Luego de lo de James mi relación con Bella no había tenido mas complicaciones, a menos que llamara así al hecho de que Bella insistía en que yo la convirtiera y yo claramente me negaba, había vivido el mejor verano de mi vida, también el mas lluvioso pero sin duda el mas feliz de mis mas de cien años, había aprendido a conocerla; y había comprobado todo lo que mi corazón me dictaba, y ella no era solo lo que yo creía sino mucho mas, jamás creí que podía llegar a amar tanto a alguien. Actualmente ya casi me había sintonizado al sonido de los latidos de su corazón, y mas aun lo rápidos que sonaban cada vez que me le acercaba, ya me había acostumbrado a lo dulce de su aroma, y ya ningún otro olor humano causaba efecto en mi, ya que después de haber bebido la sangre mas dulce en la faz de la tierra, y haber logrado detenerme por el amor que siento hacia Bella no había nada que pudiera superar eso.
Hoy es un día especial, aunque Bella lo considere catastrófico, hoy ella esta de cumpleaños, y Alice ha pesar de lo mucho en que insistió que no quería ni regalos, ni saludos, ni menos una fiesta, o algún tipo de celebración, aunque Alice hizo caso omiso a sus peticiones y organizo una fiesta en nuestra casa, todos estaban tan conmocionados que hasta Emmet convenció a Rosalie y adelantaron su regreso para estar presentes, y claro era obvio si no celebrabamos un cumpleaños real desde hacia mas de 70 años.
Como de costumbre llegamos temprano al instituto, habian solo unos kuantos autos apracados a cierta distancia del nuestro, yo estaba un poco nervioso, no sabia si saludar a Bella o no hacerlo, no sabia que tan seria era su decisión de no querer asumir que hoy era su cumpleaños, aun estábamos dentro del auto, Alice hacia una lista mental es un cabeza de lo que aun le hacia falta para la fista, de pronto senti el ruidoso motor del auto de Bella, Alice estaba tan pendiente de sus propios asuntos que ni se habia percatado de lo cerca que venia Bella, baje del auto en menos de un suspiro, y mi pequeña monstruito personal hizo lo mismo, aunque antes de cerrar la puerta tomo de la guantera el pequeño regalo que habiamos hecho para Bella, ella había puesto como exigencia que no gastara ni un centavo, y así lo había hecho, bueno el cd costaba un par de dolares pero mmm eso no era nada, ad+ lo habia comprado Alice, me recosté en mi auto mientras Bella se estacionaba, aun no lograba entender como podía gustarle esa enorme camioneta, que además de ruidosa era muy lenta, si ella me hubiera dejado yo ase mucho le hubiera comprado un auto mejor y mas nuevo, pero ella era muy obstinada, no quería que yo gastara nada en ella, como si a mi me faltara el dinero, yo no entendía porque Bella tenia que trabajar, cuando en mi casa había montones y montones de dinero, y para que decir de las cuentas de los bancos que tenia Carlisle, y hasta nosotros.
Me recosté sobre el borde de mi auto en espera de su llegada, cuando bajo de su camioneta, nuestras miradas se cruzaron en un breve par de segundos, y sus ojos brillaron intensamente, llevaba 6 meses agradeciendo cada dia tenerla a mi lado, agradecía el que ella me amara, el que aceptara mi secreto y no le importara, ella sabía todo de mi secreto y lo extraña que era mi familia, sabía que ninguno de quienes aparentaban ser mi hermanos lo era, sabía el motivo de nuestra peculiar forma física, nuestro mas importante secreto, que a cualquier humano le hubiera quitado el sueño, éramos monstruos y ella lo sabía, aunque tratábamos de ser en lo posible lo mas humanos que podíamos, no lo éramos y eso nadie podía cambiarlo aunque tratábamos de ser en lo posible lo mas humanos que podíamos, no lo éramos y eso nadie podía cambiarlo. Aunque por cierto nuestra forma física era en lo único que nos parecíamos, y eso se debía a nuestra condición de vampiros; ella también sabía que el extraño color dorado de nuestros ojos se debía a la mutua elección de vida que habíamos escogido junto a mi familia, al negarnos a lo que nuestra naturaleza nos pedía, y en vez de beber sangre de humanos, bebíamos la sangre de animales, Bella me conocía, casi en todos los sentidos y a pesar de todas mis rarezas y del hecho de que yo ni siquiera era humano me amaba, y estoy seguro que tanto como yo a ella.
sabía el motivo de nuestra peculiar forma física,
Cuando despego su mirada de la mía y vio a Alice junto a mi, sus ojos se entrecerraron y sus cejas se juntaron, lo supe, ella estaba decidida no quería cumpleaños, aunque a Alice eso le importo muy poco, y se me adelanto para acercarse a ella antes que yo, mientras Bella aun cerraba la puerta de su camioneta, cuando se volvió hacia nosotros y camino aun con las cejas juntas, tanto q asta me saco una sonrisa verlas,.
