Mi Pobre Diablo (Yoontae)

Capítulo 22

Se supone que debo estudiar ¿verdad?

Que debo ir a la universidad pero llevo más de una semana junto a este maravilloso hombre que no me interesa faltar a clases.

Intenté hacerlo pero según él habló con el director y puedo faltar lo que yo quiera, bueno lo que queramos porque al parecer jiminie tampoco a ido a clases.

Ojalá sea así porque donde que Shownu intente hacer algo, lo mataré.

Nunca en mi vida me había sentido tan querido como ahora, no solo por el maravilloso sexo que tenemos y hemos tenido más que nunca, parecemos conejos, que hasta los demás se salieron de la casa dejándonos solos cuando nos pusimos románticos en la sala.

Me encanta tener sexo con él, es increíble el aguante que tiene, es increíble que medio me toca algún lugar y ya me ablando a su toque.

Me gusta, me encanta, lo quiero.

Llevo media hora despierto viendo lo hermoso que es, apreciando su rostro, su cuerpo que está desnudo a mi lado.

Las ganas de ir al baño llegan a mi, dejo un casto beso en sus labios y me levanto.

Ya cambiado de ropa por algo de él, nuevamente, ya hasta se me hizo costumbre, solo entro a su enorme armario y agarro cualquier cosa, negra por supuesto, como todo el resto que esta en su armario.

Bajo hacia la cocina, desde las escaleras veo que ya es medio día, entro saludando a todos los chicos y voy donde nana a darle un beso en la mejilla.

Ella me hace sentir ese amor maternal que nunca tuve, en tan poquito tiempo me hizo sentir mucho.

— Veo que ya despertaste mi niño ¿deseas algo de comer?

— Si nana, ¿puedo hacerlo yo mismo?

Niega riéndose y me da ternura.

— Ve a sentarte en el comedor, ya te llevo tu comida.

Dejo otro beso agradeciendo y voy a la mesa de la cocina donde esta el resto comiendo, me siento viendo que me observan confundido dejando de comer.

— No me gusta comer solo — vuelven a su plato luego de asentir.

— Tae — la voz de sejin hyung me hace observarlo al otro lado de donde estoy — ¿Ya lo sabe? ¿Le has dicho?

Asiento mientras todos los demás nos observan raro.

— Sí, ya me contó todo — una voz ronca y recién despierta nos alerta.

Giro viendolo que esta sin camisa mostrando todo su cuerpo y unas ligeras marcas rojas esparcidas por todo este.

Se sienta a mi lado rodeándome por completo dandome un beso en la mejilla.

— Buenos días — me acerco a besarlo.

— En serio voy a vomitar arcoiris — nos separamos cuando nam hyung daña nuestro momento.

— Sejin — lo llama.

— Si señor.

— Gracias por lo has hecho por él, por lo que hiciste hace años, lo ayudaste, lo salvaste, por ti tengo a mi hermoso tigre a mi lado.

Chillo enternecido escondiéndome en su cuello, coloca su mano en mi muslo apretandolo a su paso, dejo una mordida en su hombro haciéndolo reír.

— No es nada señor, sé que es un buen niño, solo le tocó vivir un mal momento pero sabe defenderse, si le dió la golpiza a namjoon, estoy seguro que podrá con todo.