Maybe? °Camren G!P°

Capitulo 35

POV. Lauren.

Solo yo sé cuánto me costó no decirle a Camila que la amo, cada que veía sus ojos heridos en esa habitación de descanso me veía inclinada a decirle que la amo mucho más que a mi y que no podría engañarla. Nunca más, no haría nada para lastimarla. Cobardemente huí de esos sentimientos y a cambio le dije que la quería, puedo decir que es un avance.
El almuerzo pasó sin mayor inconvenientes, en el almuerzo estuvo Keana y Vero, fue muy divertido, pude descubrir que la chica de pelo miel si tiene un sentido del humor un poco… retorcido, Vero a comparación de ella es un poco más tranquila. Mencionaron haber salido el viernes por la noche, a un tal INFERNO, Camz se sonrojó y nego con la cabeza cuando Keana lo mencionó.
Camz y yo pasamos juntas el fin de semana. Solo dormimos juntas, fueron los mejores días junto a ella. Desde que hicimos el amor el sábado por la mañana no sé volvió a repetir, fuimos totalmente inocentes una con la otra.
Solo fuimos capaces de separarnos el domingo por la noche, claro, no sin antes hacerla prometerme que el lunes ella y yo nos iríamos juntas al hospital.

Así pasaron dos días, con Camz alegrandome el día.
El martes antes de terminar mi turno Lucy me llamó y lo que me dijo no me hizo muy feliz, pero muy bien sabía que tarde o temprano eso pasaría.

—Tienes que cubrir otra guardia— ni siquiera se digno a mirarme, siguió escribiendo en las hojas sobre su escritorio.

—¿Qué es lo que hice?— claro, lo había olvidado, ella tomaba las guardias dobles como un castigo para la persona, entonces eso quiere decir que hice algo que la molesto o le trajo problemas.

—Nada, estoy corta de personal— la mire furiosa, hace mucho que no cumplía guardias dobles.

—No puedes…

—Oh si que puedo, soy tu jefa, ¿Lo olvidas?

—¿Qué es lo que hice? ¡DIME!

—Ya te lo dij…

—Y una mierda, ¿Qué es lo que hice para que me castigues? He cumplido con mis horarios y…

—Mentira— levantó su mirada de los papeles que firmaba —Hay registro de un día que saliste antes de tu hora

Mi ceño se frunce con enojo. Pero casi de inmediato se posa una sonrisa en mis labios, lo recuerdo, esa vez fui a ver a Camz a la casa de sus padres.

—Bien, ahora vete a sonreír a las embarazada— ahora ella es la que me mira con enojo.

—Oh claro que lo haré…

Salgo de su oficina y cuando me doy cuenta estoy marcando el número de Camz.

—Ya salgo… se me hizo un poco tarde.— podía escuchar su voz agitada, ocasiona que me ría, estoy casi segura que se olvidó que iría por mi, ya que de nuevo venimos en su auto.

—No vengas mi amor…

—¿Cómo?

—Tengo guardia doble… al parecer tengo una salida anticipada y ahora tengo que cubrirla— escucho como suspira. —Lo siento mi amor… se que cenariamos juntas hoy

—No tranquila. Sé muy bien cómo es nuestra rutina— apuesto a que tiene un tierno puchero en sus labios. Cuánto daría por besarlo justo ahora

—Prometo recompensartelo…

Se ríe —No es necesario, cielo. Ambas sabemos que esto podría pasar.

—Lo sé, pero no justo hoy— suspire con pesar.

—Te entiendo, pero no podemos hacer nada… anda, ve a hacer feliz a esas futuras mamás— ahora su suspiro es de felicidad.

—Mañana yo te haré feliz— sonrió como una idiota.