Corrí lo más rápido que pude, no llegaba ni aunque volara.
Le hice seña al colectivo y el chófer me miró para seguir avanzando.
–Viejo puto -susurré para mi misma.
Empecé a correr más fuerte, tenía que buscar otro colectivo que al menos me dejara cerca.
Vi uno que arriba decía "CENTRO" entonces me apuré.
Llegué a la puerta y el chófer me sonrió con simpatía y abrió las puertas.
–Gracias, gracias, gracias, me salvó la vida
El me dedicó una sonrisa y después de pasar la tarjeta me senté en el primer asiento, haciendome notar lo mal que me sentía, había corrido 13 cuadras en 2 minutos y no daba más.
Me apoyé en el asiento y mi celular vibró.
AMOR❣️
Nere?
Que?
Podemos hablar?
A la noche, ahora estoy yendo a trabajar.
Contesté cortante, todavía me sentía mal por lo que me había dicho unos días atrás, pero cuando quise razonar, ya estaba frente al cine.
Me bajé y corrí las 2 cuadras que me quedaban para por fin llegar al teatro.
–Hola -Saludé a los presentes y una voz se hizo presente en mis oídos.
–Nerea, veinte minutos tarde... -pronunció con su voz que intimidaba a cualquiera.
Giré para mirarlo y ensayé en mi mente todo lo que tendría que explicarle.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
