EL ARTE DETRAS DEL AMOR

LO ROTO SIEMPRE ES BELLO

Ahora les contare un poco sobre la vida de Nathan jamás hace las cosas para dañar a los demás, es un chico especial, en su casa siempre hay problemas y ese fue el comienzo de nuestra amistad lo veía gritando hacia la ventana de su casa desde la mitad de la calle.

- ¡Esta bien, me iré de aquí y los dejare a todos en paz, mi mundo a medias es increíble, aunque ustedes crean que soy un fracaso! – Verlo gritar todo eso a su familia era absurdo, pero se notaba cansado de que le reprocharan por todo- ¿por qué no me dejan vivir mi vida? -dijo en un último grito hacia la ventana de aquella casa.

- Tal vez porque necesitan controlarte para sentirse buenos padres- lo pensé en voz alta y él me alcanzó a oír

-Lamentablemente tienes razón- lo dijo en el tono más triste que puedan imaginarse. – Sé que ellos invierten dinero en mí y en mis estudios y que no soy el chico estrella respecto a calificaciones, pero soy el chico estrella con los dibujos, pero para ellos eso solo es una pérdida de tiempo.

-Te entiendo, aunque mis papás no tienen idea de que escribo, y lo único que hago es esforzarme para sacar buenas notas y mantener en secreto las cosas que escribo.

- ¿Acaso nuestros padres no ven nuestro esfuerzo? - dijo Nathan en voz más alta- Acaso no ven lo hermosa que es la vida.

- ¿Y si tienen otro concepto de hermosa vida?, posiblemente vean la vida como esas cosas perfectas que muestran en televisión, no como nosotros la vemos.

- ¡Es que una tarde con un sol resplandeciente o una tarde nublada llena de melancolía son preciosas, aunque estén sobrevaloradas de distintas formas!

-Algo me dice que tú y yo tenemos varias cosas en común- le dije dándole una sonrisa amistosa.

No sé en qué momento terminamos en la cafetería en la que trabaja Dave, mientras hablábamos de como llevo el secreto de escribir, mientras él me contaba que estaba en la universidad y al final le mostré mis escritos, al terminar de leerlos y decirme que tenía una gran imaginación y de la buena, yo le decía que lo que él hacía era increíble y su manera de crear arte era excepcional.

-Odio relacionarme con la multitud, amo los espacios tranquilos, aquellos lugares donde tu mente vuela y nadie la detiene, donde crees que el mundo deja de girar y solo existe tu alma y tu ser- La manera en que Nathan se expresaba era increíble, decía las palabras adecuadas en el momento conveniente.

- ¿Osea eres un tipo de esos cerrados que no tiene amigos? - Lo sé, fue algo imprudente, pero tenía que preguntarle.

- ¡Claro que no!, tengo amigos y son muy buenos, pero no suelo estar pegado a ellos todo el tiempo y ellos lo entienden. – Dijo luego de reírse de mi gran imprudencia.

Continuamos hablando mientras yo bebía un café helado y él un batido de frutas tropicales.

- Puedo durar horas dibujando y amo hacerlo, es una sensación magnifica, encontrar belleza en las cosas rotas, porque nadie las ama, nadie ve más allá de los trozos y eso, eso es lo mejor, ver las cosas que nadie creyó que estarían ahí, es maravilloso, pero la sociedad decide destruir la esencia de estas cosas.

- Sobreestiman el valor de las cosas. –Dije hallándole la razón a lo que acababa de decir.

Luego de horas de pláticas y varias bebidas decidimos despedirnos y salir de la cafetería.

-Bueno, Este soy yo, un chico que ve el atractivo de las cosas más simples y a las que no le ven sentido las demás personas, un chico que pone su alma en los dibujos, que se deja llevar sin dejar al aire cosas simples pero bellas, un chico que deambula de alguna manera, muy diferente a la que todos conocen. - Dijo gritando desde la otra esquina mientras sacudía su mano en forma de despedida.

Desde ese día comenzó mi amistad con Nathan, quien es actualmente mi mejor amigo, el chico peculiar que ama las cosas rotas, porque posiblemente él también está roto y nadie logra ver la belleza que hay dentro de su ser.

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ADELANTO: LOS SIGUIENTES CAPITULOS SERAN NARRADOS POR CADA UNO DE NOSOTROS PUES CADA UNO CONTARÁ SU HISTORIA.