RESILIENCIA (Parte 1 Terminada)

Capítulo 7

Año 2107 - Isla Socotra, Yemen.

La resistencia

LEXA'S POV

El constante movimiento de su cuerpo recorriendo la longitud del recinto en el que nos encontrábamos llegaba a ser irritante. Ocasionalmente dirigía su vista hasta enfocarme y sostenerla por ambiguos segundos donde intentaba escudriñar mi mente y solo así, revelar las respuestas a sus cuestionamientos, pero luego concluía en rendirse y retornaba a la profundidad de sus ensimismamientos donde solo ella lograba recrear una línea elocuente de pensamientos.

La magna noche marcó su presencia arribando a esta sala hace 30 minutos atrás, en los cuales, sólo un pequeño saludo escapó de sus labios para luego caer profundamente en el cóncavo de sus cavilaciones. No necesitaba tener intuiciones desarrolladas para comprender que necesitaba de un tiempo prolongado para reorganizar sus ideas y luego expresarlas. Así que, oscilé dedicar mi tiempo en ultimar detalles de la exploración que vendría en unas horas, y de la cual esperaba encontrar tierras fértiles que incrementarán nuestros recursos para sostenernos tranquilamente unas semanas.

Abandoné mi actividad primitiva cuando escuché cesar los pasos de mi hermana y levanté mi mirada encontrándome con su figura rígida a pocos metros de mí, evidenciando en su rostro una zozobra cargada de dudas.

—¿Podrías decirme que te tiene así? — un suspiró escapó de sus labios — llevas recorriendo esta habitación por 30 minutos y ya me cansé de verte de lado a lado. 

—No lo entiendo, Lex.

—Dime que no entiendes y lo resolveremos juntas, Poché.

Apoyó sus manos sobre la madera del escritorio y una sutil sonrisa se marcó en su rostro.

—Extrañaba que me llamaras así...

—Nuestros padres te llamaban así. ¿Lo recuerdas?

—Sí— contestó sonriendo— recuerdo eso y muchas cosas más.

Viró levemente su rostro negándome la posibilidad de observar el color cálido de sus ojos. Eran los mismos que nuestra madre tenía y observar a María José, me permitía de alguna manera recordar a nuestra madre reflejada en ella.

—¿Qué te tiene así? — cuestioné.

—Daniela— susurró contestándome, provocando que una molestia se internara en mí.

—¿Qué te hizo?

—No— regresó su mirada a mí— No me ha hecho nada, no se trata de eso.

—¿Entonces? Realmente no estás siendo clara, María José.

—Sabes... — mencionó mientras traía a colación sus pensamientos — recuerdo todo lo que viví antes de que me raptaran, recuerdo a mis padres, a ti, y nuestra comunidad... pero no recuerdo a Daniela. ¿Por qué no la recuerdo, Lex?

Una risa escapó de mis labios ante su comentario y su frente se contrajo en confusión.

—¿Cómo no vas a recordar a esa bolita de carne que no dejaba de parlotear por todos lados? — bromeé buscando que se relajara.

—No te rías Lexa, estoy hablando en serio. No la recuerdo.

Y así como llegó la risa se esfumó, dando paso a la intranquilidad. Su duda caló hasta lo más profundo de mi mente y rápidamente respondí.

—¿De qué hablas? — cuestioné— ¿cómo que no la recuerdas?

—¡No, no la recuerdo! — su voz se elevó y observé la irritación empezar a burbujear en sus ojos — Lexa, no recuerdo a nuestra hermana. ¿Por qué?