No Fue Mi Intención Amarte

XI - Diferente

— Paola ya esta listo el desayuno — Escucho que grita mi madre desde la cocina.

— Ya voy mamá — Le grito de vuelta.

— No se que tantas vueltas da esta muchachita — La escucho murmurar y sonrío

     Hoy mi humor esta mejor que ayer sigo confundida con respecto a Elian, sin embargo tome la decisión de darme una nueva oportunidad con sus lindos labios.

      Aún no quiero contarle nada a mi madre que tengo una especie de relación con él hasta aclarar toda la situación. Sin embargo no se como haré, no me siento con la confianza de llegar y decir "mamá mira es que ya tengo novio" no sé temo su reacción, yo sé que ya soy mayor de edad y puedo tomar mis propias decisiones pero toda mi vida siempre he tratado que todo lo que hago le agrade a mi madre, siempre he hecho lo que me dice, aunque deba pasar por las estupideces que hace Daniel.

      Temo que no este de acuerdo con ello, que se moleste conmigo y todo se vuelva incómodo en la casa.

     Pero supongo que son cosas por las que debemos pasar todas las personas cuando crecemos y decidimos hacer nuestras vidas.

     En muchos libros, revistas y documentales he leído que los padres deben dejar volar a sus hijos cuando crecen, pero mi madre no lleva muy bien ese consejo. He visto como le ha puesto trabas a mis hermanas en las relaciones que tuvieron en su adolescencia. Con Sandra fue el drama del año cuando decidió estar con su pareja actual.

      Por eso aun me sigue pareciendo raro que haya aceptado a Daniel tan fácilmente ¿Podría ser porque tiene dinero? o ¿Porque es un manipulador sin remedio?

     Dejo los pensamientos de lado para ir a desayunar no quiero que se me haga tarde.

     He quedado en salir con Elian luego del trabajo, allí es donde voy a intentar de nuevo la escena del beso para ver si esta vez será diferente.

     De verdad deseo que sea diferente, quiero vivir eso que describen que se siente en el momento de un beso. Aquello que he sentido en sueños.

      Llego al trabajo justo a tiempo, saludo a Dave que como siempre esta coqueteando con uno de los clientes y me posiciono en la caja del local para iniciar la jornada.

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      El día esta siendo algo pesado hoy la tienda tiene mucho movimiento, sale un cliente y entran como diez, hoy no nos han dado tregua. Al pobre de Dave deben de dolerle los pies, aunque encuentro raro que no me ha hecho ningún comentario hoy, es más me parece que esta un poco extraño. Esperare que no hayan clientes para preguntarle.

      A pesar de lo ocupado del día la incertidumbre de lo que pasará con Elián pesa fuertemente en mi pecho.

    Me gustaría que no todo en esta vida fuera incierto, saber cuando y como van a ocurrir ciertas cosas para tratar de cambiarlas... O sencillamente aprovechar el tiempo antes que sucedan.

     Me hubiese gustado aunque fuese duro saber cuando iba a morir mi padre, le fuera dicho tantas cosas que no pude decirle, dado tantos abrazos que ahora añoro. El calor de un padre no se consigue en cualquier lugar y menos el de un padre como el mío.

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     Se acerca la hora de salida y mi cuerpo es muy consciente de eso no por el cansancio sino porque sé que pronto lo veré.

— Son 15$ señora — La clienta me pasa un billete de 20 $, le doy el producto con su vuelto y ella me sonríe. Mi teléfono suena anunciando un mensaje.