Pact With a Witch

Capítulo 1: Esa extraña chica pt3

Al escuchar el grifo del baño, me desconcentro repentinamente de la conversación haciendo difícil oír bien su nombre, y aunque, realmente quería saberlo, le recomendé que se fuera, ya que no quería que pasara algo peor, además de que quería conversar con mi amigo sobre la situación. Ella no opuso resistencia y bajó levemente la cabeza dando a entender que accedió a mi petición, y, en un abrir y cerrar de ojos desapareció de aquel lugar. Segundos después de esto, la puerta del baño de chicas se abrió con algo de lentitud dejando ver poco a poco la musculosa figura de Didac

-¿Ya se fue la perra esa? –Fue lo único que dijo

-¡¿Pero qué mierda tienes en la cabeza idiota?! –Pasé de estar tranquilo con la compañía de la chica a estar emputecido con la actitud de Didac- ¡Ni siquiera pudiste decir lo siento!

-¡Mierda, lo siento! ¡¿Vale?! ¡No sé lo que me pasó ahí dentro! –Dijo enfurecido- ¡Sabes cuánto me enoja que se rían de mis dibujos!, ¡solo quería gastarle una broma para que se asustara y me dejara en paz!

-Didac... Estaba medio desnuda, la tenías acorralada contra los lavabos, tenías sus muñecas atrapadas, le rompiste la blusa ¡Y le estabas agarrando el pecho descubierto! ¡Eso no es hacerle una puta broma! ¡Son claros indicios de violación!

-Sí, sí, quizás me pasé un poco – ¡¿Un poco dice?! ¡¿Acaso no sabe lo grave del asunto?!- Pero cada vez me ponía más cachondo, además tampoco es que se resistiera mucho – ¡¿Esa es la mierda de excusa que da?!

-Maldita sea Didac –Respire hondo y me tranquilice... Creo que estaba alzando mucho la voz- Que voy a hacer contigo. Debería yo mismo denunciarte... Si no fueras mi maldito amigo

-¡Mierda, Jordi! ¡Ya te pedí perdón!

-¡¿A mí?! ¡¿Y a ella que?!

-¡Deja de dar la puta lata! ¡Maldita sea! Mañana le pediré perdón cuando la vea ¡¿Si?!

-Más te vale –Fueron mis últimas palabras ante de salir de la universidad rumbo a nuestro departamento.

Ya habían pasado algunas horas de lo ocurrido en la universidad y ya estábamos almorzando mientras veíamos las noticias del país. Esta nos relataba que ya hacía 3 días que el pequeño Edward, Hijo de un famoso cantante y una actriz de renombre, se hallaba perdido y no tenían noticias de él. Obviamente mostraban fotos de él, del lugar donde se perdió y a algunos policías en la búsqueda, por si alguien se animara a ayudar a buscar. Lo curioso del caso es que desapareció a plena luz del día, como si de una obra de magia se tratase, mientras la Sagrada Familia estaba de vacaciones de verano en Barcelona.

Esto me hizo replantearme la seguridad de hoy en día en Barcelona, ya que era muy difícil que un niño se hubiera perdido con tantos guardias y tanta gente, y menos a plena luz del día. Decidí apagar la tele, pues ya me estaba deprimiendo ese tipo de noticias, y no me iba a entrar en provecho la comida que tenía frente a mí.

Yo iba terminando mi plato para cuando me dicuenta de que Didac apenas había tocado el suyo. Su cara no era para nadainspiradora, tenía ojos cansados, mejillas rojas, una mueca apagada, algo desudor corriendo por su rostro, y lo que más me preocupaba es que tenía fiebre,cosa que me vine a dar cuenta cuando le toque su frente. Lo tome casi por lafuerza y lo lleve a la cama. Al quitarle la ropa, excepto la interior, sucuerpo estaba sudado, caliente y tembloroso, así que fui corriendo al baño poruna aspirina y por una toalla mojada para su frente. Luego de unos minutos queparecieron horas, su fiebre bajó considerablemente y ya era hora de limpiar lamesa, los trastes e irme a la cama, que, para mi suerte estaba en la mismahabitación, así puedo vigilarlo por si la cosa se pone peor.