Vamos Edward ella no puede ser tan testaruda.- pensó Alice. Yo solo movi mi cabeza, Bella era la persona mas impredecible que yo conocía, pero esta ves estaba casi seguro de que hablaba en serio.
-¡Feliz Cumpleaños Bella!.- le dijo Alice con una amplia sonrisa.
A lo q ella respondió.- ¡Shhh!.- mirando a nuestro alrededor, para comprobar si alguien la había oído, lo que termino por demostrarme, que esta vez tenia razón, Bella no quería celebrar su cumpleaños, ni menos que alguien se enterara, y yo por mi parte odiaba este hecho, todo era mi culpa, ella no estaría tan obsesionada con cumplir años si yo también los cumpliera, no tendría problemas con tener mas de 17 si yo los tuviera, Bella no quería ser mayor que yo, no estaba dispuesta a tener una relación con alguien que fuera menor que ella, aunque ahora eso ni siquiera contaba, nadie notaria que yo soy menor que ella, un año no es nada, pero yo se que la mayor preocupación de Bella es cuando pasen mas, cuando ella tenga 25 o mas, y yo en mis malditos y eternos 17, yo dejaría la inmortalidad por estar junto a ella, por vivir una vida normal, pero no puedo, lo que me enfurecía, era por que eso tenia que importarle, yo tenia mas de 100 años, y estaba enamorado hasta los huesos de una chica de 18 primaveras.
Ambas caminaron hasta mi, yo solo sonreí para Bella lo que realmente ya había pasado a ser para mi una reacción espontanea mas que un pensamiento.
-¿Cuándo quieres abrir tu regalo? ¿Ahora o luego?.- pregunto abruptamente Alice, omitiendo claramente la cara de enfado de Bella.
- No quiero regalos.- dijo esta muy bajito, con el claro propósito de que nadie la oyera y así nadie se enterara de que hoy cumplía años.
- Vamos Edward ayúdame a convencerla.- Protesto Alice en su fuero interno, movi mis ojos en señal de no y ella se rindió.- Entonces luego.- pensó con desgano.
- Vale… tal vez luego ¿Te ha gustado el álbum de fotografías que te ha enviado tu madre? ¿Y la cámara de Charlie?.- Pregunto Alice, quien me había dicho ase varios días cuales serian los regalos de Bella, aunque por la cara de sorpresa de ella supe que ni siquiera los había abierto.
- Si, son maravillosos.- mintió Bella sin animo, pero Alice ya la conocía bastante, y aunque no hubiera sido así igual hubiese sabido que estaba mintiendo, asi q m dijo pensando .-entonces ni siquiera los había visto.- yo solo cerre los ojos, a lo que Alice contestó .- Esto no esta nada bien Edward, bueno, no importa esta noche usaremos bien el regalo de Bella te lo aseguro, además así podremos demostrarle a Rene que somos una familia de lo mas normal.
- A mí me parece una idea estupenda. Solo te haces mayor de edad una vez en la vida, así que lo mejor es documentar bien la experiencia.
Pero Bella no estaba por colaborar.- ¿Cuántas veces te has hecho tu mayor de edad?.- le pregunto con sarcasmo.
Alice reprimió una sonrisa, y se aguanto las ganas de sacar la lengua, y solo contestó.- Eso es distinto.
Justo en ese momento Bella quedo en frente de mi, le tendí la mano y me la tomo con fuerza, yo le respondí el gesto apretando suavemente la suya.
Nos miramos directamente a los ojos y el chocolate de los suyos me sumergió en un sueño de que solo desperté por el ruido de su apresurado corazón; Luego mire sus labios de ceda y los recorrí con la yema de mis dedos mientras le decía.- Así que no me permites que te felicite por tu cumpleaños ¿correcto?
- Si correcto.- Contesto Bella con voz monocorde.
- Solo me estaba asegurando.- En verdad hubiera deseado que hubiera cambiado de idea. – La mayoría de la gente disfruta con cosas como los cumpleaños y los regalos.-
Alice soltó una alegre carcajada y mientras ella decía.- Pues claro que lo disfruta se supone que hoy todo el mundo se va a portar bien contigo y te dejara hacer lo que quieres, Bella ¿Qué podría ocurrir de malo?.- Yo pensaba en mi interior ¿Por qué Bella no podrá ser aunque sea un poquito mas normal? Quizás así no me costaría tanto saber que esta pensando.