Capitulo 1

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📍Thaish, Blue Kingdom.

Thaish deribado de Thais, Nombre femenino que denomina todo lo bello. Pero no todo lo que brilla y deslumbra puede ser oro, y Thaish era el claro ejemplo, Toda esperanza sembrada en ese bello paisaje se marchitaba bajo la radiación energética negativa de los habitantes.
El Rey Abraham Hamilton se vestía de honestidad y dictaba unas escasas palabras de entusiasmo pintado.
Y ellas eran parte de lo Prohibido, silenciadas y ocultas, parecian no ser visibles entre la multitud, jugaban a perderse entre lo banal.

—Mirame bien Wendelin necesito encontrarlas, este pueblucho es el tamaño de mi meñique y se que ellas están aquí, culpa de ese infeliz las perdí, solo necesito que las traigas hasta mi—Su semblante cargaba una mezcla de Furia y tristeza—

—Hare lo posible Gothel, no te fallare, al amanecer, cuando el sol acaricie la fina línea del Este ellas estarán aquí.—

El silencio se hizo presente, por parte de Wendy solo se hoyo como articulo un basto si para luego marcharse, mientras Gothel nadaba bajo los efectos del embriagante whisky.

Wendy caminaba en el pavimento sigilosamente mientras se dirigía a la dirección que se hallaba en su papel, a veces se cuestionaba para que seguía haciéndo favores para Gothel, ella no era tan buena persona como se mostró hace años atrás, pero era como si tuviera una deuda con ella, como si le debiera su vida, estaba atada, en sus muñecas tenia unas cadenas tan gruesas y pesadas, eran invisibles para el resto, pero para ella eran su peor castigo, cuando Gothel nadaba en las aguas peligrosas del alcohol o la droga lo único que podía objetar eran obediencias mientras escuchaba barbaridades.
Llego a su destino, una casa de categoría media con una puerta de madera abedul, el aroma a sahumerios de vainilla y velas de coco se podía oler hasta la puerta principal, sus nudillos acariciaron con tanto miedo la madera pálida, el ruido emitidio fue tan pequeño pero aun así la puerta fue abierta.

—Hola buenas noches, Soy Wen...—No sentía la confianza necesaria para largar su nombre completo—Estoy buscando a Agnes y Bellatrix O'Brien.—

—Un gusto soy Agnes O'Brien, ¿Que ocurre
puntualmente ?—

—La gran G O'Brain las necesita—Sabia que no entendería lo dicho pero así lo pidió Gothel, le otorgo dos cartas dando a entender que una era para
Bellatrix y otra para ella, Agnes asintió demasiado confusa—

—No entiendo muy bien a que te refieres, la única O'Brien en Thaish era mi madre, y ella falleció hace unos años—

—Lo siento—Se encogió de hombros, esto ya lo sabia, solo se limito a girar sobre sus talones para comenzar a caminar en dirección a donde estaba Gothel, ya había hecho lo pedido, ahora solo quería descansar un poco.—

Agnes se sentía invadida, cerró la puerta y suspiro aliviada, unos pasos la hicieron salir de su pequeño transe.

—¿Que ocurre Ag?—La voz de Bellatrix estaba invabadida por la preocupación-

—Acaba de venir una chica, se presentó como Wen y me dijo que "La gran G O'Brien" nos necesita—Hizo comillas al nombrarla ya que no podía asimilar que fuese verdad lo que escuchaba-Hay una carta para cada una—Le entrego la que tenia escrito "Bellatrix O'Brien" en su reverso—

—¿Que clase de broma es esta? Somos las únicas O'Brien en Thaish, salvo que... Ella halla vuelto— Dijo tomando la carta—

—Bell, ella no lo haría de esta forma— Objeto con cierto miedo—

—No hay certeza de eso...—Se callo al abrir la carta y comenzar a leerla—

Agnes imito su acción abriendo el sobre con su nombre y comenzando a leer.

"Querida Agnes O'Brien

Siendo primordial que conozcas quien te habla me presento, Soy Gothel O'Brien.

Soy la tercer Decendente O'Brien.

Si te preguntas el porqué de mi aparición en sus vidas, necesito conocerlas de manera casi urgente, debo informarles de algunas cosas, por lo cual si se presentan al amanecer en la siguiente dirección podrán saberlas.

Downing street 666

No me fallen, son la esperanza en este lugar
Lleno de infelices."

Agnes dirigio la mirada hacia Bellatrix quien la alzo en ese momento, ambas lucían confundidas, intercambiaron cartas, ambas decían lo mismo, suspiraron.

—¿Que vamos a hacer?—Bellatrix sentía algo de miedo—Tu decides, tu eres la mayor, confío plenamente en ti.—

—Lo pensare bien Bell, solo no temas, nadie nos hará daño—Objeto tan convencida que logro tranquilizar a Bellatrix, pero no tenía certeza de que esa carta tuviera buenas intenciones.—

The Hypocrisy Of Violet Donde viven las historias. Descúbrelo ahora