Dreams Fulfilled

2. Novias

Los dos íbamos de regreso a Seul por la mañana, volviendo a coger el transporte público. Llovía muchísimo, el ruido de la lluvia tapaba incluso el ruido del motor del autobús, y los sollozos de Donghae, que no podía parar de llorar. Tenía la cara enrojecida y los ojos inchados al igual que la nariz. De ella, comenzó a brotar un liquido blancuzco/transparente que sin el darse cuenta comenzó ha correrle hasta el labio superior.

Saque un pañuelo de mi bolsillo derecho y se lo llevé hasta la nariz para limpiarle los mocos

-¿Que haces? - preguntó sorprendido.

-Venga, sopla. Hacia fuera.

-Esto es demasiado vergonzoso... – me dijo, frunciendo el entrecejo.

-Donghae... solo por hoy, deja que te cuide, ¿De acuerdo?.

Donghae comenzó a soplar hacia fuera y le soné con cuidado, tenia la nariz irritada y no quería hacerle daño. La escena fue realmente graciosa. Los dos nos acabamos riéndo, pero, por el contrario, la mujer que se sentó a nuestro lado en el autobús, hizo un ruidito a penas sonoro de asco y desaprobación, se levantó y se sentó al principio del autobús, alejada de nosotros.

-¿Que le pasa a esa vieja? - rompí el silencio de golpe enfadado.

-Debe pensar cosas que no són- rió-  ¡Que gracioso!.

- ¿Cosas que no són?

-  Hyung... debes aceptar que sonarme los mocos no ha sido nada normal – dijo mientras se secaba la cara con la manga del jersey- Debe pensar que tu y yo somos ...- paró. Me miró y negó con la cabeza. - Nada.

Que el y yo... Cierto que no era muy normal que un hombre le quitase los mocos a otro,  aunque tampoco era normal que un hombre le quitase los mocos a una mujer, igualmente, no entendí ese rechazo por parte de la anciana hacia nosotros.

-Hyung... creo que debería buscarme una novia antes de debutar, deberíamos buscarnos una novia... por que cuando debutemos, la empresa no nos dejará acercarnos a ninguna mujer...

-¿Quieres tener novia? Donghae... creo que estamos demasiado ocupados con el grupo para perder el tiempo con una chica.

- Mi padre me dijo que me buscase a una buena chica que me cuidase y... quiero encontrarla.

-¿A caso te gusta alguna chica? - dije al ver que tenía ganas de que saliese el tema.

- Bueno... - dudó- gustar gustar no exactamente – dijo sonrojándose- solo... hay una chica por la que siento un poco de interés.

-¿Es Jessica de nuevo ?

-No.

-¿Sunny?

-Has vuelto a fallar- rió

-¿Sooyoung, Hyoyeon, Seohyun, Yuri, Taeyeon, Yoona ,Tiffany? ¡Oh vamos!, ¡Me muero de la curiosidad!, ¿Quien es? ¿Es Yuri cierto? Se que es Yuri, he visto como la miras.

-Solo la encuentro interesante..- me respondió aun sonrojándose más.

-Primero la encuentras interesante, después te gustará, querrás salir con ella, cogerla de la mano, besarla, perder la virginidad con ella, casaros y quien sabe si tener hijos... Donghae las mujeres no traen más que problemas.

-¿Quien te ha dicho que yo sea virgen? - me preguntó, sin borrar la sonrisa de su rostro.

-Bueno...- dudé- nadie, pero yo lo se, se que nunca has tocado a una mujer.

-¿Y tu, hyung?- pregunto con curiosidad.

-Dongahe ya sabes... - respondí con decepción- soy feo, bajito, escuálido, tengo la voz extraña y un sentido del humor un poco raro... no es que les llame la atención a las mujeres

-No eres para nada feo.

-¿Entonces por que la empresa se empeña en taparme media cara siempre? ¿Por que mis fotos siempre son las que hay que repetir?.

-Le gustarás a quien le tengas que gustar. Ademas, hay algo de ti que, a mi al menos, me encanta.

-¿Mi sonrisa? - dije abriendo al boca de par en par, sacando a relucir todos mis dientes y mis encías de forma graciosa

-No... esto – toco suavemente el final de mi mandíbula...- aquí – se paró en un punto fijo - es algo extraño, no se si sera una deformación o no....

-¿Me estas llamando deforme Donghae?- Reí.

-No, jajajaja – sonrió- solo creo que tu mandíbula es realmente sexy.

-¿Tu crees?- le sonreí poniendo mi dedo pulgar e indice en forma de L, colocándolo bajo mi barbilla en simbolo de victoria.

El trayecto se hizo realmente corto, Donghae quedo rendido en mi hombro derecho durante la última hora del trayecto. Sentía su respiración en mi cuello y eso... eso me excitaba de una manera desmesurada, aunque no sabia porque. ¿Tal vez por que hacia tiempo que no estaba asi con alguien? O, ¿Por que era un pervertido que reaccionaba al menor contacto físico?.

Llegamos a Seul, y aunque no llovia, el cielo estaba gris impidiendo que el sol tuviese su protagonismo en el cielo.

Llegamos a la empresa y como no, el manager se nos tiro encima: “ No debéis abandonar al grupo por una tontería como esta”, “ Donghae deberías haber regresado antes”, “ La muerte de un familiar es motivo para faltar un día a tu entrenamiento, no cuatro días”, “Eunhyuk eres un despreocupado” etc.
Llegó un momento en el que yo deje de escuchar completamente. Tal vez yo haya sido un irresponsable por irme a altas horas de la noche en busca de Donghae... Pero su padre estaba muerto, ¿Como podía decir que eso era una tontería?. Donghae comenzó a llorar de nuevo.

-No llores, ¿Acaso no eres un hombre? - Le gritó el manager de golpe colocándose delante de Donghae

-Ya basta! - grite levantándome de la silla, poniéndome en frente de el- ¡¿Eres tan estupido que no puedes ponerte en su piel?! ¡¿A caso no eres consciente de que esta sufriendo?!, ¡¿No lo ves?!

-Eunhyuk, para.... - me estiró del comienzo de la manga haciéndome un gesto de sumisión.

-No Donghae, no pienso callarme, aunque hubieses querido quedarte un mes y retrasar el debut, estabas en tu derecho.

-Posiblemente- habló el manager interrumpiéndome- si, estaba en su derecho, pero no en el contrato de la empresa, y debéis cumplir dicho contrato.

Media hora mas tarde, salimos de la sala donde nos habíamos reunido con el manager.

-Oppa!! - se oyó de fondo

Yuri, vino corriendo hacia nosotros y  abrazo a Donghae.

-Oppa siento mucho lo de tu padre, nos enteramos hace dos días, lo sentimos mucho, si necesitas algo no dudes en pedir nuestra ayuda sin dudarlo – le dijo abrazándose con fuerza a el.

-Gracias- le dijo este abrazándola y sonriendole

Realmente YuRi esta una chica bonita, pero así mismo no podía evitar sentir celos de todas las chicas que mostraban algún signo de interes en el. Era mi amigo... mi amigo.