Capítulo 6

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Hola ¿que tal? Les traigo hoy un nuevo capítulo de esta historia, espero sea de su agrado.

💞💞💞

Petra como todos los días se dirigía a su trabajo, su mente estaba ocupada la mayoría del tiempo en lo difícil que sería la recuperación de su prometido, también estaba algo decepcionada por que la boda ya no se realizaría en el día estipulado.

—Buenos días —dijo ella entrando al local.

—Buenos días Petra. ¿Como estás?—contestó Erwin.

—Pues bien, dentro de lo que cabe.

—No te estreses, todo tiene solución en la vida, menos la muerte. Mira yo, me acabo de separar de mi esposa pero no todo es llanto y depresión.

—Tiene razón. Con permiso voy a comenzar a ordenar la ropa.

Erwin sabía que Petra estaba confundida y muy afectada por lo que le había pasado y decidió ir acercándose a ella para ver que lograba. 

[...]

—Kuchel no perdamos las esperanzas. Pronto van a operar a Levi y estará de vuelta con nosotros.

—Hange, no se cuanto tiempo podré aguantar. Hay unos días que siento que no despierto.

—Lo sé, pero si tu mueres ahora Levi se va a desmoronar.

—Hange, no resistiré mucho. Quiero que te quedes cuidando a Levi.

—Lo haré. Te lo prometo.

Kuchel se fue a su habitación apenas empujándose en su silla de ruedas. Hange fue a preparar dos tazas de te negro, costumbre que habia adquirido desde que estaba en la casa de los Ackerman.

—Gracias Hange, sabes, a pesar de todo he sido muy feliz. Me da gusto que Levi sea un luchador como su padre. Me hubiera gustado estar en su boda pero creo que no podré sobrevivir hasta ese día. Mi hora se acerca.

—Kuchel me duele esta situación, en verdad te he tomado aprecio a ti y a Levi. Me siento impotente, quisiera hacer algo aunque sé que no puedo hacer nada.

—Lo que haces es suficiente, amiga. Te agradezco por el té, es mi favorito.

—Lo hago con gusto—dijo llevándose las tazas vacías.

El silencio se apoderó de la casa y las lágrimas de Hange no tardaron en salir. 

[...]

Al día siguiente Kuchel ya estaba despierta, había usado su bastón para ayudarse y arreglarse para ir a ver a Levi.

—Kuchel, ¿pero qué haces? Te puedes lastimar.

—No quiero ser una carga para ti, aun puedo hacer esto.

Hange le llevó la silla de ruedas y Kuchel se sentó algo agitada.

—Vamos.

[...]

Levi ya había desayunado, en un momento vería a su madre en la hora de la visita. Mientras tanto se sentó a leer el libro que Kuchel le había llevado.

—¿Qué lees?—de pronto alguien le preguntó.

—El quijote—contestó a la chica de la limpieza.

La castaña encargada de la limpieza había empezado su primer dia de trabajo en el hospital ese día y quería hacer platica para que su trabajo no fuera tedioso.

—Me llamo Sasha ¿y tu?

—Levi. 

—¿Sueles ser así de serio siempre?

—No.

—Oye Sasha, ¿ya terminaste de limpiar aquí?—dijo un chico vestido igual que ella.

—Casi termino ¿me quieres ayudar?—dijo ella.

—Siempre me toca ayudarte…¡qué remedio!

El chico, llamado Connie, había llegado con Sasha de parte de una compañía de limpieza en donde se habían conocido y se habían vuelto muy amigos, hasta podría decirse que todos pensaban que eran mellizos.

—Levi, perdona a Connie, él es así. ¿Por cierto cuando te operan?

—No lo sé.

Levi no quitaba la mirada de su libro.

—Cállate Sasha, que no ves que el joven quiere leer. Tu siempre tan desconsiderada.

—Bueno Levi, vendremos a visitarte más tarde.

Sasha y Connie salieron de la habitación pero Levi seguía con su mirada en el libro.

Al cabo de un rato entraron unos doctores, tomaron el expediente de Levi y se pusieron a ver las placas. Todos negaban con la cabeza. ¿Era tan mala la situación?

—Oi oi, doctor. ¿Cuándo me van a operar?

—Levi, estamos evaluando tu situación y buscando el mejor cirujano ortopeda del país.

—¿Tan malo es?

—Un poco. Mira te mostraré las placas pero no quiero que te desesperes ¿si?

—Está bien.

Levi miró las placas y se dio cuenta de algo malo. Su fémur estaba roto en tres partes, pero lo peor no era eso, su tibia se había roto en pequeños pedazos. 

—Hay un riesgo en esta operación. Si no se encuentra a un especialista, podrías perder la pierna. Por eso no te hemos operado. Haremos todo lo posible por salvar tu pierna.

—Entiendo. Gracias Doctor.

El doctor salió de la habitación y Levi quedó pensativo. ¿Cómo podía tener una vida normal sin una pierna? ¿Qué futuro le podía dar a Petra?

[...]

Kuchel y Hange llegaron a la hora de la visita. Levi estaba viendo hacia la ventana donde solo se veían las nubes.

—Levi, hijo ¿cómo estás?

—Bien, madre ¿y tu?—dijo Levi aunque en su interior aún estaba destrozado ante las palabras del doctor pero no podía permitir que su madre supiera nada.

—Aquí hijo, ya sabes, a veces bien y a veces mal.

—Madre, deberías quedarte en casa.

—No, hijo, yo no quiero dejarte solo en esto.

—De alguien saqué mi actitud necia, supongo—dijo Levi —Está bien, pero ten cuidado.

Pasaron la hora platicando hasta que llegó la hora de la despedida.

—Antes de irnos quiero darte esto—Kuchel le dio un celular a Levi para que se comunicaran.

—Gracias madre. Cuidate mucho.

Ambas mujeres salieron de la habitación.
Levi tomó en sus manos el celular y marcó.

—¿Petra vendrás a verme hoy?

—¿Petra vendrás a verme hoy?

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💞💞💞
Continuará...

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°•Más allá del amor•° [+18] RivaMika (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora