Era un 14 de octubre se oían los abrumadores sonidos de la ciudad, y el horrible molestar de los carros en el pesado tráfico, quedaba claro que no se sentía ningún síntoma de paz, aunque en el rincón más alejado de la ciudad de oían las risas de tres amigas que disfrutaban de su última noche de festejo en un pequeño bar con el jazz mas irónico
--vamos es la hora de brindar- replico Penélope alzando su copa -alto que es esto- dijo Silvia al ver su copa era claro para las tres amigas que Silvia no avía bebido nunca, no solo por su inseguridad sino también por su cara de extrañeza al ver la copa en sus manos, a Keila no le extraño pues ya sabía que su amiga era una puritana -es tu primera vez tomando verdad- replico Penélope Silvia asintió con la cabeza -es solo un vino clásico, no te asustes- --¿esto me va a emborrachar?- pregunto Silvia con temor –no quiero que en mi primer día de clases tenga una cruda terrible- -no te preocupes tómatelo de a sorbos por si las dudas- Silvia asintió y tomo un pequeño trago –bueno no esta tan mal- replico Silvia -ya vez- replico Penélope
-cómo se las están pasando las mujeres más bellas del todo el bar- alzo la voz el mesero del bar -muy bien meserito lindo- dijo Penélope oye no te interesaría salir o ir a mi casa esta noche- -¡no!- alzo la coz Keila -que porque- dijo Penélope -bueno el hecho de que alguien entre a mi casa no me queda del todo claro... bueno es algo extraño- -que a ver chicas hay que disfrutar no, es nuestra última noche antes de empezar la universidad- dijo Penélope -si pero no- alzo la voz Penélope –además Silvia esta con migo verdad- -por supuesto que Silvia te apoya pero no toda queremos morir vírgenes o si- replico Penélope
-bueno veo que esta es una plática de chicas así que mejor me retiro- replico el mesero quien se avía quedado oyendo la plática -ya ven por su culpa ya perdí una cita- -bueno no es que esté de acuerdo con Keila, pero tiene un punto- replico Silvia
-hay vamos Silvia es enserio tu nunca has besado a alguien ¿verdad? - Silvia solo quedo callada con el comentario de su amiga - quieres que bese a alguien, pues basaré a alguien- en ese momento Silvia se alejó de la mesa y mientras caminaba buscaba a alguien atractivo obviamente no besaría cualquiera... después de caminar por unos segundos se dio cuenta que al fondo se encontraba un hombre solitario, era un hombre de un perfil amigable, Silvia se acercó y sin pensarlo lo beso en la mejía muy cerca de los labios -bueno un gusto- replico el hombre -perdón- dijo Silvia al acercarse al acercarse al sujeto se dio cuenta que era un hombre muy atractivo de ojos miel, un fornicarle cuerpo y por supuesto un olor que a cualquier mujer derretiría. –no te preocupes, me llamo Jorge- replico Silvia con una sonrisa tímida –yo me llamo Silvia, y perdona no quise incomodarte- -tranquila ya te dije no pasa nada. Oye eres una mujer muy hermosa quieres que mañana salgamos a cenar- Silvia quedo muy sorprendida – no crees que es demasiado pronto- -mira quien habla- Silvia dio una sonrisa tímida sabia a que se refería. Después de un rato ablando Jorge se despidió de Silvia
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AMOR CALIFICATIVO
Roman pour AdolescentsSilvia Navarro una señorita de 21 años que estaba en su cuarto año de universidad conoce a un hombre de 35 años llamado jorge salinas lo que no sabe es que ese hombre es su profesor de literatura el destino se encargara de ponerle retos y las perso...