La pueta del sótano se abrio. La luz ajena al cuarto ilumino la habitación oscura en la que estas. Estabas sentada en la cama, la que el decía que era tuya.
Escuchaste pasos pesados acercarse. Pero no te importaba, ese habías sentido tan cansado, tan temeroso, habías tenido tanto miedo y odio que emocionalmente estabas cansado. Sus pasos, que antes te provocaban miedo, ahora solo pretendías ignorarlos.
Te sentías tan, cansado. Dolor, dolor también sentías pero no sabias si era por todo lo que estaba pasando o porque alguien te había roto la pierna. Pero sin importar que, estabas pensando, y odiando el día que lo conociste.
Los pasos se detuvieron al lado de tu cama, un peso de sintio a tu lado. No hablo, solo te analizo, como siempre lo hacia. Puso una mano en tu pierna, ahora vendada y entablillada, de forma delicada. Siempre había sido tan sobreprotector, ¿para que, si al final termino rompiendo una de tus piernas?
"солнце??" Pregunto. El tono de su voz, siempre frio y amenazante, ahora era suave. No respondiste. "мое солнце?" Su tono casi suplico por tu atención y respuesta. "¿sigues enojada conmigo?"
Nuevamente, no respondiste. Simplemente ignorabas su presencia observando a la nada. Tal vez todavía seguías siendo un lío emocional, o estabas enojada con el por romperte la jodida pierna.
"Por favor, sabes que no quise hacer eso. Nunca querría lastimarte, pero intentaste huir. Me desobedeciste. Sabes que nunca te haría daño a menos que no me dejarás otra opción" se acerco, besando tu mejilla suavemente y despues acariciándola. Alejaste su mano.
Gruñiste "no me beses ni me toques"
Suspiro y dijo: "Todavía sigues enojada conmigo. Pero recuerda que fue tu culpa"
Estaba intentando manipularte, intentando usar la culpa a su favor para poder deshacer el enojo que tenias. Eso definitivamente era demasiado, te enojaste "¿¡Qué !? ¿¡Así que ahora es mi maldita culpa!? ¿¡Cuando pedí ser secuestrada por un maldito psicópata!? No soy tu muñeca o tu juguete sexual o lo que sea"
"(T/N), no me gusta esa actitud tuya. ¡Hice todo para protegerte! Ellos querían separarnos, hice todo porque te amo" de excuso. Querias que esta locura a la que llamaba amor de detuviera.
"¡Estas jodidamente loco, Ruv! ¿crees que no puedes ir a la cárcel por esto, después de tanto tiempo evitandola? ¡que crees que pasará cuando Sarv de entere! Apuesto que esta preocupada" tus últimas palabras se tensaron. "Necesitas ayuda"
Oh si, Sarvente había estado preocupada desde el día de tu desaparición. Cada vez se preocupa más, buscando consuelo en Ruv. Siempre finge estar triste, mientras Sarv llora, el está feliz, en el sótano rompiéndote la jodida pierna o algo así.
Ruv, ya no era el mismo. Ya no era el mismo del que te habías enamorado, preocupado y ayudado. Todavía lo recuerdas, cuando aún no había obsesión, cuando aun era un amor puro y sin manchar por sus traumas del pasado.
Estabas dormido en el sofá, con la lluvia y relámpagos en el fondo sonando. Podias sentir el frío colarse por la fina sabana. En la oscuridad, podias oír los pasos pesados de Ruv. Pero aun así, suponias que iba a la cocina.
El se acerco al sofá, abriste los ojos y viste su figura alta y negra no te asusto. Por lo menos, en aquellos tiempos no. Te sorprendiste un poco de verlo a tu lado, pero cada vez te acostumbrabas mas a sus gestos extraños. Nada perturbador ni raro, el simplemente no sabía cómo demostrar su cariño hacia ti o Sarvente, especialmente a ti. Siempre hacia gestos raros y te miraba mucho, aunque no le gustaba admitirlo.
"(T/N)" Llamo, serio y con su mirada fría como una daga de hielo "¿puedo dormir contigo?" Pregunto, rápidamente, casi no lo entendiste.
Abriste los ojos, sorprendida por su petición. El te miro, con su rostro serio pero sudando y posiblemente muriendo por dentro. En respuesta, le hiciste espacio en el sofá.
Ya no tenias más frío, la cobija no era necesaria porque Ruv te abrazo sobreprotectoramente, compartiendo su calor. Durmieron rápidamente, en esos momentos te sentías, protegida.
"Я люблю вас.." susurro, antes de caer dormido.
"Oh, (T/N), mi vida, no necesito ayuda. No necesito nada más que a ti" hablo, en un tono sadico acompañado de su voz. Esa mirada que demostraba la locura, todos esos sentimientos de obsesión que eran dirigidos solo y para ti "Y sera mejor que te calles, o te romperé los dedos esta vez"
Cerraste la boca. Sabias que era capaz de hacer eso sin esfuerzo, sabias lo fuerte que era y que no dudaría en hacer de todo si eso significara que estarían juntos para siempre. Sería mejor no molestarlo mas.
"Asi me gusta" sonrió satisfecho con tu silencio "entonces, дорогойa, ¿te estás muriendo de hambre? ¿quieres que cocine algo? ¡oh ya se, debería limpiarte de nuevo! Después de todo... ya no puedes moverte sin mi" agrego mientras su sonrisa se ensanchaba.
Podias moverte, si, pero era costoso y Ruv facilitaba todo. Te cargo al estilo nupcial. Seria romántico si no te mantuviera encerrado en el sótano de la iglesia. Actuó como si nada hubiera pasado, como si no hubiera amenazado con romperte los dedos.
A el parecía encatarle la idea de que dependieras de el. Amaba, AMABA la idea de que el fuera algo necesario para ti. Que no pudieras dejarlo, que dependieras de el.
Odiabas la idea de depender de el, especialmente de el. Cada vez en la que le pedías ayuda, el se veia pertubadoramente feliz de ayudarte. Se notaba que te rompió la pierna apropósito, tal vez lo había planeado pero no quería hacerlo sin una excusa.
No te diste cuenta de que lo habías estado mirando:"¿que pasa con esa mirada мое солнце? ¿tienes miedo de que te deje caer?"
No querias verlo, no querias saber nada de el.
"No te preocupes, мое солнце, sabes que siempre puedes depender en mi"