Desconocidos

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Kirishima se apresuró a salir de su habitación, se quedo hasta tarde jugando con los chicos, eso lo había distraído un poco, pero aún así pensaba en bakugo, estaba triste pero no se podía dar el lujo de faltar a clases.

Kirishima reaccionó al ver que estaba enfrente del salón, antes de entrar pensó – ( No voy a dejar que bakugo me vuelva a lastimar, voy a demostrarle que no soy débil, tal vez es mejor que nos tratemos como desconocidos, tal vez es momento de que deje ir este sentimiento, es lo mejor, ¿no?)–.

Kirishima abrió la puerta y daba gracias de que aizawa no estuviera todavía, pero eso se terminó, enfrente suyo estaba aquel rubio que el tanto amaba, aquel rubio que le había hecho daño, ahí sentado y viéndolo directamente, kirishima tomó aire y soltó un suspiro, kirishima miró hacia donde estaban los chicos y pasó de largo.

NARRA BAKUGO

Estaba en el salón, esperando a que kirishima llegara para hablar con el, pero ¿que le diría?, ademas estaba un poco molesto ya que antes de entrar encontré a el maldito de deku, y el me dijo que yo olía a kirishima, se dio cuenta de que me habían marcado, no me molestaba el hecho de que yo olía a kirishima, si no el porque el reconocía el olor del pelos de mierda y no solo eso, la maldita ojos de mapache salió de su habitación temprano, quiero una maldita explicación.

Salí de mis pensamientos cuando alguien abrió la puerta del aula y ahí estaba kirishima, un poco despeinado, y con algunas curitas en el rostro, me le quede viendo y el se dio cuenta, pero solo soltó un suspiro profundo, vi como desvió su mirada hacia sus amigos y empezó a caminar, cuando iba a pararme para hablar con el, el solo paso de largo, sin voltearme a ver, sin decir nada, como si yo no existiera, como sino me conociera, eso hizo que mi pecho doliera, solo me senté y a esperar que aizawa viniera.

SIGO YO :^

Kirishima:Hola chicos – dijo intentando sonreír – ¿Como están?.

Mina: Eso es lo que deberíamos preguntarte nosotros – (bakugo no deja de voltear para acá, por supuesto que es por kirishima, pero entonces porque le dijo todo eso, esto es tan confuso, yo tengo que ayudarlos, eso es les daré un empujón cito, ojalá no muera en el intento)–.

Denki: ¡¡Mina!!

Mina: ¿Que sucede? – dijo saliendo de sus pensamientos–.

Sero: Eso queremos saber, estas muy distraída.

Kirishima: ¿Te encuentras bien?

Mina: ¿Yo?, si claro estoy bien solo pensando cosas sin importancia, y tu kiri ¿te encuentras bien? – dijo tocando su mejilla–.

Bakugo la fulminaba con la mirada y apretaba los puños, mina estaba muerta y ella lo sabía, solo trago en seco al ver al rubio pararse, mina rezaba por un milagro y lo tuvo, al ver que aizawa entró a lo que bakugo se sentó.

La clase siguió, bakugo se alegró al ver que aizawa dejaba ejercicios de matemáticas, ya que el pelirrojo nunca entendía y siempre le pedía ayuda, esta era su oportunidad, para hablar con el.

La clase termino y bakugo estaba esperando ver a kirishima con el pretexto de ayudarlo, pero frunció el ceño al ver a mina abrazando a kirishima del brazo, y a este dándole palmaditas en la cabeza.

Mina: No te preocupes, hoy en mi habitación vamos a estar todos, denki, sero, deku y además va a ir todoroki, así vamos a poder hacer los ejercicios – dijo con una sonrisa sosteniendo el brazo de kirishima –.

Kirishima: Eso es increíble, así terminaremos los ejercicios de matemáticas – dándole una sonrisa–.

Mina: Denki dijo que así te distraerás un poco, es como matar tres pájaros de en tiro.

Kirishima: Gracias chicos, no saben como se los agradezco – dándole pequeñas palmadas en la cabeza –.

Mina ya se había dado cuenta que aquel rubio los miraba con una mirada de enojo y apretando los puños, pero era la única manera de saber si el rubio de verdad sentía algo por el pelirrojo, a eso se refería con matar tres pájaros de un tiro.

Bakugo se fue hecho humo a su habitación, entró en esta y cerró bruscamente.

Bakugo: ¿Por que?, por qué deja que la maldita esa lo abrace así, porque le da una maldita sonrisa, y decía que me quería, si claro eso dicen todos, pero... no quiero que te dejes abrazar por ella, no quiero que le sonrías a ella, te quiero conmigo kirishima, abrázame, bésame, y has me tuyo, soy tuyo y tu eres mío.

Bakugo abrazo fuerte su almohada, ya que esta olía a kirishima y su cuerpo también tenía de las feromanos del mencionado, eso lo hizo tranquilizarse y poder dormir.

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Tarde más de lo esperado pero es que sigo en semanas de examen y evaluación

Mi Querido OmegaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora