando con los ojos grises de su compañero, los cuales acultaban gran pesar y cansancio, la miraban con miedo, sabía que no le gustaba nada lo que estaba diciendo, pero era necesario, le dio un corto beso en los labios y prosiguió.- Tu eres mi fortaleza levi. Por eso no quiero decirte adiós. Nos hemos despedido de tantos, sabiendo que tal vez nunca los volveríamos a ver, pero yo quiero volver a verte, que seas mío y yo sea tuya para toda la eternidad.

entregarte mi corazón...

solo a ti y a nadie mas, siento que te eh amado por mil vidas y podría hacerlo otras mil mas, por eso, prometeme que no nos diremos adiós, puede que sea una egoísta, pero permiteme serlo solo por hoy, porque no soportaría no verte otra vez. Así que, si algún día llega el momento de separarnos, diremos palabras que salgan de nuestro corazón, así sellaremos el pacto y nos iremos con la promesa de encontrarnos, para amarnos como si fuese la primera vez.-

Terminó apretando más a levi y sollozo en su hombro, permitiéndose deshogarse entre los cálidos brazos que la rodeaban. Levi solo pudo aferrarse más y más, sintiendo que sí la soltaba desaparecería, todo eso lo tomó desprevenido, aunque no podría haberlo dicho mejor, él también la amaría por mil vidas más si se lo permitieran. La amaba tanto que dolía el solo pensar que ella se fuera, el ah perdido más de lo que alguien normal podría aguantar, pero todo se acabaría si la perdiera, el único motivo que tenía para sonreír, la que lo motiva a cumplir la promesa echa a Erwin, su mejor amigo, matara a ese maldito mono, y cuando todo termine, viviría su amor sin restricciones y sin miedo, a lado de esa loca mujer, a la cual sin duda le entregó su corazón desde el momento que la vio. Se encargaría de mantenerlos vivos a ambos, confiaba en ella, pero su miedo de perderla era más grande. Asi que no le quitaría el ojo de encima, para que nunca llegara el momento de despedirse, acabaría con la maldición de perder a todos a los que alguna vez amo, no dejaría que la vida le arrebatara a hange, y si alguien tenía que morir, sería el.

Por un momento dejó de abrazarla y con sus manos tomo de forma delicada el rostro de Hange, limpiando con su pulgar las lágrimas que no paraban de salir de su ojo izquierdo. Mirandola con infinito amor.

Es una promesa, no más despedidas, solo un te veo luego ¿Qué te parece? .- dijo levi y sin más atrajo a hange a un cálido beso, que ella aceptó gustosa.

Al separarse del beso, Levi la atrajo de nuevo a sus brazos. Reconfortandose el uno con el otro.

¿Te veo luego, eh? , no lo abria dicho mejor.- con esto, la castaña se abalanzó a los labios del más bajo, pero esta vez con mayor intensidad, este sería su último día antes de asumir el cargo y lo aprovecharía al máximo, sin importar lo que venga, para ellos nunca abra un adiós, solo un hasta luego.

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Oi cuatro ojos...


Entrega tu corazón...


Ja ja...


Es la primera vez que te oigo decir eso...







¡¡¡HANGE SAN!!!. - Se escucho los gritos y sollozos de todo el escuadrón. Devastados por la pérdida de su comandante.

Estamos despegando, agarrense bien.- grito onyankopon con lágrimas en los ojos.

Todo el ruido lo atrajo a la realidad, nuevamente la vida le había jugado mal, quitándole lo último que le quedaba en ese maldito mundo, lo más preciado para el y sin embargo no pudo negarle nada, a pesar de prometerse a sí mismo que los mantendría vivos, dejó que siguiera lo que creía era correcto, estúpida cuatro ojos, penso, con ella se iba la última pieza y la más importante de su corazón, quería llorar, gritar, destrozar todo a su alrededor, más no lo hizo. Se mantuvo tranquilo, todavía había cosas que hacer y promesas por cumplir, y la más importante de todas. Sin importar donde estuviera la encontraría y la amaría por mil vidas más.


Te veo luego, Hange.

Sigue cuidándonos...

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⏰ Última actualización: Dec 16, 2021 ⏰

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~ || Levihan || - // One Shots // - ~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora