Solo un juguete... BakuDeku/TodoDeku

⊹El inicio de todo⊹

El comienzo de un nuevo día en la academia daba inicio para los estudiantes de la clase 1A, quienes se preparaban para comenzar sus clases a primera hora de la mañana. Un entrenamiento sorpresa por parte de Aisawa-sensei se había hecho presente cuando sin piedad prendió música por los altavoces de los dormitorios despertando a todos de golpe.

Se podía notar en sus caras el cansancio por ser despertados a las 5 de la mañana, pero a un peliverde todo el cansancio había desaparecido cuando diviso a Katsuki con cara de pocos amigos, rodeado de su grupo de "idiotas" como el solía decirles, verlo un día más era tan emocionante para el pecoso, después de mantener una relación de 6 meses en secreto de sus amigos más cercanos, era algo increíble el que no se descubriera y nadie notará nada.

Nunca hablaban en la academia pero se veían cada noche en los dormitorios de alguno de los dos, debido a el peso de las actividades escolares  que ambos adolescentes se fueran antes de los demás no era raro, puesto que se sabía que eran los que más se esforzaban, así que nadie decido protestar sobre aquello, principalmente por que no era raro que Katsuki desapareciera antes que los demás cuando de dormir se trataba, puesto que era alguien que siempre dormía a las 8 pm.

En la habitación solo eran besos y caricias, jamás llegaron a tener algo más íntimo que aquello, principalmente por que Izuku tenía algo de miedo y Bakugou solo aceptaba sin decir nada.

El entrenamiento dio comienzo, solo se podía escuchar los quejidos de los alumnos al realizar cada una de las actividades, el pecoso no podía dejar de mirar al rubio, puesto que se le hizo raro que en la noche no se dirigiera a su habitación, decidió dejar de pensar en ello ya que muy probablemente se quedará dormido en su habitación y olvidará decirle algo a él.
Odiaba no poder expresarse abiertamente sobre lo que sentía por el rubio, pero el otro no quería que se supiera por el momento lo que ellos dos tenían, así que Izuku simplemente dejo de insistir pero deseaba mucho poder besarlo en esos momentos, que le dijera palabras dulces en su oído y acariciar su cabellera rubia.

El entrenamiento iba mejor de lo que esperaba Aisawa, sin embargo, le divertía ver como después de 2 horas seguían quejándose, a las 7 am comenzarían las clases normales en la academia así que dio por terminado el entrenamiento para que pudieran bañarse y cambiarse el uniforme, mientras el los esperaba en el salón de clase, lo que nadie creía ya que esté se dirigía hacia la sala de profesores y dormía al menos unos 20 minutos antes de las 7 am.
Todos los estudiantes regresaron a los dormitorios así que el pecoso decidió interceptar al rubio y llevarlo a una zona no tan transitada para poder hablar a solas y tal vez tener un beso de buenos días.

- Qué mierda quieres, Deku de mierda?

El rostro del rubio mostraba un cansancio inmenso y sus ojos tenían unas pequeñas ojeras, lo cual era raro si es que el había ido a dormir desde temprano la noche anterior.

- Solo quería decirte que estuviste genial en el entrenamiento de hoy, te veías genial!! Haz mejorado muchísimo y tus movimientos son cada vez más geniales!! No digo que antes no lo fueran, solo que ahora son mucho más, no que no pudieran ser más geniales o algo por el estilo • • •

Los susurros de Izuku hicieron que Katsuki explotara y lo callara con un beso algo forzado de su parte, estaba cansado y no estaba para escuchar los balbuceos del más bajo, lo soltó y se fue del lugar dejando a un pecoso totalmente atónito y sonrojado, puesto que no era habitual que el rubio tuviera la iniciativa de besarlo.

A la hora de clases Izuku no dejaba de sonreír por aquel beso que aún que fue algo rudo de parte del más alto, estaba tan contento de poder ver a Bakugou en la noche y poder repetir aquel beso de una forma más linda y si era posible repetirlo más de mil veces, su alegría y ansiedad por que el día pasará mucho más rápido lo a tonto un poco haciéndolo fallar en alguna que otra pregunta que le hacían lo cual era inusual para los demás en la clase.
A la hora del almuerzo su grupo de amigos comenzó a preguntarle si se encontraba bien o algo le preocupaba puesto que era muy extraño verlo tan distraído.

- Deku-kun te encuentras bien?, haz estado tan fuera de si que es sorprendente que te equivoques en algo.- Uraraka lo miraba de pies a cabeza buscando algo que le diera alguna señal de lo que estaba pasando.

- Uraraka-san tiene mucha razón!.- Iida mostraba su típico movimiento de brazos.- Sabes que cualquier cosa que necesites puedes decirnos después de todo somos amigo.

- Kero

Los cuatro amigos miraban a Midoriya, Todoroki sin decir nada se podía notar también su preocupación hacia su querido amigo pecoso, los nervios se hicieron presentes para el chico al darse cuenta que aquella ansiedad era tan notoria que había hecho preocupar a sus amigos, con las pocas fuerzas que tenía les comento que estaba bien y que no se había dado cuenta de lo obvio que había sido, pero no tenía nada malo y que en unas horas se iría.

Después de un estresante día finalmente había llegado la noche y eso solo significaba una cosa la cuál lo emocionaba demasiado.

Volver a ver a Bakugou...

Era lo que se repetía en su cabeza, y lo emocionaba enormemente después de todos esos 6 meses el compartir por las noches la habitación de Bakugou y la suya, le calentaban el corazón como nunca había sentido a lo largo de sus años de vida, puesto que Bakugou cambiaba aquella actitud grosera por una más tranquila y serena.

Las 12 de la noche se hizo presente, pero no había señales del rubio, el pecoso solo se acorruco en sus rodillas para consolarse y comenzar a llorar en silencio hasta dormirse.