Capítulo 19: BloodFlower

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La vida no es sobre lo popular que eres, sobre con qué chica o chico estás saliendo, o sobre qué sabes. La vida es sobre siempre ser fiel a quién eres o en lo que crees. Nunca dejes que nadie te convenza de que su forma de ser es mejor que la tuya. Al final, todo lo que tenemos son nuestros corazones y nuestras mentes.


Andy Biersak


 † † †



Al fin, la orden de Retrum nos reunimos de nuevo después de días de inactividad. En realidad, necesitaba un tiempo de descanso. Un tiempo alejada de Jack.


Nos reunimos donde siempre; el cementerio que había cerca de mi casa. Me preguntaba qué solían hacer antes de conocerme y dónde, ya que todos vivíamos en sitios distintos. En la entrada nos encontramos y nos maquillamos con la ayuda de nuestros reflejos en el pequeño espejo de Veronica, que ya le habían dado el alta, (aunque más bien creo que se la dio a la fuerza ella misma) pero tenía algún vendaje por el brazo y una tirita en su rostro. Igualmente se maquilló. Jack me miraba afligido de nuestro último encuentro, aunque un fino velo de tristeza era visible en sus oscuros ojos. Por más oscuros que fueran, yo podía ver en su interior el dolor que le causé, pero no el secreto que escondía con Eric de ese tercer miembro de la orden pálida en Londres. No creía posible hablar con Jack sobre ese tema, pero puede que sí pudiera hablar de ello con Eric. Era más fácil con él, me sentía más aliviada con su compresión y el modo en el que escuchaba a todos por igual.



                                                               † † †



Entramos en el camposanto, andando despacio como si no quisiéramos molestar a los que reposaban allí. Al pasar al lado del gran mausoleo de la primera planta, contemplé los vitrales de su interior, con el azul a modo de protagonista. Me gustaban los colores y del modo en que se reflejaban por las paredes del pequeño recinto; era todo en espectáculo.


Finalmente saltamos hacia nuestra plataforma predilecta, en el cual debajo de él habían cuatro pisos de nichos. Nos sentamos y ví las vistas ideales que teníamos; la mayor parte del pueblo a vista de pájaro, con el sol poniéndose detrás de las grandes montañas que nos rodeaban. Alex nos dio la gran primicia del día.


- Voy a empezar a currar de verdad.


- Venga ya. – se sorprendió Veronica, del mismo modo, e incluso más que los demás. -  ¿Tú trabajar? Pero si te da igual la escuela.


 - Por eso mismo estúpida. - le respondió Alex. – Paso de estudiar. Lo que realmente quiero es trabajar como adulto que soy y ganar pasta. Así podré apechugar mis propios gastos.


- Vaya eso es estupendo. – le felicitó Eric.


- ¿Y de qué trabajarás? – le pregunté.


- Trabajaré en el negocio de mi padre, la restauración de objetos antiguos.

Retrum 3: Labios de Ébano [En corrección]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora