Atracción a través de una ventana

¿Quieres ser parte de mi vida?

Eren

Mama y yo solíamos estar siempre juntos en casa, situada en un gran campo, teníamos todo lo que necesitábamos ahí, no éramos pobres, vivíamos muy bien gracias a mi padre que era el mejor doctor de la zona, todo era como un cuento, hasta que mis padres empiezan a hablar de divorcio, había mucho que yo desconocía de ellos y su relacion de pareja, y eso terminaría en una dura separación donde yo era quien mas perdía, pues mis padres eran todo lo que tenia y que podría llamar mío... nuestro... tan solo tenia 7 años cuando todo se desmorono sobre mis pies y yo no pude hacer nada para evitarlo, sin embargo mi madre siempre me proporcionaba una cálida sonrisa que ella nombro como: La sonrisa que te arrulla.

Mi madre y yo nos fuimos del campo, decidimos empezar de nuevo en otro lugar, en alguna casa cerca de la ciudad quizás, yo estaba emocionado, triste, melancólico y muy nervioso, pues todo lo que conocía desde que llegue al mundo se estaba quedando atrás y yo le estaba dando la espalda.

***

Encontramos un lindo departamento en las orillas de la ciudad, era un edificio de unos 7 pisos, era algo que jamás había visto así que me sorprendí bastante. Escogí el cuarto con la ventana mas grande y pude notar que en el edificio de enfrente se podía ver claramente del otro lado de la ventana, parecía el cuarto de una niña...eso me puso rojo... imaginar a una niña... las chicas me dan asco, son presumidas y torpes y lloran por todo, pero... También son muy lindas.

Le conté a mi madre lo que había visto y ella solo se burlo de mi cara roja

--Sera esta tu primera novia?- pregunto ella, permaneció pensando unos segundos y después hizo un sonido de celebración, ella estaba muy feliz.

--Claro que no, las niñas son torpes y lloran por todo, no quiero una niña de novia-- le dije con un leve puchero en mis labios y ella me miro con una sonrisa.

--Eso dices ahora Eren, pero cuando veas lo linda que es cambiaras de opinión, y quizás en unos años te enamores perdidamente de ellaaa --la expresión de burla no desaparecía de la cara de mi madre y eso me hizo ponerme como un tomate, ella me miro y acaricio mi mejilla, sabia que ella estaba imaginando todo lo que acababa de decirme y no podía enojarme con ella, porque quiera o no, mi madre siempre termina teniendo razón.

Horas mas tarde, cuando la luna empezaba a salir escuche el timbre de la casa, eso me puso nervioso... el imaginar que podrían ser personas desconocidas me daba ansiedad, finalmente escuche que mi madre abrió la puerta pero no podía entender de lo que hablaban, después de un rato supuse que ya se habían marchado cuando decidí salir de mi escondite llamado cuarto, estaba emocionado por eso y salí corriendo a por mi madre para que me ayudara con mi cama cuando la vi a ella... era una chica Hermosa en todos los aspectos, su piel blanca y ojos grises oscuros, su cabello negro largo hasta la cintura, se veía años mayor que yo y eso hizo que me quedara paralizado hacia su enganchable mirada..

¿Qué hago ahora?.. la pregunta recorría mi mente dando vueltas hasta que mi madre me ayudo para hacer el primer movimiento antes de dar la impresión de un niño pequeño, si lo era pero también era un chico muy fuerte y lo puedo decir con orgullo, me acerco y mi madre me ayuda a presentar mientras las observo detenidamente a las dos invitadas y al... pastel.

Después de un rato mi madre casi me a corrido para llevar a Mikasa a mi cuarto y jugar con ella, eso solo lo hizo para ponerme mas nervioso, termine mostrándole videojuegos y hablando de como era mi vida en el campo antes de venir aquí, de como era mi padre, hable bastante y ella solo observaba sin interrumpir, eso fue raro viniendo de una chica, ella no es torpe, al contrario, parece alguien bastante inteligente que se guarda cada pensamiento para ella, no es nada fea, y se ve que ella no ha llorado en mucho tiempo, no tiene pinta de ser presumida, que bonita excepción.

El rubor sube a mis mejillas después de estar con Mikasa en mi cuarto, "como es que tuve a una chica tan linda en un cuarto tan desarreglado" pensé. Cuando ella se fue con su madre solo pude pensar en todo lo bueno que pasaría ahora que una nueva persona se incluía en mi vida. Las palabras de mi madre antes de que llegara Mikasa suenan en mi mente y eso solo me hace intranquilizar, aun soy muy pequeño y ella es mas grande que yo, ojala pudiera hacer que ella este en mi vida por mucho mucho tiempo... debería preguntarle? ella estará de acuerdo?... no pude conciliar el sueño y solo veía por la ventana para que, si tenia suerte, pudiera verla, las ventanas no estaban tan lejos la una de la otra así que podría hablar sin gritar y ella me escucharía, tome una libreta y arranque una hoja donde escribí algo y salí rápidamente al pequeño balcón que tenia la ventana. Al no ver algún movimiento en respuesta tome la iniciativa de lanzar pequeñas rocas que coleccionaba y caían contra el cristal de la ventana de Mikasa, tardo solo 2 minutos en asomarse a la ventana y abrirla, rayos, estaba dormida.

Se tallo sus ojos con ambas manos, se veía muy linda, le lance la nota que prepare y ella la tomo, la abrió cuidadosamente, analizo lo que decía y la leyó en voz alta

--¿Quieres ser parte de mi vida?....-- sonrió cálidamente y asintió con la cabeza segundos después . La luz de la luna hacia que la piel blanca de Mikasa tuviera un brillo hermoso y la sonrisa que me regalo era muy similar a las sonrisas que mi madre me daba, de esas sonrisas que me arrullan. Sentí mis mejillas calientes y solté una pequeña sonrisita traviesa después de escuchar su respuesta, ese será uno de los mejores recuerdos que conservare durante años, la primera chica que me dio una hermosa sonrisa y ahora seria parte de mi vida.