Estoy sumergida en la canción que suena por la radio del auto, mi familia habla pero yo no presto atención, estoy completamente perdida en mis pensamientos, me enfoco en la canción y su melodía, en lo que que quiere expresar el artista, algunas veces siento que soy como una canción, a veces tranquila enérgica, analizadora, incomprensible, pero siempre termino creyendo que soy una típica adolescente con los típicos problemas.
Cuando llegamos a mi casa me siento en el living y me pongo mis audífonos, como se habrán dado cuenta me gusta la música, voy donde mi mamá y le aviso que estaré en el techo como me es de costumbre, antes de irme le doy un abrazo y camino hacia el patio, trepó el palto y cuando estoy cerca de el techo salto, me dirijo al baúl que está sobre el tejado, sacó la manta y el cojín que suelo usar, me recuesto a mirar las estrellas, La pregunta vuelve a mi cabeza ¿Quién soy yo? creo que no puedo definir realmente quien soy yo, como dije antes soy como una canción que tiene altos y bajos pero nunca se detiene, nunca se rinde, esa soy yo una persona que a pesar de todo sigue adelante ¿porque? porque la vida sigue y yo no me quiero quedar atrás, tengo sueños por cumplir y metas por lograr.
Si me preguntan quien soy yo, voy a responder que soy como una canción, puedo estar feliz, triste, enojada, puedo cantar hasta que mi voz se agote, puedo bailar hasta no dar más, puedo ser yo sin importar si alguien me va juzgar, lo importante es que soy tal y como quiero ser, única y diferente y eso nadie lo va a cambiar.
Después de mirar fijamente el cielo por unos minutos, me siento a mirar la ciudad, no estoy en un lugar tan alto pero puedo apreciar bien las calles los árboles y las casas, están tranquilas, el viento sopla y las hojas vuelan calle abajo, el cielo se nubla, al parecer va a llover pero yo no me inmuto, me coloco nuevamente mis audífonos y comienzo a bailar mientras la música suena.
Sentir eso es lo que hago, siento las gotas cayendo por mi piel, siento la música recorrer mis oídos, muevo mi cuerpo delicadamente al ritmo de la música siguiendo el ritmo y la melodía, mi cuerpo se esta agotando, mi respiración es agitada y ahí es cuando caigo no puedo más, intento controlar mi respiración, inhalo, exhalo lentamente, la canción está llegando a su fin igual que esta historia, no se que pasara después de esto.
Lo único que me queda por decir es que sean ustedes mismos corran, salten, griten y lo más importante sientan, sean libres, sean ustedes mismos y por último nunca pierdan su esencia por que así como son, son únicos y diferentes .
