Aquí estaré

Despedida real

Era un hecho que Andy yo terminamos pero, la diversión en LA estará brutal. Enserio espero que todos ahí sepan quien tiene el control.

En el vuelo todo estuvo normal. Eran varias horas, teníamos que atravesar casi todo el país y Andy y yo hablamos como pericos, como cuando eramos amigos.

Al llegar esperamos el vuelo donde venían Lisa, Valery y casualmente Gus. Obviamente sólo estábamos ahí por Lisa y Val, eran aprox dos horas de espera. Almorzamos, nos tomamos algunas fotos y la verdad, fue como si nada. Como debía de ser.

...

-¿Qué haremos? ¿Iremos directo a la universidad? ¿Iremos a la playa?
-Tranquila Val, tenemos literalmente toda la semana. -Le dije a Val con tono de ternura.-

Val se emocionaba mucho siempre.

-Nuestra habitación es doble, no tienes que quedarte con Andy. -Me dijo Lisa.-
-Gracias. Enserio deseaba que me ofrecieras quedarme con ustedes, no sé si siga aguantando mis ganas de gritarle a Andy que no quiero verlo nunca más.
-Claro que siempre contarás conmigo, somos mejores amigas por siempre.

Lisa me entendía más que nadie. Desde que iniciamos la preparatoria ha sido muy gentil y adoro que seamos las mejores amigas.

Tenía un plan de contingencia por si no quedaba otra alternativa que quedarme con Andy, pero ahora no lo usaré. Queda descartado, la verdad era algo cruel.

-Me quedaré con Lisa y con Valery. Te veo... (ojalá nunca, pensé) después.
-Con cuidado.

Nos fuimos del aeropuerto directo al hotel. Lisa y Val tenían mucha energía para tantísimas horas de vuelo que fueron, me obligaron a salir a comer fuera del hotel y a la playa. Sí lo necesitaba, distraerme, pero también necesitaba tirarme a llorar y comerme una pizza entera viendo dramas adolescentes de mala calidad. Por otro lado, mi lado perverso estaba muy alterado, quería conocer a Billie, decirle algo.., no decirle nada. En fin, había mucho por hacer.

...

-Anna, ¿no crees que estando aquí Andy vaya a pasar más tiempo con Billie?
-Es obvio, sólo espero que lo haga con discrec-

Justo cuando nos sentamos en ese pequeño restaurante, Andy iba entrando al lugar con tres personas más. Una de ellas era Billie.

-¡¿Cómo se atreve?! ¡Tiene que irse! Si no sale del lugar enseguida yo lo golpearé.
-¿Y si mejor nos vamos nosotras? -le dije a Val que estaba enfurecida.-
-No amiga, esta batalla de incomodidad la ganamos nosotras.

Andy sí se puso nervioso, mueve mucho las manos cuando lo está y además comienza a mascar chicle... Las demás personas no tienen idea de qué pasa, ni siquiera Billie a la que me es inevitable dejar de mirar.

Somos estilos totalmente opuestos. Ella usa ropa olgada y de colores más... ¿llamativos? Yo nunca he salido del rojo/negro/café. Ella tiene ojos azules brillantes y enormes. Sí era muy linda en persona, lo reconozco.

Entonces Billie volteó a verme y frunció el ceño. Me puse nerviosa pero no bajé la mirada.

-Anna si quieres bajar la mirada no hay problema, es demasiado pronto para que reacciones tan... bien.
-Déjala Lisa, si ella dice que puede, puede.

Billie no dejaba de mirarme pero estaba muy seria, yo sabía en el fondo que mi rostro era de ira, estaba al borde del llanto. Necesitaba irme.

Billie desvió su mirada a sus acompañantes. Recibí enseguida un mensaje de Andy: Sal, tenemos que hablar. Me levanté y salí primero y detrás de mí venía Andy.

-¿Qué se supone que intentabas hacer?
-¿Qué haces aquí? ¿No te bastó con verme para irte?
-No sabía que estarían aquí...
-Pues sí y no tenemos intención de irnos. Asi que adi-
-Anna. Lo siento...
-¿Q-qué?
-Siento que esto haya pasado, no tengo idea de cómo repararlo. No sé si acercarme a ti o alejarme por completo, si hablarte, ignorarte o... comenzar de cero.
-Yo estudiaré en la misma ciudad en la que tú estarás haciendo música... Y en la misma ciudad que... Billie.
-Sabíamos que era un riesgo ser novios. Sabíamos que esto podría pasar.
-Sí pero no pensé que tan pronto, no pensé que sucedería...

Iba a llorar pero si lloraba iba a caer en los brazos de Andy.

-Perdóname Anna. Si no quieres volver a ser mi amiga, lo entiendo y lo sobre llevaré.
-Y... si tú quieres estar ahora con ella, pues no te detengas. No creo que tengamos que encontrarnos todo el tiempo ¿o sí?
-Espero que el no verme te ayude a perdonarme... Siempre voy a quererte.

Le sonreí a Andy y me di la vuelta. Algunas lágrimas se deslizaron por mis mejillas pero ya no importaba. Al pasar de nuevo por la mesa de Billie ella notó que yo estaba llorando un poco pero ignoró la situación.

Me senté con las chicas y nuestro almuerzo ya estaba en la mesa. Comí porque después de permitirme sentir tristeza me permití sentir cualquier necesidad y emoción humana, aún así, me costaba trabajo pasar cada bocado. Andy se sentó otra vez con sus amigos y pasó el tiempo como si nada.

Cuando nos fuimos Lisa (la chismosa profesional) volteaba de vez en cuando a verlos, así supimos que Billie y Andy estaban hablando sólo entre ellos. Quizá le estaba contando todo... yo estaba rota de mil formas.

No le dije te quiero a Andy cuando él lo hizo.

Me quedé parada y las chicas voltearon a verme.

-¿Qué pasa?
-Yo... nada, acabo de olvidarlo. Vámonos.

Así supe que no concluí nada con Andy, no le dije te quiero, no le dije adios, no me despedí y sí se sentía raro pero algo me decía que no había, de hecho, terminado esta situación.

...