Escrito en Abril del 2021
Un crimen será la puerta para que un ser oscuro tome posesión de aquel cuerpo moribundo, agonizante y con sed de venganza, en su último aliento su dueño pedirá venganza como último deseo y el sobrenatural ser se lo conceder...
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Kai caminaba de la mano con su novia, él le había mencionado a ella que su vida podría correr peligro pero no le dijo que los asediaba un ser sobrenatural.
Pasó el funeral de Xiumin y el reino siguió en silencio, el rey empezó a preguntarse en que se habían metido aquellos hombres, todos pensaron que Chen había enloquecido pero Xiumin y la manera en que apareció le hizo pensar que había algo más.
Vante por su parte había espiado a la mujer que ahora paseaba con Kai, planeaba su siguiente asalto meticulosamente, los miraba desde su habitación hasta que fue interrumpido por aquella grata voz que tanto le gustaba escuchar.
—Amor... ¿Qué haces ahí? — preguntó la joven entrando a la recamara.
—Veo que la primavera está en pleno apogeo... — respondió él.
—Mm. Son una bella pareja — expresó ella viendo también por la ventana.
Él asintió, con la cercanía de ella, la necesidad de besarla —no tan bella como la nuestra... — expresó fundiéndose en un beso.
El cuerpo de Vante reaccionaba rápidamente con la cercanía de ella, lo atraía como si fuera a su propia perdición, el beso se fue intensificando hasta que llegó a un punto donde él lo cortó y la abrazó para que no viera en él, el cambio brusco en sus ojos.
Cuando sintió que había logrado controlarse la atrajo al diván y ella se dejó llevar, para luego hablarle.
—Sabes que te extraño, hace mucho que no estamos juntos... sabes a lo que me refiero — reclamó ella.
—Lo entiendo, pero estos días no me he sentido bien, no sé si me comprendas... — Expresó él.
—Lo entiendo, por eso no te he presionado pero me gusta que sepas que te extraño — ella le sonrió volviendo a besarlo.
De nuevo sintió como su cuerpo respondió ante las provocaciones de ella, de nuevo estaba siendo tentando a poseerla, esta vez la dejó continuar, no haría nada para detenerla, no podía resistirse más, ella comenzó a quitar su camisa y a besar cada parte de su piel, su cuello parecía que le atraía en demasía y eso a Vante lo estaba enloqueciendo.
Ella noto como el cuerpo de él iba respondiendo a sus acciones, empezó abrir el cierre de su pantalón, hacia días que no lo veía tan excitado, su ronca voz gruñendo de placer era algo que a ella le ponía rápidamente, abrió su pantalón y abrió su bóxer sacando su prominente erección y de inmediato bajó hasta este para empezar a lamerlo, comenzó succionando cuidadosamente el glande mientras veía la expresión de placer en él, tenía la cabeza echada atrás los ojos cerrados y los labios entreabiertos, los sonidos que emitía de placer eran fantásticos para sus oídos, esa voz ronca excitada era todo lo que necesitaba para continuar con aquella felación buscando llevarlo al orgasmo.
Empezó a meter el miembro en su boca, lo acariciaba con la lengua mientras el enloquecido Vante gruñía cada vez más fuerte de placer, enredo los dedos en el cabello rizado de la joven buscando más placer, mientras que ella continuaba, empezó a mover la cabeza rítmicamente mientras chupaba aquella erección que tanto anhelaba sentir dentro.
