𝐏𝐈𝐋𝐎𝐓 𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑

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--------------------۞--------------------𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝐏𝐈𝐋𝐎𝐓𝐎:𝐑𝐞𝐧𝐚𝐜𝐞𝐫--------------------۞--------------------

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𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝐏𝐈𝐋𝐎𝐓𝐎:
𝐑𝐞𝐧𝐚𝐜𝐞𝐫
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HACE UNOS AÑOS

                   DESDE QUE LA HABÍAN LLEVADO A AQUEL LUGAR, Nereida no había dejado de llorar en ningún instante. Sus ojos ya ardían y sus mejillas cada vez se mojaban más, aún cuando parecía que no le quedaban lágrimas que soltar.

Sus padres la habían vendido a un burdel para conseguir más licor. Era algo despiadado y estupido, ¿vender a su hija por más alcohol que pronto acabará con sus propias vidas? Eran de los actos más asquerosos que un padre podría cometer.

La habían llevado allí cuando Nereida apenas tenía once años y llevaba allí cuatro. Años que habían estado llenos de dolores, abusos, violaciones, disparos... realmente la parte de los disparos habían sido lo más doloroso para Nereida.

Cuando apenas había pasado un año de haber llegado a aquel burdel, Nereida había sido vendida jorobada y con parálisis facial parcial, razón por la que no le dieron tanto dinero a sus padres por ella.

Los dueños siempre decían que ella no podía servir al burdel con aquella deformidad, así que tomaron el camino más fácil y doloroso para ella.

Buscaron a una confeccionadora y se encargaron de que arreglara el cuerpo de Nereida de la manera más dolorosa posible. Quemaron su piel y dejaron cicatrices en ella, para que la niña pudiera recordar porque llegó allí en primer lugar. Porque sus padres no sólo la habían vendido por licor, sino que también porque según ellos ella era la vergüenza de la familia por su deformidad.

Luego de aquella noche llena de gritos y dolores, el cuerpo de Nereida había cambiado a gran escala. Pero aquello no fue lo peor.

A la mañana siguiente, vendaron los ojos de Nereida y colocaron un arma en su mano. La obligaron a disparar, aún sin que Nereida supiera a que lo hacía. Luego le quitaron la venda de los ojos y Nereida pudo ver que en el suelo, su amigo de nueve años, yacía muerto. Los demás reían, mientras ella no podía hacer nada más que llorar por haber causado la muerte de aquel Niño.

𝐒𝐎𝐔𝐋: 𝐊𝐚𝐳 𝐁𝐫𝐞𝐤𝐤𝐞𝐫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora